Fototerapia: qué es, para qué sirve y cómo funciona

Actualizado en enero 2023

La fototerapia es un tratamiento que consiste utilizar luces ultravioletas artificiales UVA o UVB, las cuales poseen acción antiinflamatoria e inmunosupresora capaces de estimular o inhibir la actividad celular, siendo este tratamiento utilizado principalmente en recién nacidos con ictericia, además de casos de psoriasis, vitiligo o eccema, por ejemplo.

La fototerapia también puede ser indicada por fisioterapeutas para promover el rejuvenecimiento y el combate a pequeñas manchas en la piel que pueden ser causadas por el sol. En las sesiones se utilizan un tipo de luz especial, la Luz Emitida por Diodo (LED), que estimula o inhibe la actividad celular.

Este tipo de tratamiento es sencillo y no requiere preparación, siendo indicado que la persona mantenga los ojos cubiertos durante toda la sesión. DE acuerdo al objetivo de tratamiento, el médico también puede indicar la toma de medicamentos para potenciar los efectos de la fototerapia.

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Para qué sirve

La fototerapia está indicada para problemas de la piel como:

  • Psoriasis;
  • Eczema crónico
  • Linfoma cutáneo de células T o micosis fungoide;
  • Pitiriasis liquenoide plana;
  • Dermatitis atópica;
  • Esclerodermia;
  • Liquen plano generalizado;
  • Eczema crónico;
  • Vitiligo;
  • Alopecia areata;
  • Foliculitis eosinofílica asociada al VIH;
  • Urticaria crónica espontánea;
  • Granuloma anular;
  • Mastocitosis;
  • Erupción polimorfa a la luz;
  • Enfermedad del injerto contra el hospedero,

Además, la fototerapia puede indicarse en los casos de ictericia neonatal o hiperbilirrubinemia del recién nacido, en que el bebé presenta piel amarillenta debido a la acumulación del pigmento de bilirrubina. Por ello, al realizar la fototerapia, es posible favorecer la absorción de luz por la bilirrubina, disminuyendo la contracción en la sangre del bebé. Conozca más sobre la hiperbilirrubinemia del recién nacido.

La cantidad de sesiones de fototerapia puede variar de acuerdo al objetivo de tratamiento y gravedad de la enfermedad, debiendo ser siempre indicado por el médico.

Cómo funciona la fototerapia

La fototerapia tiene acción antiinflamatoria e inmunosupresora, además, es útil para disminuir la superproducción de células en zonas específicas de la piel. En ciertos casos, el médico puede indicar el uso de medicamentos como retinoides, metotrexato o ciclosporina, antes de la exposición de la luz, para potenciar el efecto de la fototerapia.

La realización de la fototerapia consiste en aplicar una luz con espectro de onda adecuado directamente en la zona a tratar, siendo importante que la persona permanezca con los ojos protegidos con un parche durante todo el tratamiento.

Cómo se realiza

La fototerapia se realiza con diferentes tipos de equipos que emiten luz ultravioleta en todo el cuerpo o en zonas específicas de la piel, de acuerdo a la indicación del dermatólogo, que debe indicar el tipo de fototerapia a utilizar, así como el largo de onda y la dosis aplicada.

Para iniciar la fototerapia, son necesarias algunas medidas de seguridad, como utilizar lentes de protección, cubrir los órganos genitales y utilizar un protector facial, los cuales son proporcionados por el médico para la realización del procedimiento.

Después de la sesión de fototerapia, se recomienda usar lentes de sol con protección ultravioleta, además de protector solar de forma regular, especialmente en las áreas de la piel expuestas al sol.

Tipos de fototerapia

Existen diferentes tipos de fototerapia que pueden realizarse para problemas de la piel, siendo los principales:

  • Fototerapia UVB de banda estrecha: este tipo de fototerapia utiliza radiación UVB, con largo de onda más intensa entre 311 a 313 nm, siendo más indicado y eficaz para el tratamiento de la psoriasis en adultos. Esta fototerapia puede hacerse solo con la aplicación de luz UVB, pudiendo ser en este caso seguro para embarazadas o niños. Además, esta fototerapia puede realizarse junto con retinoides tópicos, corticoides o análogos de la vitamina D, estando en este caso contraindicado en embarazadas;
  • Fototerapia UVB de banda ancha: este tipo de fototerapia se realiza aplicando luces de radiación UVB de amplio espectro, con largo de onda entre los 280-320 nm. Este tipo de fototerapia es la menos utilizada actualmente, debido a su menor eficacia y el mayor riesgo de efectos secundarios;
  • Fototerapia UVA con psoraleno (PUVA): es un de tratamiento combinado que consiste primero en tomar por vía oral o aplicar sobre la piel una sustancia llamada psoraleno, indicada por el médico, que deja la piel más sensible al tratamiento, y 2 horas después, exponer el área de la piel que será tratada con la radiación UVA, indicada especialmente en caso de vitiligo, psoriasis, eczema, liquen plano o urticaria pigmentosa, por ejemplo.

