Bicarbonato con limón: ¿es bueno para la salud o es una mezcla peligrosa?

Actualizado en julio 2020
Evidencia científica

Mezclar bicarbonato de sodio con limón se ha vuelto cada vez más popular, especialmente, porque existen relatos de que esta mezcla, puede ayudar en algunas situaciones estéticas, como blanquear los dientes o remover cicatrices dejando la piel más bella.

Además, la mezcla de bicarbonato con limón, también ha ganado mucha popularidad como remedio casero, para aliviar los síntomas de reflujo, especialmente el dolor de estómago y la acidez constante.

No obstante, existen pocos estudios científicos realizados con la mezcla, que pueda comprobar estos beneficios. De este modo, y teniendo por base al limón y al bicarbonato, explicaremos individualmente cuál es el posible efecto de estos ingredientes, para cada uno de los usos más comunes:

1. Blanquear los dientes

Imagem ilustrativa número 1

Varios estudios realizados con el bicarbonato de sodio para la salud bucal, muestran que la sustancia es capaz de eliminar el exceso de bacterias de la boca, reduciendo la placa bacteriana y en consecuencia, dejando los dientes más blancos.

Asimismo, una investigación realizada en el 2017, con cremas dentales que contenían bicarbonato de sodio en su composición, también concluyó, que estas cremas eran capaces de eliminar manchas superficiales de los dientes, debido a la presencia de bicarbonato.

En el caso del limón, un estudio realizado en el 2015, demostró que el limón posee ácidos que son capaces de destruir el esmalte dental, aumentando el riesgo de sensibilidad dental y la aparición de caries.

Conclusión

Aunque no existen estudios que evalúen el efecto de la mezcla de bicarbonato con limón sobre la salud de los dientes, su uso no se aconseja, especialmente debido a los riesgos de aplicar limón sobre los dientes. Lo ideal es consultar a un Odontólogo para realizar un blanqueamiento profesional.

Vea: más sobre las principales opciones de blanqueamiento dental.

2. Aliviar el reflujo y la acidez

Imagem ilustrativa número 2

El bicarbonato debido a su pH alcalino de 9, es una sustancia que ha demostrado ser capaz de aumentar el pH del contenido gástrico, haciéndolo menos ácido. De esta manera, la sustancia puede ayudar a aliviar los síntomas típicos de reflujo, que ocurren cuando el contenido del estómago logra llegar al esófago.

El limón tiene un pH ácido de 2, es un pH más elevado que el contenido gástrico que es de 1,2, y no es suficiente para neutralizar el ácido y aliviar los síntomas. Sin embargo, existen algunos antiácidos de venta en farmacias, que combinan el bicarbonato con el limón produciendo citrato de sodio, una sustancia que evita alteraciones muy bruscas del pH del estómago.

Conclusión

Algunos antiácidos contiene bicarbonato y limón en su composición, pero esta combinación se realiza en un laboratorio con cantidades muy exactas de cada ingrediente. Por ser muy difícil medir correctamente estos ingredientes en la casa, para no agregar una cantidad mayor de limón de lo indicado, se aconseja preferir el uso de un antiácido adquirido en la farmacia, en lugar de mezclar limón con bicarbonato.

Esto, porque si la mezcla contiene mayor cantidad de bicarbonato, podría dejar al estómago con un pH muy alcalino, dificultando la digestión y aumentando la formación de gases. Y en situaciones donde la mezcla tiene una cantidad muy grande de limón el pH podría permanecer ácido, sin aliviar los síntomas.

Conozca algunos remedios caseros comprobados para alivia la acidez.

3. Remover cicatrices

Imagem ilustrativa número 3

El limón es un ingrediente que contiene ácidos naturales como vitamina C, que se usa en la composición de algunas cremas de peeling, para remover la capa superficial de la piel y ayudar a ocultar cicatrices. No obstante, cuando se usa en su forma natural y sin otros ingredientes mezclados en el laboratorio, la vitamina C no logra ser absorbida adecuadamente por la piel y por esto, no produce el adecuado efecto peeling. 

Además, si se utiliza en cantidades excesivas el jugo del limón, puede causar alteraciones del pH de la piel, dejándola más ácida. Cuando esto sucede, la piel tiene tendencia a mancharse o irritarse, además de aumentar la sensibilidad a los rayos UV, incrementando el riesgo de quemadura en la piel.

No existen estudios con el bicarbonato que demuestren su acción benéfica sobre la piel. Sin embargo, al poseer un pH alcalino puede influir en el equilibrio del pH de la piel aumentando el riesgo de resequedad.

Conclusión

Para remover cicatrices de la piel, es importante consultar a un dermatólogo, ya que este médico podrá evaluar el tipo de cicatriz e indicar el mejor tratamiento disponible, que puede, no incluir el uso de un peeling. Sin embargo, aunque el peeling sea indicado, lo ideal es utilizar productos con un pH que no causen agresión a la piel