Herpes: qué es, síntomas, tipos y tratamiento

El herpes es una infección viral causada por el virus del herpes simple o el virus varicela zóster, que provoca síntomas como ampollas en la piel o en las mucosas, las cuales pueden romperse y formar heridas que pican y duelen.

Existen diferentes tipos de herpes, que varían según el lugar del cuerpo en el que aparecen y el tipo de virus. Así, la infección puede aparecer en los labios, como el herpes labial, en los ojos, como el herpes ocular, en la vulva, vagina, pene o ano, como en el caso del herpes genital, o incluso en el tórax y el abdomen, causando el herpes zóster.

El tratamiento del herpes es realizado por el médico general, dermatólogo, infectólogo, ginecólogo o urólogo, e involucra normalmente el uso de medicamentos antivirales, como aciclovir o valaciclovir, para reducir la duración de los síntomas, facilitar la cicatrización de la piel y disminuir el riesgo de recurrencia o transmisión.

Síntomas de herpes

Los principales síntomas del herpes son:

• Pequeñas ampollas con líquido en la piel o mucosas;
• Dolor, hormigueo o ardor en la zona afectada;
• Enrojecimiento o picazón en el lugar;
• Heridas o úlceras dolorosas cuando las ampollas se rompen;
• Ganglios inflamados cerca del área de la infección;
• Costras en el lugar cuando las heridas sanan;
• Fiebre baja;
• Malestar general.

Estos síntomas pueden aparecer aproximadamente de 2 a 12 días después de la exposición al virus del herpes simplex. En el caso del herpes zóster, los síntomas pueden surgir en la edad adulta después de los 50 años, debido a la reactivación del virus varicela zóster, el mismo que causa la varicela. Sepa cómo identificar los síntomas de herpes genital, labial y ocular.

En el caso del herpes genital, otros síntomas que pueden surgir incluyen dolor o ardor al orinar, secreción vaginal o salida de secreción por la uretra, así como ardor y dolor al defecar si las ampollas están cerca del ano.

Teste de sintomas de herpes

Para determinar la posibilidad de tener herpes genital, por favor, seleccione los síntomas que presenta:

Este test es una herramienta que sirve únicamente como guía, no como diagnóstico, y no reemplaza la consulta con un ginecólogo, urólogo o infectólogo.

Cómo confirmar el diagnóstico

El diagnóstico del herpes se realiza mediante la evaluación de síntomas, historial médico y examen físico de las lesiones en la piel o mucosas por parte de un dermatólogo, infectólogo, clínico general, ginecólogo o urólogo.

Exámenes para el herpes

Los exámenes para el herpes que puede indicar el médico son:

• Examen de sangre: para detectar anticuerpos anti-VHS o anti-VZV producidos por el sistema inmunológico para combatir la infección;
• Muestra de la lesión: se recoge una muestra del líquido de las ampollas para analizarla en laboratorio e identificar el tipo de virus;
• RT-PCR: permite detectar con precisión el tipo de virus del herpes, como VHS-1, VHS-2 o VZV, a través de una muestra del líquido de la lesión o una muestra de sangre;
• Examen de orina y urocultivo: en casos de síntomas de herpes genital;
• Prueba de Tzanck: se realiza mediante el raspado de las lesiones para evaluar el tejido bajo el microscopio y detectar células específicas presentes en caso de infección por herpes.

Estos exámenes permiten al médico descartar otras condiciones con síntomas similares, como estomatitis aftosa, síndrome de Stevens-Johnson, cancroide, sífilis, linfogranuloma venéreo o conjuntivitis alérgica, por ejemplo, y así confirmar el diagnóstico de herpes.

Tipos de herpes

De acuerdo con los síntomas, el lugar donde ocurre y el tipo de virus del herpes, el herpes puede clasificarse en algunos tipos principales:

1. Herpes zóster

El herpes zóster, conocido popularmente como "culebrilla", es un tipo de herpes causado por el virus de la varicela zóster, el mismo que causa la varicela.

Esto se debe a que el virus permanece inactivo en el organismo durante muchos años y puede reactivarse cuando el sistema inmunológico está debilitado, como en el caso de una infección por VIH, tratamiento contra el cáncer o enfermedades autoinmunes, por ejemplo.

