La psoriasis es una enfermedad inflamatoria crónica de la piel que provoca síntomas como placas o manchas rojas en la piel, comezón, ardor y piel seca o agrietada, principalmente en los brazos, codos, manos, piernas y cuero cabelludo.
Aunque su causa no es completamente conocida, la psoriasis parece estar relacionada con factores genéticos y ambientales, y es común que los síntomas aparezcan en periodos de mucho estrés.
El tratamiento de la psoriasis es llevado a cabo por el dermatólogo y tiene como objetivo aliviar los síntomas y evitar las crisis. Este es realizado mediante el uso de medicamentos corticosteroides o inmunosupresores en forma de pomadas, comprimidos o inyección, o a través de fototerapia, por ejemplo.
Síntomas de psoriasis
Los principales síntomas de psoriasis incluyen:
- Placas o manchas rojas en la piel;
- Descamación de la piel en la zona afectada, semejante a la caspa;
- Comezón o sensación de ardor;
- Piel seca en la zona;
- Grietas que pueden sangrar en la zona de las placas.
Los síntomas de psoriasis pueden surgir en los brazos, codos, manos, piernas, rodillas, genitales, cuero cabelludo, abdomen, cóccix o espalda baja, por ejemplo, y varían según el tipo de psoriasis.
Es importante consultar al dermatólogo para identificar el tipo de psoriasis y, de esta manera, indicar el tratamiento más adecuado.
¿Cuánto tiempo dura la psoriasis en la piel?
El tiempo que duran los síntomas de psoriasis varía debido a que estos son cíclicos, pudiendo surgir durante algunas semanas o meses y desaparecer después de un tiempo sin requerir tratamiento, pero pueden volver a surgir, en especial durante períodos de mayor estrés.
Cómo confirmar el diagnóstico
El diagnóstico de la psoriasis es realizado por el dermatólogo a través de la evaluación de los síntomas, tomando en cuenta cuándo iniciaron, cuánto tiempo duran y cuál es la gravedad, además de los antecedentes de salud y la realización de un examen físico de la piel, las uñas y el cuero cabelludo.
Para confirmar el diagnóstico, el médico también podrá tener que realizar algunos exámenes para evaluar el estado de salud y descartar otras condiciones con síntomas similares, como eczema, micosis, liquen plano o lupus eritematoso, por ejemplo.
De esta manera, pueden ser solicitados análisis de sangre, pruebas de la función renal y hepática, ácido úrico, factor reumatoide, serología para hepatitis y biopsia de piel, por ejemplo.
Lea también: Biopsia de piel: qué es, tipos y cómo se realiza tuasaude.com/es/biopsia-de-pielPosibles causas
La causa exacta de la psoriasis aún no es totalmente conocida; sin embargo, es considerada una enfermedad autoinmune, mediada por linfocitos T, y es influenciada por factores genéticos y ambientales.
Algunos de los factores que parecen aumentar las posibilidades de desarrollar psoriasis incluyen:
- Golpes en la piel;
- Quemadura solar o picadura de insecto;
- Cortes, arañazos o traumas químicos o radioactivos en la piel;
- Infecciones por virus o bacterias;
- Hábitos como tabaquismo o alcoholismo;
- Estrés emocional;
- Uso de medicamentos, especialmente antimaláricos, litio o beta-bloqueadores.
La psoriasis también presenta una relación genética muy fuerte, ya que más del 50 % de las personas afectadas tienen otros casos de psoriasis en la familia.
Vea en el siguiente video más sobre los síntomas y las causas de la psoriasis:
Tipos de psoriasis
La mayor parte de los casos de psoriasis se caracteriza por la presencia de manchas rojas y secas en la piel; sin embargo, dependiendo del tipo de síntomas y del lugar afectado, la psoriasis puede dividirse en varios tipos:
1. Psoriasis vulgar
La psoriasis vulgar, también llamada psoriasis en placas, es la forma más común de la enfermedad y se caracteriza por la presencia de placas rojas con escamas blancas o plateadas, cuyo tamaño puede medir desde algunos milímetros hasta varios centímetros.
Este tipo de psoriasis normalmente surge en los brazos, piernas, cuero cabelludo y región lumbar, pero también puede afectar las uñas.
2. Psoriasis guttata
La psoriasis guttata, también llamada psoriasis en gotas, es más común en niños, adolescentes y adultos jóvenes, y se manifiesta por la presencia de manchas en forma de gotas en la piel.
Las manchas de la psoriasis guttata miden menos de 1 cm y tienden a surgir en el tronco, las axilas y las ingles, generalmente después de una infección por Streptococcus de las vías respiratorias.
3. Psoriasis pustulosa
La psoriasis pustulosa es un tipo de psoriasis que se caracteriza por el surgimiento de pequeñas ampollas con pus en la piel, junto con las manchas.
Estas ampollas pueden aparecer solo en una zona en específico de la piel o diseminarse por todo el cuerpo.
Cuando la psoriasis pustulosa es generalizada, la persona también puede presentar fiebre de 39 o 40 ºC por varios días.
4. Psoriasis inversa
La psoriasis inversa es otro tipo de psoriasis que se diagnostica cuando las manchas de psoriasis surgen en lugares húmedos, como axilas, ingles, ombligo, cuero cabelludo o debajo de las mamas, por ejemplo.
Debido a que surgen en lugares húmedos, estas manchas no suelen presentar descamación.
