Qué puede causar hormigueo en las manos y brazos (y qué hacer)

Evidencia científica

El hormigueo en los brazos o las manos suele ser causado por la presión sobre los nervios, dificultades en la circulación sanguínea, inflamación o abuso de alcohol, sin embargo; este tipo de hormigueo también puede ser síntoma de enfermedades más graves, como diabetes, ictus, esclerosis múltiple o infarto de miocardio.

Las manos y los brazos son partes del cuerpo que contienen una gran cantidad de terminaciones nerviosas, por lo que cualquier pequeña alteración puede afectar estos nervios y provocar hormigueo.

Siempre que el hormigueo sea intenso, tarde muchos días en desaparecer o aparezca asociado a otros síntomas como cansancio excesivo, dolor torácico o dificultad para hablar, es importante consultar a un médico de cabecera para diagnosticar la causa e iniciar el tratamiento adecuado.

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¿Qué puede causar el hormigueo?

Para identificar la posible causa del hormigueo en las manos y brazos, responda las preguntas en el test a continuación:

A1
¿El hormigueo se presenta en el brazo y en la mano izquierda?

En cualquiera de los casos, si el hormigueo es intenso, persiste por varios días o aparece junto con otros síntomas como cansancio excesivo, dolor en el pecho o dificultad para hablar, es fundamental consultar al médico. Esto permitirá identificar la causa y comenzar el tratamiento más adecuado a tiempo.

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16 causas de hormigueo en las manos y brazos

Alguna de las causas más frecuentes de hormigueo o entumecimiento en las manos y en los brazos son:

1. Migraña

En muchas personas, la migraña puede ser precedida por síntomas sensitivos llamados aura, que incluyen hormigueos en las manos, brazos, piernas o boca, por ejemplo, además de cambios visuales, dificultades en el habla o, incluso, debilidad en los miembros.

Qué hacer: el tratamiento de la migraña es orientado por el neurólogo, e incluye el uso de medicamentos analgésicos, antiinflamatorios o específicos para la migraña, de manera que alivien el dolor.

También es posible que sea necesario realizar un tratamiento preventivo, además de tomar ciertas medidas para evitar las crisis como por ejemplo eliminar ciertos alimentos de la dieta, evitar algunos olores y trasnocharse.

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2. Accidente cerebro vascular

Aunque sea una situación más rara, uno de los primeros síntomas del ACV es la sensación de hormigueo en un brazo o en la mano.

Además, otros síntomas comunes de este problema son parálisis facial, falta de fuerza en uno de los lados del cuerpo y dificultad para hablar.

Qué hacer en caso de sospecha de ACV se debe llamar inmediatamente a una ambulancia o acudir inmediatamente al servicio de urgencia. Vea qué primeros auxilios aplicar en caso de un ACV.

3. Presión en los nervios

Los nervios que inervan los brazos salen de la médula, pasando a través de la columna y llegan hasta las partes más periféricas de las manos y los dedos.

A lo largo del trayecto, estos nervios pueden ser presionados, ya sea por tumores, infecciones o vasos sanguíneos dilatados por radiculopatía, que es cuando los nervios de la columna vertebral se ven comprometidos por una hernia discal, osteoartritis de la columna o por una estenosis del canal vertebral.

Qué hacer: es necesario buscar atención del traumatólogo o neurólogo, de forma que sea realizado el tratamiento de acuerdo con la causa de la compresión del nervio, sea con fisioterapia o cirugía, por ejemplo. Conozca qué es la radiculopatía y sus causas.

4. Esclerosis múltiple

La esclerosis múltiple es una enfermedad autoinmune que causa la degradación gradual de las fibras nerviosas del cerebro y de la médula espinal.

De esta forma, algunos síntomas incluyen pérdida de fuerza, cansancio excesivo, fallas de memoria y hormigueo en varias partes del cuerpo, que también puede ir acompañada de sensación de quemazón.

Qué hacer: el tratamiento debe hacerse con el uso de medicamentos que retrasan el desarrollo de la enfermedad como el interferón o la mitoxantrona.

Por esto, es necesario consultar a un médico general o un neurólogo para diagnosticar la enfermedad e iniciar el tratamiento adecuado. Vea qué es la esclerosis múltiple y cómo se realiza el tratamiento.

5. Quiste sinovial

El quiste sinovial puede aparecer en cualquier articulación de las manos, como en la muñeca o en los dedos, y generalmente se manifiesta como un pequeño nódulo en la piel que contiene líquido de la articulación.

Este quiste puede comprimir los nervios, causando hormigueo en la mano y pérdida de fuerza.

Qué hacer: aplicar compresas frías sobre el nódulo puede ayudar a reducir la inflamación y aliviar los síntomas.