El herpes zóster puede aparecer en cualquier parte del cuerpo, siendo más común en el tórax, cuello, región lumbar o en la cara, en la región del nervio trigémino, y puede causar complicaciones como la neuralgia postherpética.

2. Herpes genital

El herpes genital es una infección de transmisión sexual (ITS) causada por el virus del herpes simple, principalmente el tipo 2 (VHS-2), que puede transmitirse a través del contacto con la saliva o las ampollas de la pareja durante las relaciones sexuales sin protección.

Este tipo de herpes puede afectar la vulva o el área interna o externa de la vagina en mujeres, también conocida como herpes vaginal o genital femenino, o el glande, el cuerpo del pene o el escroto en hombres, conocida como herpes genital masculino.

Además, el herpes genital puede aparecer en el perineo, la región perianal o en la parte interna del ano, tanto en hombres como en mujeres. Sepa cómo identificar los síntomas de herpes genital.

3. Herpes labial

El herpes labial es un tipo de herpes causado por el virus del herpes simple, principalmente el tipo 1 (VHS-1), que normalmente se transmite mediante el contacto directo con la herida del herpes de otra persona o al compartir vasos o tener contacto íntimo sin protección.

El herpes labial caracteriza por la formación de llagas abiertas inflamadas alrededor de la boca, que duran aproximadamente de 7 a 10 días. Sepa todos los síntomas de herpes labial.

4. Herpes ocular

El herpes ocular es una infección causada por el virus del herpes simple tipo 1 que puede afectar uno o ambos ojos y provocar síntomas similares a los de la conjuntivitis, como picazón en los ojos, lagrimeo excesivo, hinchazón, enrojecimiento o irritación ocular, por ejemplo. Sepa cómo identificar el herpes ocular.

Además, el herpes ocular también puede ser causado por el virus de la varicela zóster, y normalmente los síntomas aparecen en la frente y alrededor de los ojos, causando la aparición de ampollas, enrojecimiento en la piel, hinchazón en los ojos y dolor intenso.

5. Estomatitis herpética

La estomatitis herpética es un tipo de herpes causado por el virus del herpes simple, principalmente por el VHS-1 y raramente por el tipo VHS-2, que provoca la aparición de ampollas en la lengua, encías, paladar o mejillas, por ejemplo.

También, esta condición puede causar dolor o dificultad para alimentarse o tragar, o fiebre alta aproximadamente 1 o 2 días antes de que aparezcan las ampollas.

6. Herpes neonatal

El herpes neonatal es un tipo de herpes causado por el virus del herpes simple que afecta a los recién nacidos, provocando síntomas que pueden aparecer en la piel, los ojos o la boca del bebé, o puede ocurrir de forma diseminada, provocando encefalitis, hepatitis o neumonía, por ejemplo.

Este tipo de herpes puede transmitirse al bebé durante el parto vaginal cuando la madre presenta herpes genital por primera vez en las últimas 6 semanas de embarazo.

Aunque es raro, también puede ocurrir la transmisión durante el embarazo, lo que generalmente puede llevar a la muerte fetal. Sepa más sobre la herpes genital en el embarazo.

Posibles causas

El herpes es causado por una infección con los virus del herpes simple, tipo 1 (VHS-1) o tipo 2 (VHS-2), o por el virus de la varicela zóster, que comienzan a multiplicarse en el lugar de la infección en la piel o las mucosas.

Generalmente, después de tener la infección inicial del herpes simple o la varicela, el virus permanece inactivo en los nervios durante muchos años y puede reactivarse cuando el sistema inmunológico está debilitado, como en el caso de una infección por VIH, tratamiento contra el cáncer, enfermedades autoinmunes, exposición excesiva al sol, lesión ocular o estrés, por ejemplo.

Cómo se contagia

La transmisión del herpes ocurre a través del contacto directo con las ampollas en la piel o mucosas que contienen líquido, de una persona infectada por uno de los tipos del herpes simple. Conozca todas las formas de transmisión de herpes.

Además, en el caso del herpes genital, la transmisión ocurre mediante relaciones sexuales desprotegidas con una persona que tiene la infección activa.

Por otro lado, el herpes zóster se transmite a través del contacto con las secreciones liberadas por las llagas del herpes zóster. Sin embargo, cuando esto sucede, lo más probable es que la persona desarrolle varicela y no herpes zóster, especialmente si nunca ha tenido varicela. Sepa si el herpes zoster es contagioso.

