Los ojos amarillos son causados por la acumulación excesiva de bilirrubina en la sangre, una sustancia producida por el hígado a partir de la destrucción de los glóbulos rojos. Cuando hay problemas en el hígado, la vesícula biliar o el páncreas, como la cirrosis o los cálculos biliares, la bilirrubina no se elimina adecuadamente, acumulándose en la sangre.
Los ojos amarillos también son comunes en los recién nacidos debido a la ictericia neonatal, una condición que ocurre porque su hígado aún no está completamente desarrollado, lo que normalmente no representa un problema grave.
Es importante consultar a un médico general si se observan ojos amarillos, para realizar los exámenes necesarios y determinar si hay alteraciones en el hígado o en los órganos digestivos, y así iniciar el tratamiento adecuado.
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11 causas de ojos amarillos
Las principales causas de ojos amarillos son:
1. Hepatitis
La hepatitis es una inflamación del hígado, generalmente causada por los virus de la hepatitis A, B o C, aunque también puede ser provocada por el uso de medicamentos.
Esta inflamación interfiere con la función del hígado, dificultando el transporte de bilirrubina hacia los ductos biliares, lo que provoca su acumulación en la sangre y produce la coloración amarillenta de la piel y los ojos, junto con síntomas como dolor abdominal, náuseas o vómitos.
Cómo es el tratamiento: es importante consultar a un médico general o gastroenterólogo, quien podrá solicitar exámenes de sangre para evaluar los niveles de bilirrubina y determinar el tipo de virus.
Esto permitirá iniciar el tratamiento más adecuado, que puede incluir reposo o el uso de medicamentos como interferón, adefovir o entecavir. Conozca más sobre el tratamiento de la hepatitis.
2. Cirrosis
La cirrosis puede causar coloración amarillenta en los ojos y orina oscura, además de otros síntomas como heces blanquecinas, hinchazón en las piernas, náuseas o vómitos, principalmente cuando está en etapas más avanzadas.
Esta enfermedad ocurre cuando el alcohol, grasa en el hígado o hepatitis producen destrucción permanente de las células hepáticas, haciendo que estas sean sustituidas por tejido fibroso, como si fuera una cicatriz, dificultando el trabajo del hígado.
Cómo es el tratamiento: se debe consultar a un gastroenterólogo para que inicie el tratamiento que varía de acuerdo a la causa, pudiendo realizarse suspendiendo el uso de alcohólicas, llevando una dieta baja en grasas o utilizar medicamentos diuréticos para reducir la hinchazón en el cuerpo. En las etapas más graves, el médico puede indicar el trasplante de hígado. Conozca más sobre el tratamiento de la cirrosis.
3. Anemia hemolítica
La anemia hemolítica es un tipo de enfermedad autoinmune en la que el cuerpo produce anticuerpos que atacan y destruyen los eritrocitos.
Esta destrucción provoca la liberación de bilirrubina al torrente sanguíneo, lo que puede causar ojos amarillentos, además de síntomas como cansancio excesivo, hinchazón abdominal o dolor en el pecho.
Cómo es el tratamiento: se debe consultar a un médico general o a un gastroenterólogo para que inicie el tratamiento, el cual puede ser realizado con el uso de corticoides o inmunosupresores.
En los casos más graves, puede ser necesaria una cirugía para remover una parte del bazo, órgano responsable de la destrucción de los glóbulos rojos. Conozca más sobre el tratamiento de la anemia hemolítica.
4. Piedras en la vesícula
Las piedras en la vesícula se forman cuando bloquean los ductos biliares, impidiendo que la bilirrubina llegue al intestino, lo que provoca su acumulación en la sangre y la coloración amarillenta de los ojos.
Además, pueden causar dolor intenso en el lado derecho del abdomen, especialmente después de las comidas, diarrea constante, fiebre, náuseas o vómitos.
Cómo es el tratamiento: se debe consultar a un médico general o gastroenterólogo para realizar un análisis de sangre y pruebas de imagen como ultrasonido, resonancia magnética, gammagrafía o tomografía computarizada para evaluar el tamaño y número de las piedras. Si la piedra es pequeña, el tratamiento puede incluir el uso de Ursodiol para disolverla.
En casos de piedras grandes acompañadas de fiebre y dolor abdominal severo, el médico podría recomendar una cirugía para extirpar la vesícula biliar. Conozca cómo se realiza la cirugía de vesícula biliar.
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La pancreatitis es la inflamación del páncreas, que puede provocar ojos amarillentos, dolor intenso en el lado izquierdo del abdomen, el cual puede irradiarse hacia la espalda, junto con otros síntomas como náuseas, vómitos o fiebre.
Cómo es el tratamiento: se debe consultar a un médico general o gastroenterólogo para evaluar la necesidad de hospitalización e iniciar el tratamiento adecuado, que puede incluir la administración de suero intravenoso y analgésicos para controlar el dolor.
