Diarrea en el embarazo: causas y remedios caseros

La diarrea durante el embarazo es relativamente común y puede deberse a cambios hormonales, ajustes en la alimentación, uso de suplementos, intolerancias alimentarias, infecciones intestinales o incluso a la ansiedad previa al parto.

Para prevenir y controlar este cuadro, se recomienda mantener una alimentación equilibrada, evitar comidas grasosas y preferir frutas cocidas y sin cáscara, además de aumentar la ingesta de líquidos como agua de coco o jugos naturales.

Si la diarrea persiste por más de tres días o se acompaña de fiebre, heces con sangre, dolor abdominal o vómitos, es fundamental acudir al hospital o consultar al obstetra para identificar la causa e iniciar el tratamiento adecuado, que puede incluir medicamentos, reposo y una mayor hidratación.

Principales causas

Las causas más comunes de la diarrea en el embarazo son:

1. Alteraciones hormonales

Las alteraciones hormonales son normales durante la gestación y pueden afectar el funcionamiento del sistema digestivo, por lo que algunas mujeres pueden presentar estreñimiento o diarrea.

Qué hacer: estas variaciones hormonales no requieren tratamiento específico; sin embargo, para evitar la diarrea en el embarazo, se recomienda comer porciones pequeñas con mayor frecuencia, lo que ayuda al intestino a trabajar de forma más equilibrada.

También se aconseja evitar alimentos con efecto laxante, como la ciruela, la papaya y la avena, ya que pueden agravar la diarrea.

2. Nuevas intolerancias alimentarias

Durante el embarazo también puede presentarse intolerancia a ciertos alimentos, debido a una mayor sensibilidad del intestino a algunos componentes, como el gluten o la lactosa, presentes en alimentos como pan, pasteles, pastas, leche, quesos y yogures.

Por esta razón, comidas que antes eran bien toleradas pueden comenzar a provocar gases, diarrea o dolor abdominal.

Qué hacer: se recomienda consultar al obstetra y al nutricionista para identificar el alimento que causa la intolerancia. Para ello, puede ser útil llevar un registro de los alimentos consumidos y realizar análisis de sangre o de heces.

Una vez identificado el alimento responsable, el especialista podrá realizar las sustituciones necesarias y elaborar un plan de alimentación personalizado según las necesidades nutricionales y la etapa del embarazo.

3. Cambios en la dieta

Durante el embarazo, muchas mujeres realizan cambios importantes en la alimentación, ya sea para tener una gestación más saludable o para corregir deficiencias nutricionales.

Estos ajustes pueden incluir un aumento rápido en el consumo de fibra o de alimentos con efecto laxante, como avena, frijoles y papaya, que pueden estimular el intestino y causar diarrea.

Qué hacer: para evitar este problema, se recomienda introducir los alimentos ricos en fibra y los laxantes naturales de forma gradual, evitando cambios bruscos en la dieta.

Además, mantener una buena hidratación ayuda al intestino a funcionar correctamente y previene molestias digestivas.

4. Uso de suplementos

El uso de suplementos durante el embarazo, como el magnesio o el ácido fólico en dosis altas, puede provocar diarrea o malestar estomacal en algunas mujeres, especialmente durante los primeros días de consumo.

Qué hacer: si la diarrea aparece después de iniciar un suplemento, se recomienda informar al obstetra para que evalúe la situación y realice los ajustes necesarios, como cambiar la marca, el tipo de suplemento o el horario de administración.

5. Ansiedad antes del parto

Los retortijones y la diarrea es relativamente común en el tercer trimestre del embarazo y puede estar relacionada con la ansiedad o el miedo que la mujer siente ante la llegada del parto.

En algunos casos, también puede presentarse pocos días antes del nacimiento, ya que el cerebro estimula al cuerpo para prepararse para ese momento.

Sin embargo, las señales clásicas de trabajo de parto no incluyen la diarrea, siendo más comunes la ruptura de la bolsa amniótica y el aumento de las contracciones.

Qué hacer: se recomienda descansar, dormir bien y realizar actividades físicas ligeras, como caminatas o estiramientos, siempre que el obstetra las autorice, ya que ayudan a aliviar la ansiedad y a mantener el bienestar general.

6. Infección intestinal

La infección intestinal es una de las causas más comunes de diarrea durante el embarazo y generalmente ocurre al consumir alimentos o agua contaminados con bacterias, virus o parásitos. Además de la diarrea, puede provocar fiebre, dolor abdominal, náuseas y vómitos.

Qué hacer: se recomienda consultar al obstetra para evaluar los síntomas y, si es necesario, realizar un examen de heces que ayude a identificar el agente causante de la infección y orientar el tratamiento más adecuado.

Durante la recuperación, es importante guardar reposo, beber abundante cantidad de líquidos y mantener una alimentación ligera y de fácil digestión, con alimentos como arroz cocido, pollo o pescado con poco condimento y jugos colados.

En algunos casos, el médico puede indicar antibióticos específicos, como vancomicina o metronidazol, cuando la causa es una infección bacteriana confirmada.

Remedios caseros para la diarrea

Para tratar la diarrea en el embarazo se recomienda:

• Beber abundantes líquidos claros, como el agua mineral, caldos o suero de rehidratación;
• Comer alimentos cocidos, a la plancha o al vapor, como arroz con zanahoria, pollo a la plancha y sin piel, pan blanco tostado;
• Consumir frutas y vegetales cocidos y sin cáscara, como manzana, pera o banana verde;
• Incluir alimentos probióticos, como el yogur, kefir, tempeh o pepinillos, que ayudan a equilibrar la flora intestinal.

Se aconseja evitar frituras, alimentos grasosos, comidas muy condimentadas y tés o mezclas herbales sin evidencia de seguridad en el embarazo. Vea cuáles son los alimentos recomendados durante el embarazo.

Lo ideal es mantener una alimentación ligera y de fácil digestión, que reduzca la irritación intestinal y favorezca una mejoría progresiva de la diarrea.

¿Es normal tener diarrea en el embarazo?

Es normal que algunas mujeres presenten episodios de diarrea durante el embarazo, especialmente en los primeros meses o cerca del parto. Suele deberse a los cambios hormonales, modificaciones en la dieta o mayor sensibilidad intestinal, y por lo general mejora sola en pocos días con una alimentación ligera e hidratación adecuada.

Sin embargo, si la diarrea dura más de dos o tres días, o se acompaña de fiebre, dolor abdominal o signos de deshidratación, es importante consultar al médico para descartar infecciones u otras causas que requieran tratamiento.

Cuándo acudir al médico

La mujer embarazada debe acudir al médico cuando la diarrea dura más de 3 días o aparecen otros síntomas como:

• Heces con sangre;
• Dolor abdominal intenso;
• Vómitos frecuentes;
• Fiebre superior a 38 °C;
• Más de 3 evacuaciones líquidas en un solo día;
• Diarrea persistente durante varios días

En estas situaciones, es fundamental consultar al obstetra para identificar la causa de la diarrea e iniciar el tratamiento más adecuado, evitando complicaciones como la deshidratación.

Los medicamentos para detener la diarrea, como la loperamida o el racecadotrilo, solo deben usarse bajo indicación médica, ya que en algunos casos pueden empeorar el cuadro o dificultar la eliminación del agente que provoca la infección.