La trocanteritis es la inflamación de la bursa que recubre el trocánter mayor del fémur, un hueso situado en la parte lateral de la cadera. La bursa es una pequeña bolsa llena de líquido que actúa como una almohadilla, reduciendo la fricción entre huesos, músculos y tendones.
También conocida como bursitis trocantérica, es la forma más común de bursitis en la cadera y suele causar dolor en la parte lateral de esta región, que puede irradiarse hacia el muslo y empeorar tras permanecer largos periodos sentado o de pie.
El tratamiento debe ser indicado por el ortopedista y puede incluir reposo, antiinflamatorios, fisioterapia, compresas frías y, en algunos casos, inyecciones de corticoides o cirugía.
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Principales síntomas
Algunos síntomas de la trocanteritis son:
- Dolor en la parte lateral de la cadera, por lo general de un solo lado;
- Dolor que puede irradiarse hacia el muslo;
- Dolor que empieza fuerte y puede volverse pulsátil con el tiempo;
- Al recostarse sobre el lado afectado, el dolor empeora;
- Dolor que aumenta después de largos periodos sentado, caminatas prolongadas o al subir escaleras;
- Sensibilidad y dolor al tacto en la zona.
Además, también es común sentir que al cruzar las piernas o acercarlas al cuerpo intensifique la molestia, mientras que separarlas tiende a aliviarla.
Trocanteritis bilateral
La trocanteritis bilateral ocurre cuando la inflamación de las bursas de la cadera afecta ambos lados al mismo tiempo. Es decir, en lugar de causar dolor solo en un lado de la cadera, como es más común, los síntomas aparecen en los dos lados.
Cómo se confirma el diagnóstico
El diagnóstico de la trocanteritis lo realiza el ortopedista, principalmente mediante la evaluación de los síntomas y un examen físico detallado.
En el examen físico, el médico evalúa la sensibilidad al presionar el hueso lateral de la cadera y observa si movimientos que requieren equilibrio, como apoyarse en una sola pierna, aumentan el dolor.
Además, el médico puede solicitar estudios de imagen, como rayos X, resonancia magnética o ultrasonido, para descartar fracturas u otras alteraciones, como lesión de tendón que pueda estar generando un dolor similar.
Principales causas
La trocanteritis puede ser causada por:
- Traumatismos, como caídas o golpes;
- Movimientos repetitivos, como correr, pedalear, subir escaleras, permanecer mucho tiempo de pie y levantar cajas pesadas, por ejemplo;
- Alteraciones en la postura, como diferencia en la longitud de las piernas, escoliosis, artrosis lumbar, tendones tensos o espolones óseos;
Además, personas con condiciones como artritis, gota, diabetes, psoriasis, exceso de peso o que han pasado por cirugía de cadera pueden aumentar el riesgo de desarrollar trocanteritis.
Cómo es el tratamiento
El tratamiento de la trocanteritis debe ser indicado por el ortopedista y puede incluir:
1. Reposo
Para aliviar los síntomas, el médico puede indicar evitar actividades que aumentan el dolor, como caminatas largas o subir escaleras.
También se recomienda no recostarse sobre el lado dolorido, y al dormir de lado colocar una almohada entre las rodillas.
Además, aplicar compresas frías en la zona de tres a cuatro veces al día, durante unos 15 minutos, siempre con un paño entre la piel y la bolsa de hielo, puede ayudar a reducir la inflamación.
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Medicamentos antiinflamatorios, como ibuprofeno o naproxeno, pueden ser recetados por el ortopedista para aliviar el dolor y la inflamación.
Si los síntomas no mejoran con medicamentos, el médico puede recomendar una inyección de corticoide, como la cortisona, aplicada directamente en la bursa, lo que generalmente proporciona un alivio temporal.
3. Fisioterapia
La fisioterapia puede incluir ejercicios de estiramiento para la cadera, además de fortalecimiento de todos los músculos de la cadera.
También pueden trabajarse técnicas para mejorar el equilibrio, la postura y la forma de caminar, como los ejercicios de propiocepción. Conozca más sobre la propiocepción.
En algunos casos, el fisioterapeuta puede realizar masaje, aplicación de calor o frio, o ultrasonido para potenciar el tratamiento.
4.Cirugía
En casos poco frecuentes, cuando los tratamientos conservadores no mejoran los síntomas, puede ser necesaria la cirugía.
El procedimiento suele consistir en la extracción de la bursa inflamada, llamada bursectomía, que puede realizarse mediante técnica endoscópica a través de pequeñas incisiones.
La recuperación generalmente es rápida, y se puede volver a caminar en pocos días con apoyo temporal de bastón o muletas. Además, luego de la cirugía se deben realizar sesiones de fisioterapia para fortalecer los músculos de la cadera y disminuir el edema y dolor.
5. Autocuidados
Algunas medidas de autocuidado pueden ser recomendadas, como:
- Mantener un peso adecuado para reducir la sobrecarga en la cadera;
- Usar calzado cómodo;
- Evitar permanecer de pie o sentado por períodos prolongados;
- Alternar actividades repetitivas o movimientos que ejerzan presión sobre la zona;
En algunos casos, puede indicarse el uso temporal de muletas o bastón para disminuir la presión sobre la cadera.
¿La trocanteritis es grave?
En la mayoría de los casos, la trocanteritis no representa un problema grave, pero puede afectar la calidad de vida si no se trata, ya que provoca dolor intenso y limita significativamente la realización de las actividades diarias.
Con reposo, fisioterapia, medicación y ajustes en el estilo de vida, la mayoría de las personas se recupera adecuadamente y sin complicaciones