El tipo de fototerapia debe ser indicado por el dermatólogo, de acuerdo a la condición a tratar, antecedente de tratamientos anteriores, etapa de la enfermedad y gravedad de los síntomas.

Fototerapia neonatal

La fototerapia neonatal o en el recién nacido, está indicada en los casos de ictericia o hiperbilirrubinemia, que causan piel y ojos amarillentos en el bebé debido a la deposición de bilirrubina en la piel, que es un pigmento producido cuando los glóbulos se descomponen. De esta forma, la fototerapia permite eliminar la bilirrubina en exceso a través de la orina, evitando complicaciones neurológicas en el bebé.

Para garantizar la eficacia de este tratamiento, es importante que la luz emitida tenga un largo de onda capaz de ser absorbido por la bilirrubina y que se preste atención a la concentración inicial de bilirrubina, ya que de esta forma es posible indicar la cantidad de sesiones necesarias.

El recién nacido generalmente se coloca debajo de la luz blanca o azul, que puede ser a 30 o 50 cm de distancia de la piel, con los ojos debidamente cerrados con una venda específica por el tempo determinado por el pediatra.

Posibles efectos secundarios

Los efectos secundarios que pueden surgir debido a la exposición a radiación ultravioleta de la fototerapia son:

  • Envejecimiento de la piel tratada
  • Enrojecimiento de la piel, que alcanza un pico en 12 a 24 horas después del tratamiento;
  • Sensación de ardor en la piel tratada;
  • Dolor, hinchazón o formación de ampollas en el área tratada;
  • Reactivación del virus del herpes labial;
  • Formación de ampollas en las placas de psoriasis;
  • Piel seca o arrugada;
  • Alteraciones en el color de la piel tratada;
  • Pérdida de la elasticidad o mayor fragilidad de la piel.

Además, en el caso de la fototerapia PUVA, también puede haber dolor intenso en la piel, malestar, fiebre, daños en la uña, hemorragia o sangrados debido de las uñas, náuseas, léntigo o queratosis, por ejemplo. Otro efecto secundario de la PUVA es el riesgo aumentado para desarrollar cataratas, siendo por eso recomendado la protección con lentes especiales durante el tratamiento.

¿La fototerapia puede causar cáncer?

La fototerapia, especialmente la fototerapia PUVA, puede aumentar el riesgo de desarrollar cáncer de piel, como carcinoma de células escamosas o melanoma, cuando se utiliza por largos períodos, en casos de utilización con una longitud de onda inadecuada, en personas susceptibles al cáncer, como aquellas que presentan casos de cáncer de piel en la familia.

El tratamiento con fototerapia debe hacerse con indicación del dermatólogo, cumpliendo sus recomendaciones en relación al número de sesiones y al tiempo de cada una de ella para que sea un método seguro.

Contraindicaciones

Se debe evitar realizar la fototerapia en las siguientes situaciones:

  • Lupus eritematoso sistémico (LES);
  • Dermatomiositis;
  • Xerderma pigmentoso;
  • Síndrome de Gorlin;
  • Síndrome de Bloom;
  • Síndrome del nevo displásico;
  • Albinismo;
  • Pénfigo;
  • Porfiria;
  • Antecedente de melanoma;
  • Antecedente de cáncer de piel no melanoma;
  • Condiciones premalignas de la piel;
  • Antecedente de exposición al arsénico o radiación ionizante;
  • Tratamiento con inmunosupresores;
  • Insuficiencia hepática grave;
  • Fotosensibilidad;
  • Recién nacidos que presentan hiperbilirrubinemia debido a problemas en los riñones o hígado.

Además, la fototerapia PUVA está contraindicada en niños, embarazadas o en período de lactancia, así como en personas con catarata o que estén bajo tratamiento con warfarina o fenitoína.