Cómo se realiza el tratamiento

El tratamiento del herpes debe realizarse bajo la orientación del dermatólogo, infectólogo, médico general, ginecólogo o urólogo, con el objetivo de aliviar los síntomas, reducir su duración, facilitar la cicatrización de las lesiones y disminuir el riesgo de recurrencia o transmisión.

Los principales tratamientos que puede recomendar el médico son:

1. Pomadas para herpes

Las pomadas para herpes pueden usarse en casos de herpes labial o herpes genital, como las pomadas de aciclovir o penciclovir, ya que tienen acción antiviral que reduce la multiplicación del virus del herpes simple tipos 1 y 2 y la infección de nuevas células. Conozca las principales pomadas para herpes labial y herpes genital.

Estas pomadas pueden usarse desde los primeros síntomas del herpes simple, como picazón, sensación de ardor o hormigueo en el lugar, hasta la desaparición total de las llagas, y deben usarse bajo indicación y orientación médica.

Para el herpes ocular, el oftalmólogo puede recomendar el uso de pomada de aciclovir oftálmica. Además, el médico también puede recomendar el uso de pomadas anestésicas o de capsaicina para aliviar los síntomas del herpes simple o herpes zóster.

2. Comprimidos antivirales

Los comprimidos antivirales, como aciclovir, valaciclovir o fanciclovir, pueden indicarse para el herpes labial o genital inicial o recurrente, o el herpes zóster, además de la prevención del herpes en personas con el sistema inmunológico debilitado.

Estos medicamentos deben usarse bajo indicación médica, con dosis y duración del tratamiento orientadas por el médico.

Además, en el caso de la neuropatía postherpética, el médico puede recomendar el uso de medicamentos anticonvulsivos, como pregabalina o gabapentina, para aliviar el dolor.

3. Alimentación para herpes

La alimentación para herpes puede ayudar a fortalecer el sistema inmunológico para combatir la infección por los virus del herpes, siendo recomendado consumir alimentos ricos en lisina, zinc, vitamina C, selenio y omega 3, por ejemplo. Conozca cómo es la dieta para la herpes.

Además, para aliviar el dolor y la dificultad para tragar causados por la estomatitis herpética, se debe priorizar el consumo de alimentos más líquidos o pastosos, como sopas, purés y papillas, y evitar alimentos ácidos o picantes.

4. Remedios caseros

Los remedios caseros para el herpes labial, como el té de regaliz o la infusión de tomillo, pueden usarse para complementar el tratamiento con pomadas o comprimidos indicados por el médico, ya que tienen acción antiinflamatoria, analgésica y antiviral, que ayudan a aliviar los síntomas.

En el caso del herpes genital, se pueden hacer baños de asiento con té de mejorana o con infusión de hamamelis, por ejemplo.

Además, en el caso del herpes zóster, algunas opciones de remedios caseros son el baño con avena o manzanilla, ya que pueden ayudar a aliviar la picazón y el malestar, además de acelerar la cicatrización de la piel. Conozca todas las opciones de remedios caseros para el herpes zoster.

¿El herpes tiene cura?

El herpes no tiene cura, ya que no existen medicamentos que puedan eliminar los virus del organismo, sino solo impedir su multiplicación, aliviando los síntomas más rápidamente y evitando que otras células sean infectadas.

Cómo prevenir

Algunas formas de prevenir el herpes son:

• Evitar besar a personas con heridas en la boca o usar su lápiz labial;
• No compartir cubiertos, vasos, cepillos de dientes o toallas faciales;
• Evitar comer o probar alimentos de otras personas como helados, piruletas o sorbetes;
• Usar siempre preservativo en todos los contactos íntimos y evitar tener contacto íntimo con personas que tengan infección activa, con ampollas o heridas genitales por herpes;
• No recibir sexo oral de personas que tengan ampollas en los labios;
• Evitar compartir productos de higiene, como jabón o esponjas de baño.

Además, en el caso del herpes zóster, la mejor forma de prevención es vacunarse contra el herpes zóster, que se recomienda a partir de los 50 años, para evitar su desarrollo o prevenir la neuralgia postherpética. Conozca las principales vacunas del herpes.