Los síntomas de alergia surgen cuando el organismo entra en contacto con una sustancia capaz de desencadenar una respuesta inflamatoria en el organismo por parte del sistema inmune, como polvo, polen, medicamentos, perfumes o alimentos, principalmente maní, huevo, leche y derivados.
Dependiendo de la zona del cuerpo y de la sustancia que causó la alergia, los síntomas pueden variar, haciendo más difícil de identificar la causa. De forma general, la alergia causa síntomas fuertes como comezón, enrojecimiento en la piel, hinchazón en la boca y falta de aire, siendo importante en estos casos acudir de inmediato al hospital para que se inicie el tratamiento lo antes posible.
De forma general, el tratamiento para la alergia se realiza de acuerdo a la orientación del alergólogo o médico general, e incluye el uso de medicamentos antihistamínicos y corticoides, en algunos casos. Además, en los casos más graves, puede ser necesaria la administración de adrenalina inyectable.

1. Alergia alimentaria
Los síntomas de alergia alimentaria surgen después de ingerir alimentos alergénicos como fresas, mariscos, cacahuetes, leche o frutos del bosque, por ejemplo, e incluyen:
- Hormigueo o comezón en la boca;
- Comezón en la piel, enrojecida y áspera;
- Hinchazón y comezón en el cuello, labios, cara o lengua;
- Dolor abdominal;
- Diarrea, náuseas o vómitos;
- Ronquera.
En los casos más graves o cuando el tratamiento no se inicia a tiempo, el paciente puede desarrollar síntomas de anafilaxia, que es una situación grave que debe ser tratada en el hospital y que incluye síntomas como dificultad para respirar, hinchazón en la garganta, presión baja repentina o desmayo. Vea más sobre el shock anafiláctico.
Vea en el siguiente video cómo identificar y tratar la alergia en la piel:
2. Alergia en la piel
Los síntomas de alergia en la piel son frecuentes en casos en que exista alergia a medicamentos, en presencia de enfermedades infecciosas o que el sistema inmune se encuentre debilitado, y normalmente incluyen el surgimiento de urticaria con bolitas, comezón, enrojecimiento e hinchazón de la piel.
Generalmente, estos síntomas son causados por el contacto directo con sustancias como perfumes, níquel, esmaltes o látex, pero también pueden ser causados por la liberación de histamina, teniendo como origen una alergia respiratoria o alimentaria.
Para aliviar los síntomas de alergia en la piel, se debe lavar la región con agua y jabón hipoalergénico, aplicar crema hidratante y tomar un medicamento antihistamínico como Hidroxizina, prescrito por el médico. Sin embargo, si los síntomas tardan en aliviarse, se recomienda consultar a un dermatólogo en caso de ser necesarios medicamentos para la alergia. Vea cómo identificar y tratar la alergia en la piel.
3. Alergia respiratoria
Los síntomas de alergia respiratoria suelen afectar la nariz, garganta y la piel, surgiendo:
- Secreción nasal, dejando la nariz tapada;
- Comezón en la nariz;
- Estornudos constantes;
- Nariz roja;
- Tos seca y dificultad para respirar;
- Enrojecimiento en los ojos y lagrimeo;
- Dolores de cabeza.
La alergia respiratoria puede surgir cuando las vías aéreas entran en contacto con sustancias como polvo, moho o pelo de gato u otros animales, y debe ser tratada en el hospital con el uso de medicamentos que faciliten la respiración como, Salbutamol o Terbutalina.
La alergia respiratoria no produce asma, pero puede agravar el cuadro de un paciente asmático, siendo que en esos casos, el paciente debe utilizar el inhalador recetado por el médico y tomar un medicamento antihistamínico para reducir los síntomas de la alergia.
4. Alergia a medicamentos
La alergia a medicamentos provoca síntomas parecidos con los otros tipos de alergia, como el surgimiento de bolitas rojas en la piel, comezón, urticaria, hinchazón, asma, diarrea, dolor de cabeza y cólicos intestinales.
Estos síntomas surgen con el inicio del uso de medicamentos y mejoran cuando el tratamiento se suspende. Después de identificar el medicamento causante de la alergia, es importante siempre informar el nombre del fármaco al médico antes de iniciar cualquier tratamiento o cirugía para evitar que este problema se repita.