El tratamiento para el lipedema puede incluir una alimentación antiinflamatoria, dieta cetogénica o low carb, aumento de la ingesta de líquidos, práctica de actividad física, drenaje linfático y fisioterapia.
El lipedema es la acumulación excesiva de grasa en las piernas, muslos, tobillos o en los brazos, y generalmente la gordura es resistente a la dieta y pérdida de peso, por lo que en algunos casos, los médicos pueden recomendar el uso de medicamentos o liposucción.
Lea también: Lipedema: qué es, síntomas, cómo identificar y tratamiento tuasaude.com/es/lipedemaPara el lipedema, el tratamiento debe ser indicado por un angiólogo o cirujano vascular de acuerdo con el grado de lipedema y la gravedad de los síntomas, con el objetivo de mejorar la calidad de vida.
Principales tratamientos
Los principales tratamientos para el lipedema son:
1. Alimentación antiinflamatoria
La alimentación antiinflamatoria es muy importante para las personas con lipedema, ya que esta dieta ayuda a reducir la inflamación del cuerpo y favorece el funcionamiento del sistema linfático, por lo que reduce el dolor y la incomodidad producida por el lipedema.
Para seguir una alimentación antiinflamatoria, se debe consultar al nutricionista, quien podrá indicar los mejores alimentos, así como las cantidades de forma personalizada.
Algunos alimentos antiinflamatorios que pueden ser indicados son los vegetales crucíferos, como rúcula, brócoli o espinaca, alimentos ricos en omega-3, como atún, sardina, salmón, semillas de lino o chía.
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Los alimentos industrializados o ultraprocesados pueden aumentar la inflamación en el cuerpo y, como consecuencia, empeorar el lipedema.
Por eso, se debe evitar el consumo de jugos artificiales, gaseosas, alimentos enlatados, embutidos y condimentos en polvo o en cubo. Vea la lista completa de los alimentos ultraprocesados.
Además, se recomienda evitar los alimentos con altos contenidos de grasas, ya que tienen un efecto inflamatorio y pueden provocar retención de líquidos, lo que podría empeorar los síntomas del lipedema.
3. Dieta cetogénica
La dieta cetogénica puede ser recomendada para personas con lipedema, ya que ayuda a reducir la inflamación en el cuerpo.
Además, contribuye a regular los niveles de insulina y estrógeno, hormonas que están relacionadas con el desarrollo del lipedema.
Este tipo de alimentación elimina casi por completo los alimentos ricos en carbohidratos y debe ser realizada bajo la indicación y el seguimiento de un nutricionista.
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La dieta low carb es una opción de tratamiento para el lipedema que debe ser orientada por un nutricionista, y suele indicarse en personas que no han obtenido buenos resultados con la dieta cetogénica.
Este tipo de alimentación ayuda a reducir la inflamación del cuerpo y a aliviar los síntomas causados por el lipedema.
Para realizar correctamente la dieta low carb, es necesario disminuir la ingesta de alimentos ricos en carbohidratos y aumentar el consumo de proteínas y grasas de buena calidad. Vea cómo se realiza la dieta low carb.
5. Beber mucho líquido
Beber líquido durante el día es muy importante, ya que ayuda a prevenir la retención de líquidos y mejora la circulación del sistema linfático.
Además, tomar agua estimula la producción de orina, lo que permite eliminar el exceso de líquidos y toxinas del organismo.
Se recomienda consumir al menos entre 2 y 3 litros de agua al día, aunque la cantidad ideal puede variar según las necesidades de cada persona. Vea cómo calcular la cantidad de líquido que debe ingerir por día.
6. Actividad física
La actividad física ayuda a aumentar la fuerza y a ganar masa muscular. En personas con lipedema, es fundamental realizar ejercicios de fuerza, ya que estos mejoran la circulación, favorece el retorno de la sangre al corazón y contribuye a reducir la inflamación.
Además de ejercicios de fuerza, para las personas con lipedema se recomienda realizar ejercicios aeróbicos de bajo impacto, como caminar, andar en bicicleta o natación.
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El drenaje linfático manual ayuda a reducir la inflamación, la fibrosis y los síntomas del lipedema. Este tratamiento debe ser realizado por un fisioterapeuta o un profesional especializado en el área. Vea cómo se realiza el drenaje linfático manual.
8. Fisioterapia
La fisioterapia para el lipedema tiene como objetivo romper las células de grasa, disminuir la inflamación y reducir el dolor.
El fisioterapeuta puede utilizar técnicas como el drenaje linfático manual, así como otros dispositivos, como la compresión neumática, endermoterapia, ultrasonido o criolipólisis.
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La terapia compresiva puede ser indicada por el médico para reducir la inflamación en las piernas y mejorar la circulación de los vasos sanguíneos y linfáticos.
Para este tratamiento se pueden utilizar medias, leggings, mangas o guantes, los cuales no deben tener costuras para evitar molestias o lesiones en la piel.
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Los suplementos alimenticios pueden ser indicados por el médico o el nutricionista para ayudar a reducir la inflamación del cuerpo, prevenir la fibrosis y aliviar los síntomas del lipedema.
Algunos suplementos que suelen recomendarse en estos casos son el omega-3, la cúrcuma, la vitamina C, el magnesio, el selenio, el resveratrol o el DIM (diindolilmetano).
Lea también: Suplementos alimenticios: qué son, para qué sirven y cómo usarlos tuasaude.com/es/suplementos-alimenticios11. Uso de medicamentos
El uso de medicamentos como la diosmina con hesperidina puede ser indicado por el médico para prevenir la inflamación de los miembros y mejorar la insuficiencia venosa.
Para prevenir la fibrosis, también puede recomendarse el uso de metformina. En casos de obesidad o diabetes, el médico puede indicar medicamentos agonistas del GLP-1, como semaglutida, tirzepatida o liraglutida.
12. Liposucción
La liposucción permite remover el exceso de grasa y puede ser indicada cuando otros tratamientos no han sido eficaces para aliviar los síntomas.
Este procedimiento puede ser realizado por el médico utilizando diferentes técnicas, como la liposucción tumescente, asistida por agua o con láser.
13. Cirugía bariátrica
La cirugía bariátrica en casos de lipedema puede estar indicada en personas con prediabetes, diabetes o con alto riesgo de desarrollar enfermedades cardiovasculares.
14. Psicología
La psicología es una herramienta importante para que las personas con lipedema reciban apoyo emocional y puedan mejorar su autoestima, ya que se trata de una enfermedad crónica que altera el aspecto físico y puede generar incomodidad.
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