Cirugía de vesícula: cómo se realiza y cuidados postoperatorios

Actualizado en octubre 2022

La cirugía para extraer la vesícula biliar se denomina colecistectomía, siendo indicada cuando se identifica la presencia de piedras en la vesícula, después de la realización de exámenes de imagen o de laboratorio, como un análisis de orina, o cuando hay signos que indican  que la vesícula está inflamada. 

Este tipo de cirugía se suele realizar de forma programada y suele ser rápida, durando en promedio unos 45 minutos y la persona suele permanecer 1 o 2 días de reposo y recuperándose por completo al cabo de 1 o 2 semanas. 

Aunque la mayoría de las veces la cirugía se realiza de forma programada, también se puede realizar de manera urgente, especialmente cuando hay síntomas asociados, como cólicos y dolor intenso, ya que puede ser un signo de inflamación y/o infección, que requieren la realización de la cirugía para prevenir complicaciones.

Imagem ilustrativa número 2

Cómo se realiza la cirugía

La cirugía puede realizarse de 2 formas: 

  • Cirugía convencional o cirugía abierta: esta se realiza a través de un corte mayor en el abdomen para la extraer de la vesícula. Suele tener una recuperación un poco más larga, y deja una cicatriz más visible;
  • La cirugía por laparoscopia: se realiza con 4 agujeros en el abdomen, por donde el médico pasa el material y una pequeña cámara para realizar la cirugía con menor manipulación y menos cortes, siendo una cirugía con una recuperación más rápida, menos dolorosa y con una cicatriz más pequeña.

 Ambas técnicas quirúrgicas son hechas bajo anestesia general, y generalmente necesita de apenas 1 a 2 de hospitalización. Sin embargo, en el caso de que el abdomen esté muy inflamado, como ocurre en algunas complicaciones por las piedras en la vesícula, como colangitis o en pancreatitis puede ser necesario un tiempo mayor para la recuperación. 

Si es necesario quedarse más de 3 días de reposo en la cama, el médico puede indicar la realización de fisioterapia aún en el hospital para garantizar el buen movimiento del cuerpo y para prevenir complicaciones respiratorias que pueden ocurrir después de cualquier cirugía.

Postoperatorio de la cirugía de vesícula

Después del pasado el efecto de la anestesia y de los analgésicos, el paciente puede sentir un dolor o incomodidad en la región del abdomen, que también puede irradiar hacia la región del hombro o del cuello. Mientras persista el dolor, el médico indicará el uso de analgésicos o antiinflamatorios como por ejemplo, Diclofenaco, Dipirona, o Ketoprofeno.

1. Cómo es la alimentación

En los primeros días, el paciente debe tener una dieta líquida o tipo puré y debe tener cuidado para no moverse excesivamente, garantizando así que la herida quirúrgica cicatrice bien. Luego la alimentación será normal, sin embargo se recomienda que sea baja en grasas, por lo que se recomienda que el paciente evite ingerir alimentos como embutidos, frituras, mayonesa, salsas, entre otros.

La cirugía para retirar la vesícula no tiene ninguna relación con la pérdida de peso. El paciente puede adelgazar, pero es debido a la dieta baja en grasas que debe hacer después de la cirugía. Con la extracción de la vesícula, la bilis que se produce en el hígado seguirá siendo producida, pero en vez de quedar almacenada en la vesícula, es excretada directamente al intestino para eliminar la grasa de los alimentos y no la grasa del cuerpo. Conozca cómo debe ser la alimentación

2. Cuánto tiempo de reposo es necesario

Después de la cirugía para extraer la vesícula se indica reposo inicial, pero tan pronto como se pueda levantar, después de 1 a 2 días, es posible hacer pequeñas caminatas y actividades sin esfuerzo. En el caso de la cirugía laparoscópica el paciente podrá volver al trabajo, manejar y a realizar ejercicios suaves en 1 semana, en el caso de la cirugía convencional tendrá que esperar 2 semanas.

Es también importante que el paciente evite quedarse mucho tiempo sentado o acostado y, por eso, debe caminar varias veces al día. Sin embargo, cada caso es diferente por lo que es importante seguir las instrucciones del médico.

Vea en el siguiente video más detalles sobre cómo debe ser la alimentación después de retirar la vesícula:

Riesgos de la cirugía de vesícula

Los riesgos de la cirugía de vesícula son mínimos sin embargo, los más graves son: lesiones en el conducto biliar, hemorragias o infecciones, las cuales pueden ocurrir en cualquier intervención quirúrgica.

De esta forma, el paciente debe dirigirse inmediatamente a la emergencia hospitalaria si presenta fiebre superior a 38ºC, si la herida operatoria tiene pus, si la piel o los ojos se ponen amarillo, si tiene falta de aire, vómitos o dolor que no mejoran con los medicamentos indicados por el médico.

Vídeos relacionados