En la semana 29 de gestación, el desarrollo del bebé está marcado por el comienzo de un mejor control del ritmo de la respiración y de la temperatura del cuerpo debido al desarrollo del cerebro que organiza mejor estas funciones.
El bebé tiene la piel menos arrugada por la acumulación de grasa sobre esta y los huesos son cada vez más rígidos.
Durante esta semana, la mujer puede continuar teniendo síntomas como calambres en las piernas o contracciones de Braxton-Hicks, además de que puede surgir cansancio excesivo y los pies pueden hincharse.
Desarrollo del bebé
A las 29 semanas de gestación, las principales características del desarrollo son:
- Los órganos y los sentidos del bebé continúan desarrollándose y nuevas células se desarrollan al instante;
- La cabeza crece y el cerebro se encuentra bastante activo, por lo que en esta semana tiene un mejor control del ritmo de la respiración y de la temperatura del cuerpo;
- La piel del bebé comienza a hacerse más grasosa y menos arrugada, adoptando un color más rojizo;
- Los huesos son cada vez más rígidos, consumiendo más calcio que proviene de la dieta de la mujer.
En esta semana de gestación, en caso de que el bebé sea niño, los testículos descienden desde cerca de los riñones hasta la ingle, en dirección al saco escrotal.
En el caso de las niñas, el clítoris sobresale un poco más debido a que aún no es cubierto por los labios vaginales, lo cual ocurrirá por completo en las últimas semanas antes del nacimiento.
Tamaño y peso del bebé
El tamaño del bebé a las 29 semanas de gestación es de aproximadamente 37 centímetros desde la cabeza hasta los pies y alrededor de 26,4 centímetros desde la cabeza hasta las nalgas, equivalente al tamaño de una calabaza verde.
El peso del bebé en esta semana es de alrededor de 1,25 kg.
Cambios en el cuerpo de la mujer
En la 29ª semana de embarazo, debido a la presión del útero sobre el intestino y la disminución de los movimientos intestinales, la mujer puede presentar estreñimiento. Además, los síntomas de contracción de Braxton-Hicks, calambres en las piernas o acidez pueden continuar.
En esta fase de la gestación, también es común que la mujer presente cansancio excesivo y, debido a las alteraciones hormonales normales del embarazo, los pies pueden hincharse, siendo recomendado usar zapatos más grandes.
Cuidados durante la 29ª semana
En la semana 29 de gestación, son importantes algunos cuidados para ayudar a aliviar las molestias que puedan surgir como:
- Estreñimiento: se debe mantener el cuerpo hidratado, bebiendo por lo menos 8 vasos de agua al día y comer más fibra en forma de granos enteros, frutas y vegetales frescos. Practicar ejercicio regular recomendado por el médico, el cual también puede ayudar a mejorar el tránsito intestinal y aliviar el malestar;
- Acidez: evitar acostarse después de las comidas y comer en pequeñas cantidades y en intervalos menores de 2 a 3 horas, los cuales pueden ayudar a aliviar el malestar. Otra medida importante es evitar beber líquidos durante las comidas así como comer frituras, comidas picantes o muy condimentadas. Vea otros consejos sobre cómo aliviar la acidez en el embarazo.
- Contracciones de Braxton-Hicks: mover el cuerpo o hacer ejercicios físicos recomendados por el médico ayudan a aliviar el malestar de las contracciones. Sin embargo, en caso de que las contracciones sean muy frecuentes o se acompañen de otros síntomas como dolor de espalda, sangrado vaginal o flujo líquido, se debe buscar ayuda médica de inmediato, ya que la mujer puede estar entrando en trabajo de parto. Conozca más sobre los signos del trabajo de parto.
- Calambres en las piernas: hacer un poco de ejercicio, estirar suavemente la pantorrilla, masajear la pantorrilla, aplicar compresas calientes o utilizar suplementos como calcio, magnesio o vitamina B recomendados por el médico pueden ayudar a disminuir los calambres. Además, es importante mantener el cuerpo hidratado tomando por lo menos 8 vasos de agua al día para ayudar a mejorar la circulación sanguínea en las piernas y evitar calambres;
- Cansancio excesivo: descansar durante el día, en caso de ser posible, ir a la cama un poco más temprano por la noche, puede ayudar a disminuir el cansancio y aumentar la motivación.
Es importante mantener una alimentación balanceada que incluya frutas, legumbres y verduras frescas, además de comer pequeñas porciones de forma frecuente para garantizar que los nutrientes lleguen al bebé. Beber por lo menos 8 vasos de agua al día, practicar actividades físicas recomendadas por el médico y descansar siempre que sea posible. Conozca más sobre cómo debe ser la alimentación en el embarazo.
Además, se recomienda aumentar el consumo de alimentos ricos en calcio como leche, queso, espinacas, sardina y brócoli, que son esenciales para fortalecer los huesos del bebé. Vea una lista completa de alimentos ricos en calcio.
Durante todo el embarazo es importante continuar tomando las vitaminas y suplementos indicados por el médico y evitar el uso de medicamentos por cuenta propia.
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