Anuria: qué es, síntomas, causas y tratamiento

La anuria es la ausencia de producción y eliminación de orina, lo que provoca síntomas como orinar menos de 50 mL por día, ausencia completa de producción y eliminación de orina, hinchazón en las piernas y pies, o náuseas y vómitos.

Las principales causas de la anuria son alteraciones en el sistema urinario, como obstrucción en las vías urinarias o insuficiencia renal aguda, por ejemplo, o puede ser un signo de diabetes no controlada y/o presión arterial alta.

La anuria es una emergencia médica y debe ser tratada de inmediato por un nefrólogo, urólogo o médico general tan pronto como aparezcan los síntomas. El tratamiento normalmente incluye la corrección de la obstrucción, la colocación de un stent o la realización de hemodiálisis, dependiendo de la causa.

Síntomas de anuria  

Los principales síntomas de anuria son:  

• Orinar menos de 50 mL por día, en el caso de adultos;  
• Sangre en la orina cuando es posible su eliminación;  
• Ausencia completa de producción y eliminación de orina;  
• Hinchazón en las piernas y pies;  
• Dolor abdominal o en la parte baja de la espalda;  
• Náuseas y vómitos.  

Además, también pueden aparecer mareos, sensación de debilidad o desmayo, o malestar general.

Los síntomas de la anuria pueden variar según su causa, por lo que es importante acudir al hospital de inmediato, ya que se trata de una emergencia médica que requiere tratamiento inmediato.

Cómo realizar el diagnóstico

El diagnóstico de la anuria lo realiza el nefrólogo, urólogo o médico general, en el hospital, evaluando los síntomas presentados, el historial de salud y realizando un examen físico.

Además, para confirmar la causa de la anuria, el médico puede recomendar la realización de análisis de sangre, examen de orina, tomografía computarizada, resonancia magnética o gammagrafía renal. 

Estos exámenes son importantes para evaluar la forma y el funcionamiento de los riñones, e identificar insuficiencia renal u obstrucciones, por ejemplo.

Principales causas

Las principales causas de anuria son:

1. Insuficiencia renal aguda

La causa más frecuentemente asociada a la anuria es la insuficiencia renal aguda, que más recientemente se llama lesión renal aguda, en la que el riñón no puede filtrar la sangre ni eliminar toxinas del cuerpo.

De esta forma, puede haber una acumulación de sustancias perjudiciales para el organismo, lo que lleva al aparecimiento de algunos síntomas como dolor en la parte inferior de la espalda, cansancio fácil, dificultad para respirar y presión arterial alta, por ejemplo. Sepa cómo reconocer los síntomas de la insuficiencia renal aguda.

Qué hacer: el tratamiento de la insuficiencia renal aguda debe ser realizado bajo la orientación del nefrólogo, en el hospital, y normalmente implica el uso de medicamentos diuréticos, suero intravenoso, restricción del consumo de sal y, en algunos casos, hemodiálisis.

2. Obstrucción de las vías urinarias

La obstrucción de las vías urinarias puede ocurrir en la vejiga, la uretra, los uréteres o los riñones, impidiendo el flujo de orina y su eliminación.

Generalmente, la obstrucción de las vías urinarias es causada por cálculos renales, que pueden desplazarse a lo largo del tracto urinario y bloquear la salida de la orina, pero también puede ser causada por tumores, coágulos o cicatrices debido a cirugías de las vías urinarias.

Qué hacer: se debe acudir al hospital inmediatamente para identificar la causa de la obstrucción e iniciar el tratamiento más adecuado. En el caso de los cálculos renales, el nefrólogo o urólogo puede indicar analgésicos intravenosos y, si el cálculo no se elimina, cirugía como litotricia o nefrolitotomía. Entienda cómo es realizado el tratamiento de piedras en los riñones.

3. Diabetes no controlada

La diabetes no controlada puede causar daños progresivos en los riñones debido al exceso de glucosa en la sangre, interfiriendo directamente en su función y resultando en insuficiencia renal aguda.

Qué hacer: se debe seguir el tratamiento de la diabetes según lo indicado por el endocrinólogo para controlar los niveles de glucosa en la sangre y evitar daños en los riñones. Si la persona presenta insuficiencia renal aguda, el tratamiento se realiza en el hospital bajo la supervisión del nefrólogo. Conozca más sobre las complicaciones de la diabetes no controlada.

4. Alteraciones en la próstata

Las alteraciones en la próstata, como la hiperplasia benigna de la próstata o el cáncer de próstata, pueden provocar la obstrucción de la uretra, impidiendo la salida de la orina.

Qué hacer: el tratamiento de la hiperplasia benigna de la próstata lo realiza el urólogo, quien puede indicar el uso de medicamentos o cirugía. En el caso del cáncer de próstata, el oncólogo puede recomendar cirugía para la extirpación de la próstata, quimioterapia o radioterapia.

5. Cáncer en los riñones

El cáncer en los riñones puede alterar el funcionamiento de los riñones o provocar la obstrucción de las vías urinarias.

Qué hacer: el tratamiento para el cáncer en los riñones lo realiza el oncólogo y normalmente consiste en cirugía para extirpar la parte afectada del riñón, radioterapia o terapia biológica. Sepa cómo es realizado el tratamiento de cáncer en los riñones.

6. Presión arterial alta no controlada

La presión arterial alta no controlada a largo plazo puede causar daños en los vasos sanguíneos de los riñones, alterando su funcionamiento, lo que puede resultar en insuficiencia renal aguda.

Qué hacer: se debe seguir el tratamiento para la presión arterial alta según lo indicado por el cardiólogo para evitar daños en los riñones. Cuando ocurre la insuficiencia renal aguda, el tratamiento se realiza en el hospital bajo la supervisión del nefrólogo. Sepa más sobre los principales medicamentos para la presión alta.

Cómo debe ser el tratamiento

El tratamiento de la anuria debe realizarse en el hospital por un nefrólogo, urólogo o médico general, con el objetivo de restablecer la eliminación de orina y tratar su causa.

Así, si la anuria es causada por una obstrucción en las vías urinarias que impide la eliminación de la orina, puede recomendarse la realización de un procedimiento quirúrgico para corregir la obstrucción y facilitar la eliminación de la orina, así como la colocación de un stent.

En el caso de insuficiencia renal, generalmente se recomienda la realización de hemodiálisis, ya que es necesario filtrar la sangre para evitar la acumulación de sustancias tóxicas en el organismo, lo que podría agravar la insuficiencia renal. Vea cómo se realiza la hemodiálisis.

En último caso, cuando la insuficiencia ya está más avanzada y la hemodiálisis no es completamente efectiva, el médico puede indicar la realización de un trasplante renal.

Además, es importante que el tratamiento para la enfermedad de origen, como la diabetes o alteraciones cardiovasculares, por ejemplo, continúen de acuerdo con la recomendación del médico, para evitar posibles complicaciones.