Cólicos: qué son, tipos, causas y cómo quitar

Actualizado en marzo 2024

Los cólicos son espasmos o contracciones involuntarias de los músculos lisos del útero, intestinos, estómago o vejiga, pero también pueden ocurrir en los riñones o la vesícula biliar, causando un dolor intenso que va y viene a lo largo del día, y que puede irradiar hacia otras partes del cuerpo.

Los cólicos suelen ser causadas por la menstruación, cálculos renales o en la vesícula biliar, diarrea, estreñimiento o infecciones intestinales, pudiendo estar acompañadas de náuseas, vómitos, dolor o ardor al orinar, exceso de gases o fiebre, por ejemplo.

El tratamiento de los cólicos varía según su tipo, pudiendo recomendarse el uso de bolsas de agua caliente, hacer cambios en la dieta, tomar medicamentos antiespasmódicos o, en algunos casos, cirugía.

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Síntomas de cólicos

Los principales síntomas de cólicos son:

  • Dolor agudo tipo puntadas;
  • Dolor intenso que puede variar de intensidad a lo largo del día;
  • Picos de dolor intenso;
  • Abdomen duro o hinchado;
  • Náuseas o vómitos;
  • Pérdida de apetito.

El dolor de los cólicos puede aparecer en la parte baja de la espalda, en la parte baja del abdomen o en la región superior derecha del abdomen, y dependiendo de la causa e intensidad, puede irradiarse hacia las piernas, la ingle o la región genitourinaria.

Es importante consultar al ginecólogo, urólogo, nefrólogo, gastroenterólogo o médico de cabecera siempre que se presente un dolor cólico intenso, que dure más de un día o cuando ocurra con frecuencia, para que se diagnostique su causa y se indique el tratamiento más adecuado.

Tipos de cólicos

Los principales tipos de cólicos son

1. Cólico menstrual

El cólico menstrual puede surgir 1 a 2 días antes de que llegue el período menstrual, o durante el mismo, disminuyendo en intensidad a medida que el sangrado menstrual continúa.

En algunas mujeres, el cólico menstrual puede causar náuseas, vómitos, dolor de cabeza y mareos, además de que el dolor puede irradiarse hacia la espalda o la ingle, siendo en algunos casos incapacitante, interfiriendo en la vida diaria y la calidad de vida.

Causas: el cólico menstrual es causado por la liberación de sustancias inflamatorias en el útero, como las prostaglandinas, provocando contracciones del músculo liso del útero para ayudar a eliminar el endometrio. Cuantas más prostaglandinas haya, mayor será la intensidad del cólico menstrual.

El cólico menstrual, también llamado dismenorrea, puede ser primario, cuando no es causado por problemas de salud, o puede ser secundario, causado por endometriosis, miomas uterinos o adenomiosis, por ejemplo.

Qué hacer: para aliviar el cólico menstrual, se puede aplicar una bolsa de agua tibia en el abdomen o tomar tés con propiedades antiinflamatorias, como el té de jengibre o el té de manzanilla para ayudar a aliviar el dolor y la incomodidad. Conozca otros remedios caseros para aliviar el cólico menstrual.

Sin embargo, se recomienda consultar al ginecólogo, quien puede indicar el uso de medicamentos para el cólico menstrual, como el ácido mefenámico, para aliviar los síntomas o anticonceptivos hormonales, para tratar la causa de los cólicos.

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2. Cólico renal

El cólico renal puede surgir debido a cálculos renales, provocando un intenso dolor en la parte baja de la espalda o en el costado del cuerpo, náuseas, vómitos, dolor o ardor al orinar.

Además, el cálculo puede desplazarse a cualquier parte del tracto urinario, desde los uréteres, la vejiga, hasta la uretra, causando un intenso dolor en todo el recorrido por donde pasa.

Causas: el cólico renal normalmente es causado por la presencia de cálculos renales, pero también puede ser causado por infecciones renales, quistes renales, hidronefrosis o tumor renal, por ejemplo. Conozca los principales síntomas de piedras en los riñones.

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Qué hacer: se debe acudir al servicio de urgencias de inmediato para recibir analgésicos directamente en la vena para aliviar el dolor y realizar los exámenes solicitados por el nefrólogo o urólogo para identificar la causa del cólico renal.

En el caso de cálculos renales, el médico puede indicar el uso de medicamentos, como el diclofenaco o la tamsulosina, para ayudar a aliviar el dolor de los cólicos renales, o facilitar la eliminación de las piedras. Además, otro tratamiento para los cálculos renales es la cirugía para eliminar o fragmentar la piedra en trozos más pequeños para ser eliminados en la orina.

3. Cólico estomacal

El cólico estomacal provoca dolor de estómago que puede ser intenso, en puntadas o agudo.

Además, puede estar acompañado de otros síntomas como náuseas, vómitos, acidez, sensación de ardor, arrotos frecuentes o malestar abdominal.

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Causas: el dolor del cólico estomacal puede ser causado por gastritis, reflujo gastroesofágico, úlceras estomacales o infecciones, como la gastroenteritis, por ejemplo, o incluso cáncer de estómago. Conozca otras causas de dolor en la boca del estómago.

Qué hacer: se debe seguir una dieta ligera, incluyendo verduras, legumbres y frutas frescas, y evitar consumir alimentos grasos y beber alcohol. Además, es importante consultar al gastroenterólogo para que diagnostique la causa del cólico estomacal y para comenzar el tratamiento, que puede incluir medicamentos como omeprazol o esomeprazol, por ejemplo.