Sin embargo, en algunos casos puede ser necesario aspirar el líquido o utilizar antiinflamatorios. Se recomienda consultar al traumatólogo si no hay mejoría después de una semana. Vea cómo usar las compresas frías.

6. Síndrome del túnel carpiano

El síndrome del túnel carpiano es la principal causa de hormigueo en las manos y ocurre cuando el nervio mediano, que inerva la palma, queda atrapado en la región de la muñeca.

Esto provoca hormigueo o entumecimiento que suele empeorar durante la noche, dificultad para sostener objetos pequeños y sensación de dedos hinchados.

Qué hacer: según la gravedad de la compresión del nervio mediano, se pueden realizar ejercicios para aliviar los síntomas; sin embargo, la única forma de garantizar la cura es mediante una cirugía para descomprimir el nervio.

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7. Deficiencia de vitaminas

La deficiencia de ciertas vitaminas, especialmente las vitaminas B12, B6, B1 y E, puede causar alteraciones en los nervios que se manifiestan con hormigueos en diferentes partes del cuerpo y cambios en la sensibilidad.

También pueden presentarse otros síntomas como irritabilidad, cansancio y alteraciones psiquiátricas.

Qué hacer: estas deficiencias se pueden corregir mediante una alimentación adecuada, rica en estas vitaminas, o mediante la suplementación oral o intramuscular, como suele ser necesario en el caso de la vitamina B12.

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8. Alteraciones en la circulación

Aunque las enfermedades circulatorias de arterias y venas son más comunes en las extremidades inferiores, también pueden afectar los brazos o las manos, causando hormigueo, además de otros síntomas como dolor y la formación de úlceras.

Qué hacer: el tratamiento dependerá del tipo de alteración en la circulación sanguínea y de si están comprometidas las venas o las arterias. Puede incluir el uso de medias elásticas, medicamentos como ácido acetilsalicílico (AAS), o incluso cirugía.

Para confirmar el diagnóstico y determinar el mejor tratamiento, es fundamental consultar con un cirujano vascular.

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9. Diabetes descontrolada

En ocasiones, la diabetes puede ser difícil de diagnosticar, especialmente si no se presentan los síntomas clásicos como la necesidad frecuente de orinar o la sed excesiva.

Cuando no se inicia el tratamiento a tiempo, los niveles de azúcar en sangre permanecen elevados durante largos períodos.

La hiperglucemia prolongada puede dañar los nervios en diferentes partes del cuerpo, convirtiendo a la diabetes en una causa común de hormigueo en manos, brazos, piernas o pies.

Qué hacer: ante la sospecha de diabetes, es fundamental acudir al endocrinólogo para confirmar el diagnóstico e iniciar el tratamiento con insulina o hipoglucemiantes si es necesario.

Además, es recomendable consultar a un nutricionista para realizar los ajustes adecuados en la alimentación.

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10. Codo del tenista

El codo de tenista, llamado científicamente epicondilitis lateral, es una inflamación de los músculos y tendones del codo que surge debido al uso repetitivo de la articulación como por ejemplo ocurre en los jugadores de tenis o en las personas que trabajan en lineas de montaje.

En estos casos, puede haber un dolor intenso en el codo y la pérdida de fuerza en todo el brazo, y el hormigueo suele surgir por la compresión del nervio cubital, localizado en el brazo, debido a la inflamación.

Qué hacer: la aplicación de compresas frías en el codo puede aliviar los síntomas, sin embargo, puede ser necesario hacer sesiones de fisioterapia o tomar antiinflamatorios como el Ibuprofeno, en los casos más graves. Pero también es importante consultar a un ortopedista. Vea cómo tratar el codo del tenista.

11. Hipotiroidismo

Cuando el hipotiroidismo no se trata correctamente puede causar lesiones en los nervios que llevan la información entre el cerebro y el resto del cuerpo.

De esta forma, además de la pérdida de cabello, aumento de peso o sensación de frío constante, el hipotiroidismo también puede causar hormigueo en varias partes del cuerpo, incluyendo las manos y los brazos.

Qué hacer: cuando ya se sabe que existe un problema en la tiroides, o cuando existe sospechas, se debe acudir al endocrinólogo para confirmar el diagnóstico e iniciar el tratamiento adecuado con medicamentos que controlan la tiroides.

12. Infarto

El hormigueo o entumecimiento en el brazo izquierdo, y en ocasiones en el derecho, puede ser un síntoma de infarto, especialmente cuando empeora al realizar esfuerzos o se presenta junto con otros signos como dolor en el pecho, dificultad para respirar, malestar general o sudoración fría.

