La congestión mamaria es una situación en la que hay acumulación de leche en las mamas, lo que hace que esta se torne más viscosa y exista una mayor dificultad para ser expulsada. De esta manera, la mujer puede sentir el seno hinchado y más duro, además de haber dolor y molestias a la hora de amamantar.
La congestión mamaria, también conocida como ingurgitación mamaria, generalmente ocurre debido al vaciado incompleto de la mama, a una técnica incorrecta para amamantar o a amamantamiento poco frecuente. Asimismo, cuando no es tratada de forma adecuada, puede causar inflamación de la mama, conocida como mastitis. Vea qué es la mastitis y cómo tratarla.
En caso de que la congestión mamaria no mejore unos días después del nacimiento del bebé o perjudique la lactancia, es importante consultar un pediatra o ginecólogo para evaluar la necesidad de iniciar un tratamiento, el cual puede implicar la eliminación del exceso de leche y medicamentos para el dolor.

Cómo tratar la congestión mamaria
Para aliviar los síntomas de la congestión mamaria y favorecer la expulsión de la leche se recomienda:
1. Garantizar una técnica de amamantamiento correcta
Para que el bebé logre vaciar la mama adecuadamente, es importante asegurarse de que el bebé tome de manera correcta el pecho. Cuando el agarre es correcto no hay dolor, y el labio inferior del bebé se encuentra hacia afuera, su barbilla toca la mama y normalmente es posible ver una pequeña parte de la areola por encima de su boca. Vea cómo preparar los senos para la lactancia.
2. Bañarse con agua tibia antes de amamantar
Bañarse con agua tibia o aplicar compresas tibias sobre las mamas antes de amamantar ayuda a liberar la leche, lo que facilita el vaciamiento de la mama por el bebé, además de reducir las molestias en los casos de ingurgitación mamaria.
3. Estimular los ganglios linfáticos
Los ganglios linfáticos de la axila tienen un papel importante en la remoción de líquidos de la región mamaria. Por esa razón, cuando son debidamente estimulados pueden ayudar a reducir la hinchazón de la mama y el dolor causados por la congestión mamaria.
Es posible estimular los ganglios por medio de un masaje con movimientos circulares delicados en la región donde la axila se une a la mama. Los movimientos circulares pueden ser repetidos durante 10 veces seguidas. Luego, se debe tocar la mama levemente desde el borde del pezón en dirección al hombro. El masaje debe ser suave para no causar dolor.
4. Hacer masajes circulares en la mama
El masaje de la mama, principalmente donde hay mayor congestión, ayuda a fluidificar la leche y estimula la producción de oxitocina, una hormona que participa en la secreción de la leche, facilitando su extracción por el bebé.
El masaje debe ser llevado a cabo con movimientos circulares suaves, para no causar dolor o molestias. Durante el masaje, se debe apoyar la mama en una de las manos y realizar los movimientos con la otra. El masaje debe repetirse antes de cada sesión de lactancia.
5. Extraer un poco de leche antes de alimentar al bebé
Después de llevar a cabo el masaje en la mama antes de alimentar al bebé, realizar movimientos para extraer un poco de leche ayuda a que esta sea expulsada y facilita el agarre del pecho por el bebé.
Esto puede ser realizado presionando cuidadosamente la base de mama entre los dedos índice y pulgar y moviéndolos en dirección al pezón.
6. Retirar el exceso de leche
El exceso de leche puede ser retirado realizando los movimientos explicados anteriormente o utilizando una bomba, y debe ser llevado a cabo de acuerdo con las indicaciones del pediatra o ginecólogo, pues cuando es realizado en exceso puede estimular aún más la producción de leche.
Esto puede ser ejecutado mediante la aplicación de una leve presión con el pulgar y el dedo índice en la base de la mama, moviéndolos en dirección al pezón hasta que la leche comience a salir.
7. Aplicar compresas frías después de amamantar
La aplicación de compresas frías en las mamas en los intervalos entre las sesiones de lactancia ayuda a reducir la producción y la acumulación de leche. En los casos donde la ingurgitación mamaria es más grave, la aplicación puede ser indicada cada 2 horas; no obstante, el tiempo de cada aplicación no debe superar los 15 minutos.
8. Usar analgésicos en caso de dolor
En caso de dolor y molestias persistentes, el ginecólogo puede indicar medicamentos analgésicos como ibuprofeno o paracetamol, pues el dolor tiende a perjudicar la producción de oxitocina y la secreción de leche.
Síntomas de congestión mamaria
Los principales síntomas de congestión mamaria incluyen:
- Mamas más duras;
- Dificultad en secretar la leche;
- Aumento del tamaño de las mamas;
- Dolor en las mamas.
Asimismo, en ciertas ocasiones, otros síntomas como fiebre y malestar también pueden surgir, indicando situaciones más graves de ingurgitación mamaria.
En caso de que la congestión mamaria no mejore en algunos días, esté perjudicando la lactancia o cause síntomas como fiebre y malestar, es importante acudir a un pediatra o ginecólogo para orientar el tratamiento.
Principales causas
La congestión mamaria puede ser causada debido al vaciamiento incompleto de las mamas, al retraso en el inicio de la lactancia o a la realización de una técnica incorrecta de amamantamiento, por ejemplo. Asimismo, cuando la succión del bebé no es suficiente o en caso del uso de ciertos medicamentos, como metoclopramida o domperidona, por ejemplo, también puede ocurrir ingurgitación mamaria.
Es importante que la causa de la congestión mamaria sea identificada para iniciar el tratamiento más adecuado, principalmente en caso de que la técnica de lactancia esté incorrecta o el bebé no realice la succión adecuada, pudiendo ser indicadas otras posiciones para amamantar. Vea algunas posiciones para amamantar de forma correcta.