17 remedios caseros para las náuseas y vómitos en el embarazo

Actualizado en abril 2024
Evidencia científica

Las náuseas y vómitos durante el embarazo son síntomas normales y pueden tratarse con medidas simples y caseras, como masticar un trozo de jengibre, beber limonada o chupar helado de limón, por ejemplo.

Generalmente, las náuseas son más frecuentes por la mañana o pueden ocurrir varias veces al día y estar asociadas con vómitos. Este malestar puede ser experimentado por la mayoría de las mujeres embarazadas en el primer trimestre y tiende a desaparecer después de esta etapa del embarazo. Sin embargo, en algunos casos, las náuseas también pueden mantenerse durante todo el embarazo.

Cuando las náuseas son muy persistentes y provocan vómitos constantes, se debe informar al médico obstetra para que pueda recetar un medicamento para las náuseas, ya que es importante que la mujer embarazada esté bien nutrida y bien hidratada para su bienestar y el desarrollo del bebé. Vea algunos medicamentos para aliviar las náuseas y vómitos en el embarazo.

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Remedios para las náuseas y vómitos en el embarazo

Algunas formas naturales para aliviar las náuseas y vómitos en el embarazo son:

1. Beber té de jengibre

El jengibre posee propiedades antieméticas que pueden reducir los mareos y náuseas causados por el embarazo, además de ayudar a la digestión y disminuir la irritación de la pared del estómago.

Una buena forma de consumir el jengibre y reducir estos síntomas es beber té de jengibre, masticar un pedacito de jengibre por la mañana o chupar un dulce de jengibre. Para hacer el té de esta planta, basta colocar 1 cm de jengibre en 1 taza con agua hirviendo y dejar reposar por algunos minutos. Después, quitar el jengibre, dejar entibiar y beber a continuación.

Muchos estudios demuestran que es seguro utilizar jengibre en el embarazo, siempre que no se pase de 1 gramo de jengibre por día, durante un máximo de 4 días consecutivos. 

El jengibre debe evitarse en caso de que el parto esté cerca y en mujeres con antecedentes de aborto, problemas de coagulación o que tengan riesgo de hemorragias.

2. Hacer inhalaciones con aceite de menta

El aceite de menta es rico aceites esenciales, como el mentol y mentona, con propiedades calmantes, antiespasmódicas y antieméticas, calmantes, que cuando son inhalados pueden ayudar a reducir las náuseas y vómitos, además de otros problemas digestivos que pueden suceder en la mujer embarazada.

Para realizar las inhalaciones de menta, se debe colocar en una olla con agua caliente unas gotas de aceite esencial de menta piperita e inhalar unos segundos, pudiendo ser realizado varias veces al día.

Además de eso, también puede ser preparado el té de menta para ayudar a reducir las náuseas. Conozca cómo preparar el té de menta y otros beneficios.

3. Comer una paleta de limón

Comer una paleta de limón o beber una limonada, generalmente ayuda mucho a disminuir los mareos y náuseas en el embarazo. En los casos de embarazadas que no logran alimentarse bien debido a las náuseas o que presentan vómito, una buena opción es oler limón o aceite esencial de limón para ayudar a reducir el malestar.

4. Comer alimentos fríos

Los alimentos fríos, como yogur, gelatina, paletas heladas de fruta o ensaladas, ayudan a aliviar el mareo y náuseas en el embarazo, además de ser leves y de fácil digestión, ya que durante la gestación este proceso es más lento debido a las alteraciones hormonales, lo cual puede producir náuseas.

Otra opción que puede ayudar a aliviar las náuseas es tomar agua fría o chupar un hielo.

5. Comer galletas tipo cracker

Las galletas tipo cracker son de fácil digestión y son una buena forma de reducir las náuseas y mareos matinales provocados por el estómago vacío, y pueden ser consumidas después de despertarse, antes de levantarse de la cama.

6. Beber 2 litros de agua al día

La ingesta de líquidos durante el día y en pequeñas cantidades puede ayudar a aliviar los mareos y náuseas, además de mantener el cuerpo hidratado y reducir la retención de líquidos. Es importante tomar al menos 2 litros de agua al día; no obstante, algunas mujeres pueden presentar náuseas al tomar agua, por lo que se puede agregar una rodaja de limón o jengibre rallado, por ejemplo.

Otra opción es consumir jugo de frutas como banana, sandía, piña o limón, agua de coco o agua con gas, que también pueden ayudar a aliviar las náuseas.