Qué hacer: ante la sospecha de un infarto, es vital acudir de inmediato al servicio de urgencias o llamar a una ambulancia, para que, en caso de confirmarse el diagnóstico, el tratamiento se inicie lo antes posible y se eviten daños irreversibles en el corazón. Vea cómo identificar los síntomas de infarto.

13. Síndrome de Guillain-Barré

El síndrome de Guillain-Barré es una enfermedad autoinmune que produce inflamación en los nervios, causando debilidad, que generalmente comienza en los pies y después alcanza las manos; hormigueo en las extremidades superiores e inferiores, además de pérdida de la sensibilidad.

Qué hacer: en caso de una sensación de hormigueo que comienza en los pies y poco a poco va subiendo por el cuerpo, se recomienda acudir a un hospital para confirmar el diagnóstico de síndrome de Guillain-Barré.

El tratamiento requiere de la aplicación de inmunoglobulina y plasmaféresis, por lo que debe ser realizado en el hospital, y posteriormente continuar en casa con sesiones de fisioterapia.

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14. Ataque de ansiedad

El ataque de ansiedad es una situación que genera una sensación intensa de angustia, nerviosismo e inseguridad.

Además, puede provocar síntomas físicos como dolor en el pecho, náuseas, palpitaciones y hormigueo en el cuerpo, principalmente en brazos, manos y piernas. Conozca los síntomas de una crisis ansiedad.

Qué hacer: para aliviar los síntomas, se recomienda respirar lentamente, permanecer en un lugar ventilado y tranquilo, y tomar el medicamento indicado si ya se está en tratamiento para la ansiedad.

Sin embargo, si los ataques son muy frecuentes, es fundamental consultar a un psiquiatra para identificar la causa y recibir el tratamiento adecuado, que puede incluir psicoterapia y medicamentos.

15. Esguince

Un esguince es una lesión en los ligamentos de una articulación, como el hombro o la muñeca, causada por un estiramiento excesivo debido a un accidente o durante el ejercicio.

Esta lesión puede provocar síntomas como dolor al mover la articulación, hormigueo en la muñeca, brazo o dedos de la mano, inflamación y enrojecimiento en la zona afectada.

Qué hacer: si has sufrido un accidente que provocó una extensión excesiva de la articulación, como en la muñeca o el hombro, y presentas dificultad para realizar las actividades diarias, es importante acudir a un médico general u ortopedista.

Es posible que sea necesaria la inmovilización de la articulación y, en algunos casos, la realización de pruebas de imagen, como radiografías o resonancias, especialmente si la lesión es grave.

16. Mordedura o picadura insectos

La mordedura o picadura de algunos animales e insectos, como piojos, garrapatas, abejas o arañas, puede provocar adormecimiento u hormigueo en las manos y/o brazos, además de síntomas locales como enrojecimiento, dolor, comezón e inflamación.

En casos graves, pueden presentarse fiebre, mareos, vómitos e incluso reacciones alérgicas severas.

Qué hacer: si ha sido picado o mordido por un insecto o animal y presenta síntomas severos, se recomienda acudir de inmediato al servicio de urgencias para recibir el tratamiento adecuado, que puede incluir antibióticos intravenosos, entre otros, para evitar complicaciones como una reacción alérgica grave. Conozca más sobre qué hacer en caso de picadura de insectos.

¿Cómo se diagnostica?

El médico analizará los síntomas que presenta la persona, prestando atención a cuándo aparecen, con qué frecuencia e intensidad.

Además, tendrá en cuenta los hábitos laborales y los antecedentes personales, ya que esta información puede ser clave para identificar la causa de la molestia.

Si se sospecha alguna enfermedad como diabetes, deficiencia de vitaminas o trastornos del sistema inmunológico, el médico solicitará exámenes de sangre para confirmar o descartar estos problemas. También podrá pedir una electromiografía para evaluar la actividad muscular en brazos y manos.

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¿Cómo tratar el hormigueo en manos y brazos?

El médico orientará el tratamiento según la causa del hormigueo, que puede incluir:

  • Realizar ejercicios para mejorar la circulación sanguínea.
  • Mantener o alcanzar el peso ideal.
  • Realizar sesiones de fisioterapia, en caso de afectación musculoesquelética o neuromotora.
  • Uso de medicamentos, especialmente si el hormigueo es causado por infecciones o enfermedades autoinmunes.
  • Restringir el consumo de alcohol si el hormigueo está relacionado con el abuso de bebidas alcohólicas, para mejorar el entumecimiento.

Es fundamental seguir las indicaciones médicas y acudir a las consultas de seguimiento para evaluar la evolución y ajustar el tratamiento según sea necesario, garantizando así una mejor calidad de vida. Vea otras causas de hormigueo en el cuerpo.

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