Vacuna de la BCG: para qué sirve y cuándo colocar

Actualizado en marzo 2022

La BCG es una vacuna indicada contra la tuberculosis que es administrada, por lo general, inmediatamente después del nacimiento, estando incluida en el calendario básico de vacunas del bebé. Esta vacuna no impide la infección ni el desarrollo de la enfermedad, sin embargo, impide que evolucione y evita, en la mayor parte de los casos, las formas más graves de la enfermedad, como la tuberculosis miliar y la meningitis tuberculosa. Conozca más sobre la tuberculosis.

La vacuna BCG está compuesta por bacterias del tipo Mycobacterium bovis (Bacillus Calmette-Guérin), que tiene una carga viral atenuada y que, por esta razón, ayuda a estimular el organismo, produciendo anticuerpos contra esta enfermedad, los cuales serán activados en caso de que la bacteria entre en el organismo.

Esta vacuna es colocada de forma gratuita por el Ministerio de Salud, siendo administrada normalmente en la maternidad o en los ambulatorios después del nacimiento, principalmente en aquellos países de riesgo.

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Cuándo se debe colocar

La vacuna de la BCG es indicada en recién nacidos con peso igual o mayor a 2 kg, motivo por el cual suele ser aplicada luego del nacimiento, por lo general en la maternidad.

Cómo es administrada

La vacuna BCG debe ser administrada directamente por parte de un médico, enfermero o profesional de la salud entrenado, en la capa superior de la piel. Generalmente, para niños con edad inferior a los 12 meses, la dosis recomendada es de 0,05 mL, y con edad superior a 12 meses es de 0,1 mL.

Qué significa la cicatriz de la BGC

La formación de la cicatriz indica que hubo una reacción en el organismo a las bacterias inyectadas en la piel, siendo considerado un signo de que la vacuna fue capaz de estimular la inmunidad en el bebé.

Sin embargo, la ausencia de cicatriz no indica necesariamente que hubo una falta de inmunidad, por lo que no se recomienda colocarse nuevamente la vacuna, pues no existen evidencias científicas de que sea benéfico.

Cuándo brota la úlcera

Esta vacuna es siempre aplicada en el brazo derecho del niño y la respuesta demora de 3 a 6 meses en aparecer, notándose al momento en que surja una pequeña mancha elevada y roja en la piel, la cual se convierte en una pequeña úlcera y, finalmente, en una cicatriz.

Cuidados que se deben tener después de la vacuna

Después de recibir la vacuna, el niño puede presentar una lesión en la zona de la inyección. Para una correcta cicatrización, se debe evitar cubrir la lesión y mantener la región limpia, no aplicar ningún tipo de medicamento ni realizar curas en la lesión.

Posibles efectos secundarios

Normalmente, la vacuna contra la tuberculosis no ocasiona el surgimiento de efectos secundarios, además de hinchazón, enrojecimiento y sensibilidad en la zona de la inyección, la cual gradualmente se convertirá en una pequeña vesícula y luego en una úlcera, de 2 a 4 semanas después.

Aunque sea inusual, en ciertos casos, puede surgir hinchazón de los ganglios linfáticos, dolor muscular y herida en la zona de la inyección. Al surgir estos efectos secundarios, se recomienda acudir al pediatra para que el niño sea evaluado.

Contraindicaciones

La vacuna se encuentra contraindicada en bebés prematuros o con menos de 2 kg, siendo necesario esperar al que el bebé llegue a este peso para que pueda ser administrada la vacuna. Asimismo, las personas con alergia a algún componente de la fórmula, con enfermedades congénitas o inmunosupresoras, como infección generalizada o SIDA, por ejemplo, no deben recibir la vacuna.

Cuál es la duración de la protección

La duración de la protección es variable. Se sabe que va disminuyendo con el pasar de los años gracias a la incapacidad de generar una cantidad suficientemente robusta y duradera de células de memoria. De esta forma, se sabe que la protección es mayor en los primeros 3 años de vida, pero no existen evidencias de que la protección sea superior a 15 años.

¿La vacuna BCG puede proteger contra el coronavirus?

Según la OMS[1], no hay evidencia científica que demuestre que la vacuna BCG sea capaz de proteger contra el nuevo coronavirus, que causa la infección por COVID-19. Sin embargo, se están realizando investigaciones para comprender si esta vacuna podría tener algún efecto beneficioso contra esta enfermedad viral.

Debido a la falta de evidencia, la OMS recomienda la vacuna BCG solo para países donde existe un mayor riesgo de contraer tuberculosis.