4. Cólico intestinal

El cólico intestinal puede causar dolor moderado a intenso, además de diarrea, exceso de gases, abdomen hinchado o presencia de moco o sangre en las heces.

Dependiendo de su causa, el cólico intestinal puede estar acompañado de síntomas como náuseas, vómitos, fiebre o pérdida de peso.

Causas: el cólico intestinal puede ser causado por gastroenteritis, intolerancia o alergia alimentaria, enfermedad de Crohn, síndrome del intestino irritable, diverticulitis, obstrucción intestinal o apendicitis, por ejemplo.

Qué hacer: aplicar una bolsa de agua tibia en el abdomen y descansar puede ayudar a aliviar el dolor y la incomodidad de los cólicos. Además, se debe aumentar la ingesta de líquidos para prevenir la deshidratación en casos de diarrea o vómitos intensos.

También es importante consultar al gastroenterólogo para identificar la causa del cólico intestinal e iniciar el tratamiento más adecuado, que puede incluir medicamentos antiespasmódicos, antiinflamatorios o incluso antibióticos. En caso de síntomas de apendicitis, se debe acudir de inmediato al servicio de urgencias.

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5. Cólico intestinal

El cólico intestinal puede ser fuerte e intenso y causar dolor en el lado superior derecho del abdomen, diarrea constante, fiebre, náuseas o vómitos.

Generalmente, el cólico biliar ocurre cuando hay alguna obstrucción o inflamación en la vesícula biliar.

Causas: la principal causa del cólico intestinal es la presencia de piedras en la vesícula biliar, que obstruyen los conductos biliares, dificultando el flujo de bilis hacia el intestino. Sin embargo, también puede ocurrir por infecciones, nódulos o tumores en la vesícula, o daño en los vasos sanguíneos de la vesícula.

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Qué hacer: se debe consultar al gastroenterólogo o acudir de inmediato al hospital para diagnosticar la causa del cólico intestinal y recibir el tratamiento más adecuado, que generalmente implica hospitalización, uso de analgésicos o antibióticos, o cirugía para extirpar la vesícula biliar. Conozca los principales tratamientos para piedras en la vesícula.

6. Cólico fuera del período menstrual

El cólico fuera del período menstrual puede ser de leve a intenso, y puede estar acompañado de náuseas, vómitos, flujo vaginal o incluso sangrado.

Causas: el cólico fuera del período menstrual puede ser causado por la ovulación o el síndrome premenstrual (SPM), pero también puede ocurrir debido a la endometriosis, enfermedad pélvica inflamatoria (EPI) o adenomiosis, por ejemplo.

Qué hacer: se puede aplicar una bolsa de agua caliente en el abdomen o tomar un baño caliente para ayudar a aliviar la incomodidad.

Sin embargo, cuando el cólico es intenso, ocurre todos los meses o empeora, se debe consultar al ginecólogo para evaluar la causa y comenzar el tratamiento, que puede incluir antiinflamatorios, anticonceptivos hormonales, antibióticos o incluso cirugía.

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7. Cólicos en el embarazo

El cólico en el embarazo puede causar un ligero sangrado rosado, principalmente al principio del embarazo debido a la implantación del embrión, lo cual se considera una condición normal.

Sin embargo, cuando el cólico en el embarazo se debe a condiciones de salud, puede tener síntomas como un intenso dolor en un solo lado del abdomen, sangrado vaginal, náuseas, vómitos o desmayos.

Causas: el cólico en el embarazo puede ser causado por una infección urinaria, estreñimiento, contracciones de entrenamiento, embarazo ectópico, aborto espontáneo, desprendimiento ovular o de la placenta, preeclampsia o parto prematuro.

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Qué hacer: si el cólico fue causado por la implantación del embrión, se recomienda descansar y relajarse, ya que el cólico mejora en 2 días. En el caso de las contracciones de entrenamiento, se debe mover el cuerpo o hacer ejercicios recomendados por el obstetra para aliviar la incomodidad de las contracciones.

Además, independientemente de la fase de gestación, se debe acudir inmediatamente al servicio de urgencias en casos de cólicos intensos acompañados de fiebre, sangrado vaginal, náuseas, vómitos o hinchazón en manos, pies o rostro, por ejemplo.

Esto se debe a que estos síntomas pueden indicar alguna complicación grave que requiere atención médica inmediata.

8. Cólicos en el bebé

El cólico en el bebé se puede identificar por síntomas como llanto excesivo, intenso, agudo e inconsolable durante más de 3 horas al día durante más de 3 días a la semana, hinchazón abdominal, encoger las piernas hacia la barriga, irritabilidad o agitación.

Dependiendo de su causa, también pueden presentarse diarrea, estreñimiento, fiebre, moco o sangre en las heces, o vómitos.

Causas: el cólico en el bebé es causado por la inmadurez del sistema gastrointestinal y la acumulación de gases intestinales, siendo muy común en los primeros 3 meses de vida.

Además, a veces, el cólico en el bebé está relacionado con la alimentación materna o por no hacerlo eructar después de la toma, o incluso por intolerancia o alergias a la leche o fórmulas. Sepa sobre cómo debe ser la alimentación durante la lactancia.

Qué hacer: masajear suavemente el vientre del bebé con movimientos circulares, darle un baño con agua tibia, acunar al bebé cerca del cuerpo con movimientos rítmicos y hacerlo eructar después de cada toma.

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Sin embargo, se debe consultar al pediatra para evaluar la causa de los cólicos en el bebé, especialmente cuando son frecuentes y están acompañados de fiebre, rechazo del pecho, somnolencia excesiva, vómitos, sangre o moco en las heces o dificultad para respirar.