Broncodilatadores: qué son, para qué sirven (y cómo usar)

Actualizado en marzo 2024

Broncodilatadores son medicamentos indicados para el tratamiento, control y prevención de enfermedades respiratorias que causan espasmos en los bronquios, como el asma, la bronquitis o la enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC).

Estos medicamentos, como el salbutamol, el formoterol, el ipratropio o la teofilina, actúan relajando los músculos pulmonares, facilitando el flujo de aire hacia los pulmones y aliviando la sensación de falta de aire o dificultad para respirar.

Los broncodilatadores deben ser utilizados bajo la indicación del neumólogo y pueden administrarse en forma de inhalador, jarabe, comprimido, gotas o ampollas, por ejemplo, según la condición a tratar y la gravedad de los síntomas o crisis de broncoespasmo. Sepa qué es el broncoespasmo.

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Para qué sirven

Los broncodilatadores son indicados para:

  • Asma;
  • Bronquitis;
  • Enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC)
  • Enfisema pulmonar.

Dependiendo del tipo de broncodilatador, su uso puede ser por vía nasal u oral, o ser aplicado en la vena, y debe siempre ser usado bajo la indicación del médico neumólogo.

Tipos de broncodilatadores

Los broncodilatadores pueden clasificarse en dos tipos según su duración de acción:

1. Broncodilatadores de acción corta

Los broncodilatadores de acción corta, también conocidos como broncodilatadores de rescate, actúan en pocos minutos después de su aplicación y tienen efecto durante 4 a 6 horas.

Este tipo de broncodilatador se indica para el tratamiento de crisis de broncoespasmo, como las crisis de asma o exacerbaciones de la EPOC, aliviando rápidamente el repentino ataque de falta de aire.

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2. Broncodilatadores de acción prolongada

Los broncodilatadores de acción prolongada tienen un efecto prolongado que puede durar hasta 12 a 24 horas, y generalmente se indican para el control o la prevención de crisis de broncoespasmo, pudiendo estar asociados con corticosteroides.

El tipo de broncodilatador debe ser indicado por el neumólogo, y por lo general, las personas con asma utilizan un broncodilatador de acción prolongada para el control y la prevención de crisis, teniendo un inhalador de acción rápida como medicamento de emergencia para las crisis. Conozca los principales medicamentos para el asma.

Cómo funcionan

Los broncodilatadores funcionan relajando los músculos de los pulmones, facilitando la entrada de aire, pero tienen diferentes mecanismos de acción.

Los agonistas beta-2 de los broncodilatadores actúan uniéndose a los receptores beta-2-adrenérgicos en la musculatura bronquial, teniendo un efecto rápido en el alivio de la falta de aire, mientras que los broncodilatadores anticolinérgicos bloquean la acción de la acetilcolina, teniendo un tiempo de acción más prolongado.

Por otro lado, los broncodilatadores derivados de la metilxantina no tienen un mecanismo de acción completamente conocido, sin embargo, parecen tener un efecto antiinflamatorio e inmunomodulador, que llevan al relajamiento de las vías respiratorias de forma prolongada.

Principales broncodilatadores

Algunos ejemplos de broncodilatadores son:

1. Salbutamol

El salbutamol es un broncodilatador beta 2-agonista de acción corta y rápida que tiene efecto después de unos minutos y ejerce su acción durante aproximadamente 4 a 6 horas, relajando los músculos pulmonares y aliviando rápidamente las crisis de falta de aire, principalmente relacionadas con el asma.

Este medicamento puede ser comprado en farmacias con receta médica, con los nombres comerciales Ventolin, Aeroflux o Mucoflux y se utiliza en forma de spray, jarabe, comprimido, gotas o viales. Sepa cómo usar correctamente el salbutamol.

Además de eso, este medicamento también puede ser administrado por vía intravenosa en el hospital para el tratamiento inmediato de crisis de asma o broncoespasmo grave en el caso de bronquitis.

Otros broncodilatadores beta-2 agonistas con acción rápida similar al salbutamol son el fenoterol o la terbutalina.

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2. Formoterol

El fumarato de formoterol es otro broncodilatador beta-2 agonista inhalado de acción más prolongada, que ejerce su efecto aproximadamente de 1 a 3 minutos después de la inhalación y con una duración de hasta 12 horas.

Este medicamento normalmente se indica para el control o prevención de crisis de broncoespasmo en casos de asma o enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC), pudiendo también estar asociado a corticoides inhalados.

El fumarato de formoterol se encuentra en forma de cápsulas para inhalación, y se puede comprar en farmacias con el nombre comercial Foradil o asociado con corticoides con el nombre comercial de Foster y Symbicort.

Otro broncodilatador beta-2 agonista de acción prolongada que puede ser indicado por el médico es el salmeterol.

3. Bromuro de ipratropio

El bromuro de ipratropio también es un broncodilatador anticolinérgico que tiene un efecto rápido, comenzando aproximadamente 3 minutos después de la inhalación y con una duración de hasta 30 minutos.

Este broncodilatador se indica para el tratamiento de los broncoespasmos causados por la enfermedad pulmonar obstructiva crónica (DPOC), bronquitis o asma, o también se usa en asociación con un broncodilatador beta-2 agonista para las crisis agudas de broncoespasmo en casos de asma o DPOC. Conozca cómo utilizar el ipratropio.

