8 causas de hígado graso y qué hacer

Actualizado en diciembre 2022

El hígado graso, también llamado esteatosis hepática, es la acumulación de grasa en el hígado que puede causar inflamación y daño a nivel de las células hepáticas.

El surgimiento de esta enfermedad suele estar relacionada con hábitos de vida poco saludables, como mantener una dieta rica en grasas y carbohidratos, ser sedentario o consumir bebidas alcohólicas en exceso. Sin embargo, la esteatosis hepática también puede surgir como consecuencia de algunas enfermedades como la diabetes, por ejemplo.

Esta enfermedad suele ser asintomática, siendo importante mantenerse atento a las posibles causas y, en caso de tener algún riesgo, se debe acudir al médico para que realice una evaluación que permita identificar la esteatosis a tiempo, de manera que sea tratada rápidamente para evitar complicaciones, como una cirrosis hepática.

Imagem ilustrativa número 1

Las principales causas de grasa en el hígado son:

1. Obesidad, diabetes y resistencia a la insulina

La obesidad, la diabetes del tipo 2 y la resistencia a la insulina son las causas más frecuentes de la acumulación de grasa en el hígado. En estos casos, existe un desequilibrio entre la producción y la utilización de triglicéridos por parte del cuerpo, lo que origina un aumento de la grasa almacenada en el hígado.

Qué hacer: es importante seguir las orientaciones del médico para disminuir los niveles de glucosa circulante en la sangre, siendo importante tener una alimentación saludable y equilibrada, además de practicar actividades físicas regularmente. De esta forma, será posible disminuir el peso, favorecer la quema de grasa y regular los niveles de glucosa.

2. Colesterol o triglicéridos elevados

El colesterol alto es otra de las principales causas del hígado graso, especialmente, cuando ocurre un aumento del nivel de triglicéridos y una disminución del HDL, que es el colesterol bueno.

Qué hacer: se recomienda disminuir el consumo de alimentos ricos en grasa, dando preferencia a alimentos ricos en fibras, frutas y vegetales. De esta forma es posible disminuir el riesgo de deposición de grasa en el hígado, además de prevenir el desarrollo de enfermedades cardiovasculares. Vea qué comer para bajar el colesterol.

3. Alimentación rica en grasas y azúcar

La acumulación de grasa en el hígado también esta relacionada al estilo de vida. La combinación de la ingesta de alimentos ricos en azúcares, grasas y pobre en fibras junto con el sedentarismo, ocasiona el aumento de peso, agravando así la esteatosis hepática.

Qué hacer: en este caso es importante mejorar los hábitos alimentarios, disminuyendo el consumo de alimentos procesados ricos en grasa y azúcar, y optando por alimentos ricos en fibras, frutas y vegetales. Además, es importante practicar actividad física regularmente, ya que así es posible utilizar la grasa del cuerpo y azúcar circulante como fuente de energía, disminuyendo la acumulación de grasa en el hígado.

4. Consumo excesivo de alcohol

El hígado graso también puede surgir cuando existe un consumo exagerado de alcohol, siendo este exceso considerado cuando la cantidad diaria de alcohol supera los 20 g para las mujeres y más de 30 g para los hombres, lo que equivale a 2 y 3 dosis, respectivamente.

Qué hacer: se recomienda disminuir el consumo de bebidas alcohólicas, ya que de esta forma es posible disminuir la inflamación del hígado y la grasa acumulada, aliviando los síntomas y promoviendo su mejoría.

5. Hepatitis B o C

Personas que tengan hepatitis B o C crónica tienen más probabilidades de tener grasa en el hígado y otras enfermedades relacionadas, puesto que la presencia de las lesiones provocadas por la hepatitis en las células del hígado dificultan el trabajo del órgano, facilitando así la acumulación de grasa.

Qué hacer: es importante seguir las recomendaciones indicadas por el médico para el tratamiento de la hepatitis, que puede incluir el uso de medicamentos, reposo, hidratación, disminución del consumo de bebidas alcohólicas y alimentación leve y saludable.

6. Uso de medicamentos

El uso de ciertos medicamentos puede contribuir a la acumulación de grasa en el hígado, debido a que al utilizarlos a largo plazo, pueden ocasionar lesiones en este órgano y, como consecuencia, surgir esteatosis hepática. Entre estos medicamentos se incluyen la amiodarona, los corticoides, los estrógenos o el tamoxifeno. Vea otros efectos secundarios del tamoxifeno

Qué hacer: en estos casos es importante que el médico que indicó el medicamento realice una evaluación, ya que de esta forma se podrá considerar la posibilidad de suspender o cambiar el tratamiento.

7. Enfermedad de Wilson

Esta enfermedad es rara, se manifiesta en la infancia y se caracteriza por la incapacidad del cuerpo para metabolizar el cobre en exceso, trayendo como consecuencia un cuadro de intoxicación. Este cobre en exceso normalmente es almacenado en el hígado, el cual causa lesiones en las células y facilita la acumulación de grasa en el mismo.

Qué hacer: es importante consultar al médico para que se evalúen los niveles de cobre en la sangre y, de esta forma, se indique el tratamiento más adecuado. De forma general, el médico puede indicar el uso de medicamentos que se adhieran al cobre y favorezcan su eliminación por el intestino y riñones. Además, se recomienda disminuir el consumo de alimentos con este mineral, como frutas secas, champiñones y nueces, por ejemplo.

Conozca más sobre la enfermedad de Wilson y su tratamiento.

8. Desnutrición

La desnutrición provoca una disminución de las lipoproteínas en el organismo, que son las moléculas responsables por eliminar la grasa. La falta de estas lipoproteínas imposibilita la salida de los triglicéridos del hígado, los cuales se acumulan en el órgano y causan hígado graso.

Qué hacer: en casos de desnutrición debe recibirse apoyo de de un nutricionista para que oriente el tratamiento, el cual consiste en el aumento gradual de calorías consumidas en el día, además de la ingesta de suplementos alimentarios, en algunos casos.

Conozca más sobre cómo se realiza el tratamiento para la desnutrición.

Cómo confirmar si tiene grasa en el hígado

El exceso de grasa en el hígado normalmente no produce signos ni síntomas y, generalmente, es diagnosticado al azar cuando la persona se realiza un ultrasonido de abdomen como parte de sus exámenes de rutina. Luego de la sospecha, el médico evalúa los niveles de las enzimas hepáticas TGO y TGP, además de la concentración de bilirrubina, colesterol y gamma-GT en la sangre para confirmar la enfermedad.

En casos más graves, los cuales se dan cuando la esteatosis hepática no es diagnosticada y tratada en sus fases iniciales, pueden haber síntomas como mala digestión, cansancio frecuente, pérdida de apetito y abdomen hinchado, por ejemplo.

Conozca los principales síntomas del hígado graso.

Complicaciones del hígado graso

Las complicaciones causadas por la acumulación de grasa en el hígado dependen del estilo de vida de la persona y de otros factores asociados, como la presencia de diabetes, obesidad o enfermedades inmunes. Por lo general, la inflamación del hígado suele ser progresiva, por lo que a largo plazo podría ocasionar enfermedades más graves, como una cirrosis hepática.

Para evitar las consecuencias de la acumulación de grasa en el hígado se recomienda que la persona realice una dieta rica en frutas y vegetales, evitando el consumo de alimentos ricos en grasas y azúcares. Asimismo, se debe realizar ejercicio físico regular, por lo menos 30 minutos diarios. Vea cómo debe ser la dieta.

Conozca con más detalle cómo debe ser la dieta para hígado graso en el siguiente video:

Vídeos relacionados