5. Psoriasis ungueal
Conocida popularmente como psoriasis en las uñas, la psoriasis ungueal se produce cuando la enfermedad afecta principalmente a la región de las uñas, debilitándolas y provocando deformaciones en ellas en forma de ondas y manchas.
Muchas veces, la psoriasis ungueal se manifiesta antes de la psoriasis en la piel, pudiendo ser el único síntoma durante varios años. Conozca más sobre los síntomas de la psoriasis ungueal.
6. Psoriasis capilar
La psoriasis capilar, también conocida como psoriasis del cuero cabelludo o psoriasis en la cabeza, causa los síntomas clásicos de la psoriasis, pudiendo también provocar la caída del cabello en la zona afectada del cuero cabelludo.
Asimismo, los síntomas también pueden diseminarse del cuero cabelludo a las orejas, nuca, cuello o cara, afectando principalmente la frente, y en ese caso es conocida como psoriasis en la cara.
7. Psoriasis genital
La psoriasis genital puede afectar regiones como pubis, muslos, nalgas, ano, pene o vulva, por ejemplo.
Este tipo de psoriasis provoca comezón intenso o irritación en la región genital, pudiendo ser más intensas cuando la persona suda y/o usa ropa caliente y apretada frecuentemente.
8. Psoriasis palmoplantar
La psoriasis palmoplantar afecta la palma de las manos y/o la planta de los pies, provocando síntomas como manchas rojas y secas, comezón, sensación de ardor y/o dolor en la zona, y grietas en la piel.
Cuando afecta la piel de los pies, es conocida popularmente como psoriasis en el pie, mientras que si afecta las manos, es llamada psoriasis en la mano.
La psoriasis palmoplantar puede dificultar actividades diarias, como caminar, colocarse los zapatos o agarrar objetos, por ejemplo.
9. Artritis psoriásica
La artritis psoriásica es el desarrollo de artritis inflamatoria crónica en personas que tienen psoriasis, afectando las articulaciones y causando dolor principalmente en los dedos de los pies o las manos.
Sin embargo, este tipo de psoriasis también puede afectar la articulación de la cadera, columna o rodillas, pudiendo surgir asociada a la psoriasis de la piel o a la psoriasis ungueal.
10. Psoriasis eritrodérmica
La psoriasis eritrodérmica es un tipo de psoriasis en la que los síntomas afectan alrededor del 90 % de la superficie corporal, causando generalmente comezón intensa, dolor e hinchazón.
Este tipo de psoriasis es una exacerbación de la psoriasis en placas, que puede surgir debido a la interrupción abrupta del uso de corticosteroides.
¿La psoriasis es contagiosa?
La psoriasis no es contagiosa y no es provocada por virus, hongos ni bacterias; no obstante, algunas infecciones pueden desencadenar los brotes de psoriasis en personas que tienen la enfermedad.
La psoriasis es una condición autoinmune, lo que significa que el propio sistema inmunitario ataca las células de la piel como si fuesen extrañas para el organismo, dando como resultado el surgimiento de los síntomas.
Cómo se realiza el tratamiento
El tratamiento de la psoriasis debe ser llevado a cabo bajo orientación del dermatólogo y tiene como objetivo aliviar los síntomas, evitar brotes y mejorar la calidad de vida.
De esta manera, los principales tratamientos que pueden ser indicados por el médico incluyen:
1. Medicamentos para la psoriasis
Los medicamentos para la psoriasis son principalmente los corticosteroides, los inmunosupresores y los agentes biológicos, como hidrocortisona, tacrolimus, metotrexato, ciclosporina y adalimumab, por ejemplo.
Estos medicamentos pueden ser empleados en forma de comprimidos, inyección o pomadas para psoriasis, y ayudan a controlar los síntomas y a reducir la acción del sistema inmunitario, reduciendo el proceso inflamatorio de la piel. Conozca la lista completa de medicamentos para la psoriasis.
Asimismo, también existen algunos remedios caseros para la psoriasis, los cuales pueden ser empleados bajo el conocimiento del médico, con la finalidad de controlar los síntomas, sin provocar efectos secundarios. Un buen ejemplo es el berro, que ayuda a eliminar del cuerpo sustancias que tienen potencial de causar brotes de psoriasis o agravar los síntomas.
2. Fototerapia
La fototerapia consiste en la aplicación de rayos UVB sobre la piel. Esta normalmente es usada junto con los medicamentos y las pomadas para psoriasis para aumentar el efecto antiinflamatorio y antiproliferativo.
Lea también: Fototerapia: qué es, para qué sirve y cómo funciona tuasaude.com/es/fototerapia3. Dieta para la psoriasis
La dieta para la psoriasis es otra buena forma de complementar el tratamiento indicado por el médico, y consiste en el consumo de alimentos antiinflamatorios, los cuales ayudan a disminuir la inflamación de la piel y la gravedad de las lesiones y a reducir la frecuencia de los brotes.
Lea también: 12 alimentos antiinflamatorios (con menú ejemplo) tuasaude.com/es/alimentos-antiinflamatorios¿La psoriasis tiene cura?
La psoriasis no tiene cura, dado que aún no existen medicamentos capaces de eliminar la enfermedad.
Sin embargo, los síntomas de la psoriasis pueden ser controlados con el tratamiento indicado por el dermatólogo, que también ayuda a evitar nuevos brotes.
