Insomnio: qué es, causas y cómo combatirlo

El insomnio es un trastorno del sueño que afecta la cantidad y calidad del sueño, causando síntomas como dificultad para conciliar y mantener el sueño, despertares frecuentes o incapacidad de volver a dormir.

El insomnio puede surgir de forma esporádica o ser frecuente, y puede ser causado por estrés, depresión, embarazo, menopausia o ser común en la tercera edad, especialmente en los ancianos. También puede deberse a problemas de salud como reflujo gastroesofágico, depresión o síndrome de piernas inquietas.

El tratamiento del insomnio lo lleva a cabo el médico de atención primaria, psiquiatra o especialista en trastornos del sueño, y puede incluir terapia de higiene del sueño, terapia cognitivo-conductual, o el uso de suplementos o medicamentos, por ejemplo.

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Síntomas de insomnio

Los principales síntomas de insomnio son:

  • Dificultad para iniciar y mantener el sueño;
  • Despertar durante la noche;
  • Incapacidad para volver a dormir;
  • Despertar muy temprano;
  • Cansancio o somnolencia durante el día;
  • Dificultad de concentración, atención o memoria;
  • Irritabilidad durante el día;
  • Sensación de poca energía.

Además, el insomnio puede causar disminución de la productividad en el trabajo o en la escuela, aumentar el riesgo de errores o accidentes y afectar la calidad de vida.

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Cómo confirmar el diagnóstico

El diagnóstico del insomnio es realizado por el médico general, psiquiatra o especialista en sueño, a través de la evaluación de los síntomas, así como cuándo comenzaron y cuánto tiempo duran, hábitos de vida, historial de salud y uso de medicamentos.

El médico también puede realizar cuestionarios para ayudar en el diagnóstico y solicitar a la persona que lleve un diario, registrando durante 2 a 4 semanas los síntomas presentados, actividades realizadas a la hora de dormir, consumo de alcohol o cafeína y siestas nocturnas.

En algunos casos, el médico puede solicitar un examen de polisomnografía para descartar otros trastornos del sueño, como apnea del sueño, hipoventilación relacionada con el sueño o parasomnias, por ejemplo. Vea cómo se realiza la polisomnografía.

Tipos de insomnio

Los principales tipos de insomnio son:

1. Insomnio agudo

El insomnio agudo, también llamado trastorno de insomnio a corto plazo, es el tipo más común caracterizado por síntomas de insomnio durante menos de 3 meses.

Este tipo de insomnio normalmente está relacionado con períodos de mucho estrés, preocupaciones, diagnóstico de enfermedades, pérdida de familiares o amigos, o cambios en la vida, como cambio de empleo, matrimonio o nacimiento de hijos, por ejemplo.

El insomnio agudo generalmente tiende a mejorar por sí solo, sin necesidad de tratamiento médico, pero también puede convertirse en crónico.

2. Insomnio crónico

El insomnio crónico, o trastorno de insomnio crónico, se caracteriza por al menos 3 episodios de insomnio por semana, durante 3 meses o más.

Este tipo de insomnio también puede ser causado por períodos estresantes o problemas de salud, psiquiátricos, uso de medicamentos u otros trastornos del sueño.

3. Insomnio en el embarazo

El insomnio en el embarazo es muy común y es causado por alteraciones hormonales normales de este período, provocando insomnio en el primer trimestre de la gestación, o debido al tamaño del abdomen en el final del embarazo, lo que dificulta encontrar una buena posición para dormir. Sepa más sobre el insomnio en el embarazo.

4. Insomnio primario

El insomnio primario generalmente está relacionado con hábitos de vida o alteraciones del ciclo circadiano, no siendo causado por problemas de salud o psiquiátricos, como ocurre en la menopausia o en personas mayores, por ejemplo.

5. Insomnio secundario

El insomnio secundario es causado por algún problema de salud, como dolor crónico, reflujo gastroesofágico, problemas respiratorios o síndrome de piernas inquietas, por ejemplo. Entienda qué es el síndrome de piernas inquietas.

Además, trastornos psiquiátricos, como depresión, ansiedad o estrés postraumático, también son causas del insomnio secundario.