En casos más graves, el médico podría recomendar una cirugía. Además, es fundamental realizar cambios en la alimentación, evitando alimentos grasos, y tomar suplementos de enzimas pancreáticas según las indicaciones del médico. Conozca más sobre el tratamiento de la pancreatitis.
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La ictericia neonatal es una alteración común en los recién nacidos, especialmente en los prematuros, que se caracteriza por un exceso de bilirrubina en la sangre, lo que causa ojos y piel amarillos.
Esta condición ocurre porque el hígado del bebé aún no está completamente maduro al nacer, lo que dificulta la eliminación de la bilirrubina.
Cómo es el tratamiento: se debe consultar al pediatra para evaluar la salud del bebé e indicar el tratamiento adecuado. La ictericia neonatal no siempre requiere tratamiento y, en muchos casos, se recomienda amamantar al bebé o darle el biberón cada 2 horas para facilitar la eliminación de residuos intestinales.
Sin embargo, si la ictericia empeora o si el bebé presenta ojos y piel muy amarillos, se puede recurrir a la fototerapia, en la que el bebé permanece en una incubadora con luz directa. Conozca más sobre el tratamiento de la ictericia neonatal.
7. Hígado graso
El hígado graso se caracteriza por la acumulación de células de grasa en el hígado, lo que puede estar relacionado con el consumo excesivo de alcohol o con el síndrome metabólico y el sobrepeso.
El aumento de células de grasa en el hígado puede reducir su funcionamiento normal, lo que dificulta la capacidad del hígado para filtrar toxinas y procesar la bilirrubina. Si no se trata, puede llevar a una acumulación de bilirrubina en la sangre, lo que provoca ojos amarillos.
Cómo es el tratamiento: el hígado graso se puede tratar con cambios en el estilo de vida, como la pérdida de peso, una dieta saludable y ejercicio regular.
Las personas con hígado graso también deben abstenerse de consumir alcohol. En los casos más graves, puede ser necesario el uso de medicamentos y un monitoreo regular de la condición.
8. Malaria
La malaria o paludismo es una enfermedad infecciosa causada por el mosquito Anopheles infectado con el parásito del género Plasmodium, que se multiplica en el hígado y llega al torrente sanguíneo, donde invade y destruye los glóbulos rojos.
Esta destrucción provoca la liberación de bilirrubina en la sangre, lo que genera síntomas como ojos amarillentos y dolor de cabeza, además de fiebre, sudoración, escalofríos, náuseas, vómitos y debilidad.
Cómo es el tratamiento: se debe consultar a un médico general para iniciar el tratamiento de la malaria, el cual debe realizarse con el uso de antipalúdicos como cloroquina, primaquina o mefloquina, por ejemplo. Conozca más sobre el tratamiento de la malaria.
9. Pinguécula
La pinguécula es una degeneración de la conjuntiva del ojo que se produce por el crecimiento de tejido compuesto por proteínas, grasas y calcio.
Este tejido, de color amarillo, provoca la coloración amarillenta del ojo, además de síntomas como sensación de ojo seco e irritado, hinchazón, enrojecimiento, visión borrosa y picazón en el ojo.
Cómo es el tratamiento: se debe consultar al oftalmólogo para confirmar el diagnóstico e iniciar el tratamiento adecuado, que puede realizarse con el uso de colirios y pomadas oculares.
En algunos casos, también puede recomendarse la cirugía.
10. Efectos secundarios de medicamentos
Algunos medicamentos pueden causar daños graves al hígado, especialmente si se toman en dosis mucho más altas de las prescritas o si se toman durante más tiempo del recomendado.
Los medicamentos que pueden provocar el amarilleo de los ojos debido al cáncer de hígado incluyen dosis altas de paracetamol, algunos antibióticos e incluso esteroides anabólicos.
Cómo es el tratamiento: si se comienza a notar una coloración amarilla en los ojos después de iniciar un nuevo medicamento, se debe informar al médico tratante.
Es probable que el médico evalúe el funcionamiento del hígado y determine si el medicamento debe ser detenido o sustituido. No se debe suspender el medicamento por cuenta propia sin antes consultar con el médico prescriptor o farmacéutico.
11. Cáncer de hígado
El cáncer de hígado está asociado con un tumor maligno que puede no presentar ningún síntoma en sus etapas iniciales.
Sin embargo, a medida que avanza la enfermedad, pueden aparecer síntomas como coloración amarilla de la piel y los ojos, dolor abdominal, pérdida de peso o hinchazón abdominal.
Cómo es el tratamiento: es importante consultar a un oncólogo o hepatólogo siempre que haya sospecha de cáncer, para identificar la causa e iniciar el tratamiento lo más pronto posible.
El tratamiento puede incluir una cirugía para extirpar el tumor, quimioterapia, radioterapia, terapia dirigida, inmunoterapia o un trasplante de hígado. Conozca otras opciones de tratamiento para el cáncer de hígado