La ileostomía es una abertura quirúrgica en la pared abdominal, llamada estoma, donde se conecta el intestino delgado, con el objetivo de permitir que las heces y los gases sean eliminados a través de esta abertura hacia una bolsa de ileostomía colectora, cuando no pueden pasar por el intestino grueso.
Este procedimiento se realiza normalmente después de cirugías en el sistema digestivo, principalmente en casos de cáncer intestinal, colitis ulcerosa o enfermedad de Crohn, por ejemplo. Puede ser una ileostomía temporal o permanente.
Las heces se eliminan en una bolsa exterior que se ajusta al cuerpo, por lo que se requieren ciertos cuidados para evitar infecciones e irritaciones en la piel, como descartar la bolsa de ileostomía de forma regular y limpiar el estoma y la piel alrededor.
Para qué sirve
La ileostomía se utiliza para redirigir el flujo del intestino delgado cuando el intestino grueso tiene alteraciones que impiden el paso natural de las heces.
De esta manera, la ileostomía permite que las heces y los gases sean eliminados en una bolsa externa conectada en el abdomen.
Cuándo es indicada
La ileostomía se indica en los siguientes casos:
- Postoperatorio de cirugías en el intestino grueso o recto;
- Cáncer en el intestino o recto;
- Colitis ulcerosa;
- Enfermedad de Crohn;
- Diverticulitis;
- Perforaciones en el abdomen.
Dependiendo de la causa, la ileostomía puede ser temporal, cuando el problema es tratado y el flujo intestinal puede volver a ser normal, o permanente, cuando no hay posibilidad de restablecer el flujo normal del intestino.
¿Cuál es la diferencia entre colostomía e ileostomía?
Tanto la colostomía como la ileostomía son aberturas en el abdomen a las cuales se conecta el intestino directamente para que las heces sean eliminadas en la bolsa colectora.
La diferencia radica en que, mientras en la ileostomía se conecta una parte del intestino delgado al abdomen, en la colostomía se realiza la conexión directamente desde el intestino grueso a la pared abdominal. Conozca más sobre la colostomía.
Cómo son las heces de la ileostomía
En el intestino grueso ocurre la absorción de agua y la acción de los microorganismos que forman parte de la microbiota intestinal, lo que da lugar a heces con una consistencia más pastosa y sólida.
Por lo tanto, en el caso de la ileostomía, como no hay paso de agua ni alimentos a través del intestino grueso, las heces son muy líquidas y ácidas, lo que puede causar una irritación considerable en la piel.
Cuidados con la bolsa de ileostomía
Algunos cuidados con la bolsa de ileostomía incluyen:
- Cambiar la bolsa de ileostomía de forma regular, lo que puede significar cambiarla varias veces al día;
- Descartar las heces contenidas en la bolsa en el inodoro;
- Descartar la bolsa después de su uso para evitar infecciones, colocándola en una bolsa de plástico y luego en la basura;
- Seguir las instrucciones de desinfección si el modelo de la bolsa de ileostomía es reutilizable;
- Limpiar el estoma y la piel alrededor con un paño suave humedecido en agua tibia;
- Secar bien la piel antes de colocar la nueva bolsa para asegurar que se adhiera correctamente;
- Usar la bolsa con la apertura del tamaño correcto para el estoma, para evitar fugas de heces en la piel que puedan causar irritación o infección.
Adicionalmente, se debe evitar el uso de productos en la piel sin la indicación médica, como soluciones hidratantes, cremas u aceites, ya que pueden dificultar la adhesión de la bolsa.
¿Cuándo se debe cambiar la bolsa?
Se recomienda cambiar la bolsa de ileostomía cuando esté llena entre 1/3 y 2/3 de su capacidad máxima, para evitar fugas de heces hacia la piel y prevenir la irritación o infecciones.
Cuidados con la piel alrededor de la ileostomía
Los principales cuidados que deben tomarse con la piel alrededor de la ileostomía son:
- Limpiar la piel alrededor del estoma cada vez que cambie la bolsa, y secar bien antes de colocar la nueva bolsa;
- Evitar tirar bruscamente de la bolsa para prevenir la irritación de la piel;
- Cambiar la bolsa de ileostomía si se siente alguna incomodidad en la piel;
- Cortar la abertura de la bolsa de ileostomía al tamaño adecuado, para evitar que las heces entren en contacto directo con la piel;
- Evitar aplicar productos que contengan alcohol en la piel, ya que puede resecarla.
Además de eso, en algunos casos el médico puede indicar el uso de un spray o pomada protectora que evite la irritación de la piel causada por el contenido liberado de la ileostomía.
Alimentación para ileostomía
La alimentación en caso de ileostomía también es importante, tendiendo en cuenta los siguientes cuidados:
1. Qué comer
La alimentación para la ileostomía varía según cada persona y su tolerancia a los alimentos, por lo que se recomienda probar los alimentos en pequeñas cantidades para verificar su efecto en las heces.
Si las heces son muy líquidas, se recomienda consumir alimentos, como arroz blanco o pasta cocida, plátano, sopas de verduras, cremas de vegetales, puré de verduras con papas, zanahoria, yuca, calabacín o calabaza, por ejemplo.
También, es importante que la persona beba suficiente agua durante el día, ya que existe un mayor riesgo de deshidratación debido a que las heces son muy líquidas y no hay reabsorción de agua por parte del organismo debido a que las heces no pasan por el intestino grueso. Vea cómo identificar los síntomas de deshidratación.
Algunos alimentos pueden ayudar a neutralizar el olor de las heces, por lo que puede recomendarse el consumo de zanahoria, chayote, espinacas, yogur natural, suero de leche integral, té de cáscara de manzana o té de menta.
2. Qué evitar
Durante las primeras 4 a 6 semanas después de la cirugía de ileostomía, se recomienda evitar alimentos que puedan obstruir el estoma, como los champiñones, nueces y semillas enteras, coco, frutos secos, uvas, cerezas, arroz o pan integral, por ejemplo.
Además, siempre que sea posible y de acuerdo con la tolerancia individual, se debe evitar alimentos muy grasos o picantes, bebidas que contengan cafeína como el café, el té negro o el té verde, bebidas alcohólicas, refrescos o agua con gas.
Cuándo ir al médico
Es importante consultar al médico siempre que aparezcan síntomas como:
- Irritación, ampollas, enrojecimiento, líquido o picazón en la piel alrededor del estoma;
- Cólicos intestinales durante más de 2 o 3 horas;
- Náuseas y vómitos;
- Sangrado en el estoma o presencia de sangre en la bolsa;
- Heces acuosas durante más de 5 a 6 horas.
Asimismo, se debe consultar al médico si se observa un cambio en el tamaño o la apariencia del estoma.
