La escarola es una verdura que sirve para prevenir enfermedades como hipertensión, diabetes y ACV, debido a que posee óptimas cantidades de vitamina A, vitamina C y ácido cafeico, nutrientes con propiedades antioxidantes que combaten los radicales libres en el organismo.
Además, la escarola, conocida también como endivia, posee buenas cantidades de inulina, un tipo de fibra que aumenta el volumen de las heces, facilitando el tránsito intestinal, ayudando a combatir el estreñimiento. Conozca otros alimentos fuente de inulina.
La escarola tiene hojas verdes oscuras, una textura firme y un sabor un poco amargo. Este vegetal se puede encontrar en los supermercados y puede ser consumida cruda, en ensaladas y jugos o se puede cocinar sofrita o en la pizza.
Para qué sirve
La escarola sirve para:
1. Ayuda a controlar la presión arterial
La escarola posee buenas cantidades de potasio, un mineral que facilita la eliminación del exceso de sodio en el organismo por la orina, ayudando a controlar la presión alta. Conozca más alimentos ricos en potasio.
Además de eso, la escarola también es fuente de vitamina C, vitamina A y ácido cafeico, nutrientes con propiedades antioxidantes que protegen las arterias y mejoran la circulación en la sangre.
2. Facilitar la pérdida de peso
Por contener óptimas cantidades de fibras, la escarola ayuda a formar un tipo de gel en el estómago, aumentando el tiempo de digestión de los alimentos, prolongando la saciedad y facilitando la pérdida de peso.
La escarola también posee bajo índice glucémico, siendo una muy buena opción para incluir en las dietas low carb, una dieta donde disminuye la ingesta de carbohidratos y aumenta el consumo de proteínas, promoviendo la pérdida de peso. Sepa más sobre la dieta low carb.
3. Prevenir la osteoporosis
La escarola es rica en vitamina K, una vitamina esencial que ayuda a fijar el calcio en los huesos, previniendo la osteoporosis.
Asimismo, por contener calcio, la escarola también ayuda a mantener los huesos saludables previniendo situaciones, como las fracturas.
4. Controlar la diabetes
Las fibras presentes en la escarola disminuyen la velocidad de absorción del azúcar de los alimentos, promoviendo equilibrio de los niveles de glucosa en sangre, evitando la resistencia a la insulina y controlando la diabetes.
5. Fortalecer el sistema inmunológico
La escarola tiene buenas cantidades de ácido cafeico y flavonoides, compuestos bioactivos con acción antioxidante y antiinflamatoria que fortalecen las células del sistema inmunológico, ayudando a combatir virus, bacterias y hongos, previniendo situaciones, como gripe, sinusitis y alergias.
6. Diminuir triglicéridos y colesterol
Por tener buenas cantidades de fibras, la escarola disminuye la absorción de grasas de los alimentos, reduciendo los niveles de colesterol “malo“, o LDL, y los triglicéridos en la sangre, ayudando en la prevención de enfermedades, como insuficiencia cardíaca, aterosclerosis y derrame cerebrovascular.
7. Prevenir las arrugas y la flacidez
La escarola contiene vitamina A, flavonoides y ácido cafeico, compuestos con propiedades antioxidantes que combaten los radicales libres, que son los principales responsables por los daños de la piel, evitando el surgimiento de arrugas y flacidez.
Además de eso, esta verdura también contiene vitamina C, una vitamina que participa en la formación de colágeno, promoviendo la elasticidad y la firmeza de la piel. Vea otros consejos para tener una piel joven.
8. Mantener el intestino saludable
La escarola contiene muy buenas cantidades de inulina, una fibra prebiótica que sirve de alimento para las bacterias beneficiosas del intestino, ayudando a equilibrar la flora intestinal, previniendo el surgimiento de diarreas, infecciones intestinales y síndrome de intestino irritable, por ejemplo.
Por contener buenas cantidades de fibras solubles, la escarola también aumenta el volumen del bolo fecal, facilitando el tránsito intestinal, combatiendo el estreñimiento.
9. Mejorar el humor
La escarola ayuda a mejorar el humor porque contiene buenas cantidades de inulina, un prebiótico que fortalece las bacterias benéficas del intestino, ayudando a producir la serotonina, un neurotransmisor responsable por la regulación del sueño, apetito y humor.
Diferencia entre escarola y achicoria
A pesar de ser una hortaliza de la misma familia y tener un sabor muy parecido con la escarola, la achicoria tiene hojas más cortas y totalmente onduladas.
En cambio, la escarola tiene hojas más largas que se parecen a la lechuga, pudiendo tener las puntas de las hojas lisas u onduladas.
Información nutricional de la escarola
La siguiente tabla muestra la información nutricional de 100 g de escarola cruda y cocida:
Es importante mencionar, que para obtener los beneficios de la escarola, debe ser consumida junto a una dieta equilibrada y saludable, además de hacer actividad física regularmente.
Cómo consumirla
La escarola puede ser consumida cruda en ensaladas y jugos o cocinada en preparaciones, como tartas, sopas, pizzas, omeletes y sofritos. La recomendación diaria de vegetales en general es de 2 a 3 porciones al día.
Recetas sabrosas con escarola
A continuación se indican algunas recetas simples y sabrosas con escarola:
1. Pizza de escarola
Ingredientes:
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1 porción de masa de pizza casera integral;
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1/2 taza de jugo de tomate casero;
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1 hilo de aceite;
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2 tazas de escarola sofrita;
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Ralladura de 1 limón;
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Queso parmesano a gusto;
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Pimienta a gusto.
Modo de preparación:
Escurrir bien la escarola sofrita. Precalentar el horno a 250 °C. Colocar la masa de pizza en una fuente. Extender con una cuchara sobre la masa el jugo de tomate y cubrir con la escarola. Adicionar la pimienta y un hilo de aceite sobre la pizza, llevándola al horno durante 15 minutos o hasta que la masa quede dorada. Retirar la pizza del horno y polvorear con la ralladura de limón y el queso parmesano y servir.
2. Escarola sofrita
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1 manojo de escarola;
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3 dientes de ajo;
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2 cucharadas de aceite de oliva;
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Pimienta y sal a gusto.
Modo de preparación:
Lavar bien las hojas de la escarola y dejar escurrir. Juntar de 4 a 5 hojas, una sobre la otra en una tabla de cortar. Enrollar las hojas y cortarlas en tiritas finas de 1 cm y reservar. Picar el ajo y reservar.
Calentar una sartén a fuego medio, adicionando el aceite y el ajo picado, dorando por 2 minutos. Luego, agregar la escarola de a poco y dorar, mezclando con una cuchara o espátula, por 2 minutos más. Retirar la sartén del fuego y agregar la pimienta y sal a gusto, mezclando bien. Por último servir.