7. Comer en intervalos cortos

Comer raciones pequeñas, en intervalos cortos, cada 2 o 3 horas, masticando bien los alimentos y comiendo lento, ayuda a aliviar las náuseas. 

Esto ocurre porque el estómago vacío puede empeorar las náuseas, y comer muy rápido puede hacer que se coma mucho, dejando el estómago pesado y dificultando la digestión, pudiendo causar vómitos. 

8. Comer alimentos ricos en vitamina B6

Consumir alimentos ricos en vitamina B6, banana, sandía, castañas y zanahoria cocida, por ejemplo, puede ayudar a aliviar o a evitar las náuseas en el embarazo. Conozca una lista de alimentos ricos en vitamina B6

En ciertos casos, el obstetra también puede indicar el uso de suplementos de vitamina B6, que solo deben ser utilizados en las dosis indicadas por el médico. 

9. Evitar alimentos muy condimentados

Evitar alimentos muy condimentados, muy grasosos y con mucha pimienta ayuda a aliviar las náuseas en el embarazo, pues son alimentos de difícil digestión que pueden empeorar las náuseas. 

10.  Evitar olores fuertes

Evitar olores fuertes, como de alimentos calientes, perfumes, jabón de baño o productos de limpieza, por ejemplo, ayuda a prevenir o a aliviar las náuseas. 

11. Realizar técnicas de relajación

Las técnicas de relajación, tales como ejercicios de respiración, meditar o la práctica de la relajación muscular progresiva (tensar y relajar los músculos), pueden ayudar a reducir las náuseas y vómitos en la mujer embarazada, ya que ayudan a mantener la mente relajada y generan armonía interior, logrando un mejor control corporal. Conozca más beneficios de la medicación.

12. Descansar

El descanso es importante para aliviar las náuseas en el embarazo, pues el cansancio puede empeorarlas, siendo recomendado acostarse o sentarse en una posición cómoda durante algunos minutos, hasta que la sensación de náuseas cese. Sin embargo, se debe evitar acostarse luego de comer. 

Al descansar, se debe inhalar lentamente por la nariz y exhalar el aire por la boca, pues esto ayuda a mejorar las náuseas. 

13. Consumir alimentos de fácil digestión

Consumir alimentos de fácil digestión, como el pan, pastas y el arroz blanco, carnes magras, como el pollo, frutas sin cáscara o verduras cocidas, cocinados con pocos condimentos y consumidos a temperatura preferentemente templada, contribuyen a una buena digestión, aliviando o evitando las náuseas en el embarazo. 

14. Mantener el ambiente aireado

Mantener el ambiente aireado, abriendo las ventanas, también es importante para evitar o aliviar las náuseas en el embarazo, pues en los ambientes calurosos y encerrados los olores pueden tornarse más fuertes, empeorando las náuseas. 

15.  Practicar actividades físicas leves

Practicar actividades físicas leves, bajo orientación médica, puede ayudar a mejorar los movimientos gastrointestinales y a liberar endorfinas, que son sustancias que confieren una sensación de bienestar, pudiendo ayudar a alivar las náuseas y mareos.

16. Hacer acupuntura

La acupuntura realizada con la aplicación de agujas específicas bien finas en el punto P6 Neiguan, localizado en la muñeca, puede ser un tratamiento eficaz para evitar o aliviar las náuseas en el embarazo, y debe ser llevado a cabo bajo orientación médica y por un profesional capacitado en este tipo de tratamiento. 

17. Usar pulsera antimareo

Otra opción es utilizar una pulsera antimareo, que también estimulan el punto P6 Neiguan para reducir las náuseas, la cual puede ser adquirida en ciertas farmacias, en tiendas de productos para mujeres embarazadas y bebes o en tiendas online. Conozca más consejos para evitar las náuseas excesivas en el embarazo.

Cuándo acudir al médico

Se debe consultar al obstetra en las siguientes situaciones:

  • Náuseas que duran todo el día;
  • Vómitos, más de 2 o 3 veces al día;
  • Dificultad para alimentarse o pérdida de peso;
  • Cansancio excesivo;
  • Confusión mental;
  • Mareos o desmayo;
  • Palpitaciones cardíacas;
  • Poca orina. 

De esta manera, el médico debe realizar una evaluación e indicar el mejor tratamiento, de ser necesario.