La flema verde es un síntoma que puede surgir por infecciones bacterianas de las vías respiratorias, como sinusitis, neumonía, bronquitis o COVID-19 grave, pudiendo estar acompañado de otros síntomas como tos con flema verde espesa, dolor de garganta, dificultad para respirar o fiebre, por ejemplo.
El color verde de la flema es el resultado de la presencia de neutrófilos en las vías respiratorias, que son células de defensa del sistema inmunitario encargadas de combatir infecciones, y que producen una proteína verde que se disuelve en la mucosidad, dejando la flema de color verde más claro. El color verde o más oscuro varía según la cantidad de proteína. Vea qué indica el color de las flemas.
Es importante consultar al médico de cabecera, otorrinolaringólogo o neumólogo siempre que la flema sea de color verde, de manera que se diagnostique cuál es la posible causa y se inicie el tratamiento más adecuado, que suele realizarse con antibióticos para combatir las bacterias.
Causas de flemas verdes
Las principales causas de flemas verdes son:
1. Sinusitis
La sinusitis es una inflamación de los senos paranasales, que son pequeñas cavidades ubicadas en el cráneo, alrededor de la nariz y los ojos, generalmente causada por enfermedades alérgicas, sin embargo, cuando es causada por infecciones bacterianas, puede ocasionar la acumulación de secreciones verdes.
Generalmente, la secreción verde se acompaña de otros síntomas como congestión nasal, fiebre, dolor de cabeza, dolor alrededor de los ojos y sensación de pesadez en la cara, por ejemplo. Realice el test online para saber si puede tener sinusitis.
Qué hacer: una buena manera de aliviar el dolor detrás de los ojos causado por la sinusitis es eliminar las secreciones de los senos paranasales lavando la nariz con solución salina al 0,9%. Sin embargo, cuando los síntomas duran más de 5 días o se acompañan de fiebre, secreciones con pus por la nariz y dolor intenso en la cara, se debe consultar al médico de cabecera o al otorrinolaringólogo para iniciar el tratamiento más adecuado, que puede implicar el uso de antibióticos y/o aerosoles nasales.
2. Faringitis
La faringitis es una inflamación de la faringe, situada en la parte posterior de la garganta, que cuando es provocada por una infección por bacterias, como el Streptococcus pyogenes, por ejemplo, da lugar a la aparición de síntomas como dolor de garganta, flema verde, sensación de que la flema se mantiene pegada en la garganta, dificultad para tragar, fiebre. ardor y picor en la garganta.
Además, otros síntomas que pueden presentarse son dolor de cabeza, malestar general y ronquera.
Qué hacer: el tratamiento de la faringitis varía según los síntomas y la causa, por lo que el otorrinolaringólogo puede indicar el uso de analgésicos o antiinflamatorios, como paracetamol o ibuprofeno, para reducir el dolor, la fiebre o la inflamación de garganta, o el uso de antibióticos para combatir las bacterias. Además, es importante descansar y beber muchos líquidos durante el tratamiento. Vea los principales tratamientos para la faringitis.
3. Bronquitis infecciosa
Las flemas verdes también puede surgir debido a una bronquitis infecciosa crónica y, por lo general, comienza con un color claro y cambia a amarillo verdoso debido a la infección bacteriana.
Otros síntomas muy comunes de la bronquitis son tos con flema verde espesa, que puede durar hasta 90 días, fiebre, sibilancias, falta de aire, dificultad para respirar y/o cansancio.
Qué hacer: se debe consultar a un neumólogo, quien puede recomendar el uso de medicamentos como analgésicos, antiinflamatorios, jarabes expectorantes o mucolíticos y antibióticos. Vea cómo se trata la bronquitis.
4. Neumonía bacteriana
La neumonía bacteriana es una infección de los pulmones causada por bacterias como Streptococcus pneumoniae, Klebsiella pneumoniae o Staphylococcus aureus, por ejemplo, que provoca tos con flema verde espesa y, en algunos casos, puede contener sangre.
Además de la flema verde, la neumonía bacteriana también puede causar otros síntomas como fiebre, escalofríos, dolor en el pecho y/o dificultad para respirar.
Qué hacer: el tratamiento de la neumonía bacteriana se realiza con antibióticos indicados por el neumólogo según el tipo de bacteria que esté causando la infección.
Vea el video a continuación para conocer más detalles sobre el tratamiento de la neumonía bacteriana:
5. Bronquiectasia pulmonar
La flema amarilla verdosa también puede ser causada por bronquiectasias pulmonares, que es una enfermedad crónica que se caracteriza por el ensanchamiento o dilatación persistente de los bronquios y el debilitamiento de los mecanismos de transporte de la mucosidad, la cual se acumula en los pulmones, contribuyendo al desarrollo de la infección bacteriana.
