Pólipos en colon: qué son, principales síntomas y tratamiento

Actualizado en noviembre 2023

Los pólipos en colon o pólipos intestinales son alteraciones que pueden surgir en el intestino debido a la excesiva proliferación de células presentes en la mucosa del intestino grueso.

Por lo general, los pólipos en la mayoría de los casos no causan el surgimiento de signos o síntomas, pero dependiendo del tamaño deben ser extirpados o controlados para evitar complicaciones.

Estas alteraciones suelen ser benignas, pero en algunos casos pueden convertirse en cáncer de colon, que puede ser fatal cuando se diagnostica en etapas avanzadas. Así, las personas mayores de 50 años o que tengan antecedentes de pólipos o cáncer de intestino en la familia deben consultar al gastroenterólogo y realizar pruebas como forma de prevención.

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Principales síntomas

La mayoría de los pólipos en el colon no generan síntomas, especialmente al inicio de su formación, por este motivo se recomienda acudir al médico si tiene 50 años o más para que indique una colonoscopia preventiva o si sufre de alguna enfermedad inflamatoria intestinal.

Sin embargo, cuando el pólipo se encuentra más desarrollado pueden surgir algunos síntomas, como por ejemplo: 

  • Cambio de hábito intestinal, pudiendo causar diarrea o estreñimiento;
  • Presencia de sangre en las heces, que puede ser observado a simple vista o detectado en un examen de sangre oculta en las heces;
  • Dolor o malestar abdominal como gases y cólicos intestinales.

Es importante que la persona consulte al gastroenterólogo si presenta algún síntoma que sea indicativo de pólipo intestinal, ya que en algunos casos existe la posibilidad de convertirse en cáncer. Así, al evaluar los signos y síntomas que presenta la persona y con el resultado de las pruebas de imagen, el médico puede comprobar la gravedad de los pólipos e indicar el tratamiento más adecuado.

¿Los pólipos intestinales pueden convertirse en cáncer?

En la mayoría de los casos, los pólipos en el colon son benignos y tiene baja probabilidad de convertirse en cáncer. Sin embargo, en los casos donde los pólipos son adenomatosos vellosos o tubulovellosos, hay mayor riesgo de que se conviertan en cáncer. Además, el riesgo en mayor en los pólipos sésiles, que son planos y que poseen más de 1 cm de diámetro, ya que cuanto mayor es el tamaño, mayor es el riesgo.

Algunos factores que pueden aumentar el riesgo de que se convierta en cáncer son la presencia de varios pólipos en el intestino; edad igual o superior a 50 años y; la presencia de enfermedades inflamatorias como enfermedad de Crohn y colitis ulcerativa, por ejemplo.

Para disminuir el riesgo de que los pólipos intestinales se conviertan en cáncer, se recomienda retirar todos los pólipos con más de 0,5 cm por medio de la colonoscopia, pero además, es importante practicar ejercicios regularmente; tener una alimentación rica en fibra; no fumar y evitar el consumo de bebidas alcohólicas, ya que estos factores facilitan la aparición del cáncer.

Vea el siguiente video con el Dr. Alexandre Palladino sobre la relación entre el cáncer de intestino y los pólipos:

Principales causas

Los pólipos en el colon pueden ocurrir debido a factores relacionados con los hábitos alimentarios y de vida, siendo más frecuentes que surjan después de los 50 años. Algunas de las principales causas relacionadas con el desarrollo de los mismos son:

  • Exceso de peso u obesidad;
  • Diabetes tipo 2 no controlada;
  • Alimentación rica en grasas;
  • Alimentación baja en calcio, vegetales y frutas;
  • Enfermedades inflamatorias, como colitis;
  • Síndrome de Lynch;
  • Poliposis adenomatosa familiar;
  • Síndrome de Gardner;
  • Síndrome de Peutz-Jeghers.

Además, las personas que fuman o consumen bebidas alcohólicas con frecuencia o tienen antecedentes familiares de pólipos o cáncer de intestino también tienen más probabilidades de desarrollar pólipos intestinales a lo largo de su vida.

Cómo se realiza el tratamiento 

El tratamiento consiste en evaluar el tamaño y las características del pólipo a través de una colonoscopia, siendo indicado para los pólipos que poseen más de 1 cm realizar una polipectomía. Después de extirparlo, el pólipo es enviado para el laboratorio para ser analizado y verificar si existen signos de malignidad. Por lo que de acuerdo al resultado del laboratorio, el médico podría indicar algún tratamiento en caso de ser necesario. Conozca cómo prepararse para la colonoscopia.

Después de extirpar el pólipo es importante que la persona tenga algunos cuidados para evitar complicaciones y la formación de nuevos pólipos intestinales. Además de esto, el médico puede recomendar la repetición del examen después de algunos años para verificar si hubo formación de nuevos pólipos. 

En los casos en que los pólipos miden menos de 0,5 cm y que no causan signos o síntomas, el médico podría decidir no retirarlo y acompañar su evolución repitiendo la colonoscopia según la indicación del médico.

Vea cómo se realiza la polipectomía.

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