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6. Insomnio familiar fatal

El insomnio familiar fatal es una enfermedad genética extremadamente rara que afecta el tálamo en el cerebro, responsable de controlar el ciclo de sueño y vigilia.

Este tipo de insomnio causa insomnio crónico que surge de repente y va empeorando con el tiempo, además de ataques de pánico frecuentes y alteraciones en la temperatura corporal, por ejemplo. Sepa identificar los síntomas del insomnio familiar fatal.

Causas más comunes

Las principales causas del insomnio son:

  • Envejecimiento natural del cuerpo, siendo común en personas mayores;
  • No tener buenos hábitos de sueño, como no respetar el horario de dormir y despertar;
  • Alteraciones hormonales en la menopausia o el embarazo;
  • Uso de drogas ilícitas o uso prolongado de medicamentos para dormir;
  • Estrés excesivo, depresión, ansiedad o estrés postraumático;
  • Consumo excesivo de cafeína, nicotina o bebidas alcohólicas.

Otras causas son condiciones de salud, como el síndrome de las piernas inquietas, reflujo gastroesofágico, enfermedad de Alzheimer, enfermedad de Parkinson, hipertiroidismo o dolor crónico, por ejemplo.

Además, cambios continuos de horarios, como ocurre con profesionales que trabajan por turnos, o cambios de huso horario, como en los viajes, también pueden causar insomnio.

Cómo combatir el insomnio

Las principales formas de tratar el insomnio incluyen:

1. Higiene del sueño

La terapia de higiene del sueño es una forma efectiva de combatir el insomnio y consiste en cambiar hábitos que ayudan a aumentar los niveles de melatonina y, así, favorecen una buena noche de sueño.

Algunos de los hábitos que se pueden adoptar son evitar consumir cafeína en exceso durante el día o cerca de la hora de dormir, evitar dormir durante el día y no fumar o consumir alcohol cerca de la hora de dormir.

Además, se debe evitar hacer actividades físicas vigorosas por la noche y consumir una alimentación ligera antes de dormir. Sepa cómo hacer la higiene del sueño.

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2. Terapia cognitiva conductual

La terapia cognitiva conductual es un enfoque de la psicoterapia que puede ayudar a reducir la frecuencia o la intensidad del insomnio.

Este tipo de terapia es realizada por un psicólogo y consiste en desarrollar estrategias para ayudar a la persona a entender y controlar sus emociones en diferentes situaciones, reduciendo el estrés y la ansiedad. Vea cómo se realiza la terapia cognitiva conductual.

3. Tomar suplementos

Los suplementos para insomnio son principalmente la melatonina, ya que ayuda a regular el ciclo circadiano, estimulando el sueño al final del día.

Este suplemento debe ser tomado con indicación médica, ya que existen diferentes dosis. Sepa cómo tomar la melatonina para dormir.

4. Remedios naturales para el insomnio

El tratamiento natural para el insomnio puede realizarse con la ingestión de un té calmante, como maracuyá, melisa o manzanilla, por ejemplo, ya que son plantas medicinales que tienen propiedades calmantes y pueden ayudar a dormir mejor.

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Además, es posible utilizar remedios fitoterapéuticos naturales, como la valeriana, que tiene acción sedante y analgésica. Conozca otras opciones de remedios naturales para el insomnio.

5. Uso de medicamentos

El tratamiento para el insomnio con medicamentos debe hacerse con indicación médica, pudiendo indicarse ansiolíticos, como lorazepam, ramelteón o clonazepam, que ayudan a la persona a conciliar el sueño más rápido.

Además, en el caso de personas que se despiertan muchas veces durante la noche y tienen dificultad para volver a dormir, se pueden indicar medicamentos como doxepina, suvorexant o zolpidem, por ejemplo.

Estos medicamentos solo deben ser utilizados bajo indicación médica y en casos muy específicos, ya que pueden causar dependencia y efectos secundarios, como caídas y alteraciones de la memoria, pudiendo incluso empeorar el sueño de la persona. Vea cuáles son los medicamentos para dormir más indicados.

Consulte estos y otros consejos para combatir el insomnio en el siguiente video:

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