El bromuro de ipratropio puede ser comprado en farmacias convencionales como genérico, bajo la designación de "bromuro de ipratropio", o bajo el nombre comercial de Atrovent, Iprasynt, entre otros.

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4. Teofilina

La teofilina es un broncodilatador derivado de la metilxantina indicado para el control y la prevención del broncoespasmo, como tratamiento de mantenimiento del asma o la enfermedad pulmonar obstructiva crónica (DPOC), y no debe usarse para crisis agudas de asma o DPOC.

Este medicamento se administra por vía oral en forma de cápsulas e liberación inmediata y lenta o solución oral, y se puede encontrar en farmacias con el nombre comercial de Drilyna 300, Elixifilin, Eufilina o Teromol Retard.

5. Aminofilina

La aminofilina es otro broncodilatador derivado de la metilxantina que se administra por vía intravenosa en el hospital para tratar la crisis aguda de broncoespasmo causada por el asma, la bronquitis crónica o el enfisema.

Al ser un medicamento inyectable, tiene un efecto inmediato de aproximadamente 6 a 12 horas en adultos no fumadores, 4 a 5 horas en fumadores, 1 a 5 horas en niños y 10 a 45 horas en recién nacidos o prematuros.

Broncodilatador natural

Los broncodilatadores naturales suelen contener plantas medicinales, como la Hedera helix o el guaco, indicados para el tratamiento de los síntomas de enfermedades broncopulmonares inflamatorias, como gripes o resfriados.

Estos medicamentos se encuentran en forma de jarabe y, además de provocar el relajamiento de los músculos pulmonares, tienen un efecto mucolítico, que adelgaza el moco facilitando su eliminación y aliviando la tos con flema. Conozca otros jarabes para la tos con flema.

Cómo tomar

La forma de usar los broncodilatadores varía según su presentación, que incluye:

1. Jarabe broncodilatador

Los jarabes broncodilatadores deben tomarse por vía oral, utilizando el vaso dosificador o la jeringa dosificadora proporcionada en el envase para medir la dosis correcta.

Estos jarabes son principalmente el salbutamol o la acebrofilina, indicados para el tratamiento del broncoespasmo agudo o crónico para aliviar las crisis de asma o bronquitis, por ejemplo.

Estos jarabes solo deben ser utilizados bajo indicación del neumólogo, con dosis individualizadas.

2. Inhalador

El inhalador debe usarse solo para la inhalación por vía oral y normalmente se encuentra en forma de polvo o cápsulas para inhalación.

Estos broncodilatadores suelen tener un dispositivo para conectar el frasco con el polvo del medicamento o la cápsula, y deben usarse según la orientación del neumólogo.

3. Nebulización

La nebulización se realiza con broncodilatadores en forma de gotas para ser agregadas a un aparato de nebulización con un poco de suero fisiológico para ser inhaladas por la boca de forma profunda y lenta en forma de neblina.

Este tipo de tratamiento ayuda a relajar la musculatura de los pulmones y a eliminar secreciones, aliviando la sensación de falta de aire. Sepa paso a paso de cómo hacer la nebulización.

4. Comprimido broncodilatador

El broncodilatador en forma de comprimido debe tomarse por vía oral, con un vaso de agua, en las dosis recomendadas por el neumólogo.

5. Inyección de broncodilatador

El broncodilatador inyectable se utiliza en forma de inyección en la vena en el hospital en situaciones de emergencia de crisis agudas y graves de broncoespasmo.

Estos medicamentos deben ser administrados por el enfermero y en las dosis recomendadas por el médico.

Posibles efectos secundarios

Los efectos secundarios más comunes de los broncodilatadores son temblores, nerviosismo, dolor de cabeza, aumento de la frecuencia cardíaca, palpitaciones, náuseas, sequedad bucal, irritación en la boca y garganta, calambres musculares, enrojecimiento en la piel o picazón.

Estos efectos secundarios varían según el tipo de broncodilatador utilizado, así como su vía de administración.

Contraindicaciones

Los broncodilatadores no deben ser utilizados por personas que sean alérgicas a los ingredientes activos del medicamento, así como a cualquier otro componente de la fórmula.

Además, los broncodilatadores deben usarse con precaución en personas con hipertiroidismo, glaucoma, hipertensión, problemas cardiovasculares, hepáticos o renales, diabetes, epilepsia o problemas de próstata, por ejemplo.

Para niños y bebés, los broncodilatadores solo deben usarse bajo la indicación de un neumólogo pediátrico, ya que no todos están indicados.

Durante el embarazo o la lactancia, el uso de broncodilatadores debe ser supervisado por un médico, ya que algunos broncodilatadores están contraindicados, ya que pueden llegar al bebé o a la leche materna y afectar su desarrollo o causar efectos secundarios.

Los broncodilatadores pueden aumentar el efecto de otros medicamentos o ver su acción reducida por otros medicamentos, por lo que se debe informar al médico sobre todos los medicamentos que se usan con frecuencia, incluyendo vitaminas, tés o productos fitoterapéuticos.