La liposucción es una cirugía plástica indicada para retirar el exceso de grasa localizada en una determinada área del cuerpo, como el abdomen, muslos, flancos, espalda o brazos, por ejemplo, ayudando a mejorar el contorno del cuerpo.
Este tipo de procedimiento puede ser realizado tanto en hombres como en mujeres y es importante que sea realizado por un cirujano plástico de confianza y bajo las condiciones adecuadas de higiene y seguridad.

Preparación previo a la cirugía
Antes de la liposucción se recomienda realizar análisis de sangre para evaluar el estado de salud de la persona y disminuir el riesgo de complicaciones, así como otros exámenes para evaluar el corazón, de imagen y de orina, por ejemplo.
Además, el médico puede recomendar una dieta líquida 2 días antes del procedimiento así como ayuno 8 horas antes de comenzar la cirugía. Es importante tomar la medicación habitual, en caso de que el médico no lo contraindique hasta el día de la cirugía, así como comunicar al médico cualquier problema de salud, incluso una simple gripe o refriado, puesto que podría afectar la recuperación.
Cómo se realiza la cirugía
En caso de que la persona sea apta para que se le realice la cirugía, el médico indicará anestesia, ya sea general o intravenosa, y a medida en que esta comience a hacer efecto, se delimita la zona de la piel donde va a retirar la grasa, posteriormente se realizan pequeños orificios en la zona para que se introduzca un pequeño tubo para aspirar la grasa sobrante.
Esta cirugía puede realizarse cuando no se logra eliminar la grasa localizada a través de dietas o ejercicio físico y puede realizarse tanto en hombres como en mujeres. La duración de la cirugía depende del área y de la cantidad de grasa que se vaya a aspirar, variando entre algunos minutos a un par de horas.
Durante la liposucción, el médico puede realizar lipoescultura, además de remover la grasa; esto consiste en utilizar la grasa retirada para colocarla en otra área del cuerpo, con la finalidad de mejorar el contorno. De esta forma, en la propia cirugía es posible remover grasa localizada del abdomen y después colocarla en las nalgas para aumentar el volumen, sin necesidad de utilizar implantes de silicona.

Resultados de la liposucción (antes y después)
Después de la cirugía, los resultados son un cuerpo más delineado, bonito y delgado, puesto que se pierde algo de peso debido a la remoción de la grasa localizada, quedando un cuerpo más estético y delgado. No obstante, aproximadamente 1 mes después de la liposucción, los resultados pueden observarse mejor, puesto que la persona ya no se encuentra inflamada. De esta forma, los resultados sólo comienzan a surgir después de 6 meses.
Esta cirugía estética prácticamente no deja cicatrices, puesto que se realizan pequeños orificios en sitios de poca visibilidad, como en el interior del ombligo o en los pliegues; razón por la cual es una excelente solución para las personas que desean perder grasa localizada de forma rápida
Cuidados en la recuperación de la liposucción
Inmediatamente después de la cirugía es normal sentir dolor y presentar inflamación, razón por la cual se deben tomar los medicamentos indicados por el médico para así disminuir el dolor y la incomodidad. Además, también se recomienda:
- Caminar lentamente durante 10 minutos, 2 veces al día, hasta 7 días después de la cirugía;
- Permanecer con la faja o medias de contención durante 72 horas sin retirarlas; pudiendo removerlas únicamente para dormir al final de 15 días.
- Bañarse al cabo de 3 días, retirando los vendajes, secando bien las cicatrices y colocando iodopovidona y un band-aid o curita sobre los puntos;
- Retirar los puntos en el médico, al cabo de 8 días.
Además, es importante tomar los medicamentos para los dolores y los antibióticos indicados por el médico y evitar dormir sobre la zona que fue tratada.
Lea más sobre los cuidados que se deben tener en cuenta en el postoperatorio de la liposucción.
Posibles riesgos de la liposucción
La liposucción es una técnica quirúrgica con bases sólidas, por lo que se considera segura. Sin embargo, como cualquier otro tipo de cirugía, la liposucción también tiene algunos riesgos, especialmente relacionados con la infección de la zona del corte, alteraciones de la sensibilidad o hematomas.
Otro de los mayores riesgos de esta cirugía, y que se ha vuelto cada vez más raro, es la posible perforación de los órganos, especialmente cuando la liposucción se realice en la zona abdominal.
La mejor forma de disminuir el riesgo de complicaciones es realizarse este procedimiento en una clínica certificada y con profesionales con experiencia.