Uno de los principales síntomas de las bronquiectasias es la flema verde espesa, sin embargo, suelen aparecer otros síntomas como tos con sangre, dificultad para respirar, malestar general y dolor en el pecho.
Qué hacer: el tratamiento de las bronquiectasias pulmonares debe ser realizado por un neumólogo, para ayudar a reducir los síntomas y aliviar las molestias, pudiendo estar indicado el uso de antibióticos y broncodilatadores, por ejemplo. Vea cómo se trata la bronquiectasia pulmonar.
6. Fibrosis quística
La fibrosis quística es una enfermedad genética que afecta las células que producen moco, lo que causa una producción anormal de moco espeso y pegajoso, que puede acumularse en los pulmones y causar infecciones pulmonares recurrentes, como neumonía, y tos con flema verde espesa, fiebre o cansancio excesivo.
Además, pueden surgir otros síntomas, como dificultad para respirar, falta de aire o dificultad para respirar.
Qué hacer: se debe seguir el tratamiento indicado por el neumólogo, que normalmente indica el uso de antibióticos para combatir la infección en los pulmones, fármacos mucolíticos para hacer más líquida la flema, facilitando su eliminación, y broncodilatadores, para ayudar a mantener abiertas las vías respiratorias, aliviando la falta de aire o la dificultad para respirar. Conozca todas las opciones de tratamiento de la fibrosis quística.
7. Absceso pulmonar
La flema verde también puede surgir por la rotura de un absceso pulmonar, que es una cavidad que contiene pus en su interior debido a una infección provocada por bacterias, como el Staphylococcus aureus, Klebsiella pneumoniae o Streptococcus pyogenes, por ejemplo.
El absceso pulmonar generalmente ocurre debido a una complicación de la neumonía causada por la aspiración del contenido de la boca o el estómago, pudiendo progresar a necrosis del tejido pulmonar en una o dos semanas, si no se trata.
Qué hacer: el tratamiento del absceso pulmonar lo realiza el neumólogo con el uso de antibióticos, según el tipo de bacteria que provocó la infección, fisioterapia respiratoria y, en algunos casos, cirugía para extirpar el tejido pulmonar necrótico.
8. EPOC exacerbado
El EPOC o enfermedad pulmonar obstructiva crónica es una condición inflamatoria de los pulmones causada por enfermedades respiratorias, como la bronquitis crónica o el enfisema pulmonar, que promueven el cierre de los bronquios o bronquiolos, dificultando el flujo de aire y la respiración.
El EPOC exacerbado puede ocurrir debido a una neumonía bacteriana, causando síntomas como tos con esputo verde espeso, respiración rápida y con dificultad, sibilancias, fiebre, cansancio excesivo e hinchazón en las piernas o los tobillos.
Qué hacer: se debe realizar el tratamiento indicado por el neumólogo, que suele incluir el uso de antibióticos, broncodilatadores o corticoides para combatir la infección y aliviar los síntomas respiratorios. Vea otras opciones de tratamiento del EPOC.
9. COVID-19 grave
El COVID-19 grave ocurre cuando el virus SARS-CoV-2 llega a los pulmones, causando una neumonía viral en uno o ambos pulmones, ocurriendo especialmente en niños, personas mayores o con el sistema inmune debilitado.
Además, el COVID-19 puede causar una neumonía bacteriana secundaria a la infección por SARS-CoV-2, ocasionando como resultado síntomas como tos, flema verde y fiebre, que es más común en personas hospitalizadas con ventilación mecánica.
Qué hacer: el tratamiento de la neumonía viral por COVID-19 grave debe ser realizado en el hospital y ser indicado por un neumólogo, quien puede recetar el uso de medicamentos antivirales, como remdesivir o tocilizumab, por ejemplo. En los casos de neumonía bacteriana secundaria, el médico también debe prescribir antibióticos para combatir la bacteria Vea cuáles son los principales medicamentos utilizados para tratar el COVID-19.
Cuándo ir al médico
Es importante consultar al médico general, otorrinolaringólogo o neumólogo siempre que surja flemas verdes y que esté acompañado de otros síntomas, que incluye:
- Fiebre;
- Escalofríos;
- Flema con sangre;
- Tos con flemas;
- Dificultad respiratoria;
- Falta de aire;
- Cansancio fácil o excesivo.
Además, debe buscar atención de emergencia o la sala de emergencias más cercana si experimenta síntomas de baja oxigenación de la sangre, como dolor en el pecho, labios o dedos azulados, sudor frío, palidez, piel fría o húmeda, corazón acelerado, cambios en los niveles de conciencia. o confusión mental, especialmente en los ancianos.
