El ardor en los ojos puede ser un síntoma de alergia o exposición al humo, sin embargo,también puede estar relacionado con situaciones más serias, como conjuntivitis o problemas de visión, que necesitan ser identificadas y tratadas de forma adecuada.
Además del ardor en los ojos, también pueden surgir otros síntomas como ojos hinchados, lagrimeo, comezón, enrojecimiento e irritación en los ojos.
Es importante acudir al oftalmólogo si el ardor de los ojos no pasa o si surgen otros síntomas asociados, de manera que realice una evaluación que permita identificar la posible causa e indicar el tratamiento más adecuado.
Causas de ardor en los ojos
Algunas de las causas comunes de ardor en los ojos son:
1. Exposición al polvo, viento o humo
Una causa muy común de ardor en los ojos es la exposición al polvo, al viento o al humo de una parrilla o de un cigarro, por ejemplo. Estas situaciones causan resequedad en los ojos, ocasionando una sensación de ardor y enrojecimiento. Esto incluso ayuda a limpiar la superficie de cualquier agente irritante que pueda estar causando esta incomodidad.
Qué hacer: colocar de 2 a 3 gotas de suero fisiológico en cada ojo puede ser una buena forma de mejorar la sequedad ocular y tratar el ardor. Lavar el rostro con agua fría también ayuda. Conozca un excelente remedio casero para ardor en los ojos, el cual puede utilizarse en estas situaciones.
2. Problemas de visión
Problemas de visión, como miopía, astigmatismo o presbicia, también pueden originar ardor en los ojos, no obstante, otros síntomas también deben estar presentes, como visión borrosa, dolor de cabeza o dificultad para leer letras pequeñas en el periódico, por ejemplo.
Qué hacer: se aconseja acudir a una consulta oftalmológica para realizar exámenes que puedan confirmar que existen alteraciones en la visión y, de esta forma, realizar el tratamiento, el cual puede llevarse a cabo mediante el uso de colirios o lentes.
3. Síndrome del ojo seco
El síndrome del ojo seco afecta, principalmente, a personas que requieren trabajar muchas horas enfrente de la computadora, lo que genera la disminución de la frecuencia con la que se pestañean los ojos, ocasionando que estos estén más secos de lo normal.
Otra posible causa es el clima seco, puesto que cuando hay poca humedad en el aire, los ojos se tornan más sensibles y surge una sensación de “arena en los ojos” e incluso dificultad para leer durante la noche.
Qué hacer: además de ser importante parpadear más veces mientras se está en la computadora, también puede ayudar colocar gotas de suero fisiológico o algún colirio para hidratar y mantener los ojos más húmedos. Conozca en qué consiste el tratamiento del síndrome de ojo seco.
4. Dengue
En ciertos casos, el dengue puede causar ardor en los ojos, aunque lo más común sea el surgimiento de dolor, principalmente en el fondo de los ojos. En el caso de sospechar de dengue, otros síntomas que deben estar presentes incluyen: dolor en todo el cuerpo, cansancio y falta de energía. Conozca todos los síntomas del dengue.
Qué hacer: si existe una fuerte sospecha de dengue, es importante acudir al médico para confirmar el diagnóstico, además de tomar bastante agua y descansar lo máximo que se pueda para que el cuerpo se recupere rápidamente.
5. Sinusitis
La sinusitis es la inflamación de los senos paranasales, la cual puede causar ardor en los ojos y en la nariz, además de secreciones nasales, dolor de cabeza, estornudos y dificultad para respirar.
Qué hacer: en este caso, es importante consultar un médico general para confirmar el diagnóstico; puesto que, en algunos casos, puede ser necesario tomar antibiótico para combatir la infección y bajar la inflamación. Conozca los medicamentos para tratar la sinusitis.
6. Conjuntivitis alérgica
En la conjuntivitis alérgica, el enrojecimiento y el dolor en los ojos puede estar acompañado de otros síntomas, como hinchazón y sensación de “arena en los ojos”. Esta afección puede estar causada por el polen, pelos de animales o polvo. Generalmente, afecta a personas susceptibles a la alergia, como en caso de rinitis o bronquitis.
Qué hacer: colocar compresas frías en los ojos puede ayudar a disminuir la incomodidad, otro buen consejo es lavarlos regularmente con suero fisiológico para eliminar las secreciones. Conozca los medicamentos indicados para la conjuntivitis.
7. Blefaritis
La blefaritis es la inflamación en el borde de los párpados que provoca el surgimiento de lagañas, costras y otros síntomas como enrojecimiento, comezón, ardor y sensación de tener un objeto extraño en el ojo. Conozca por qué ocurre la blefaritis y qué otros síntomas pueden surgir.
Qué hacer: es importante mantener los ojos limpios con un colirio adecuado, debiendo remover las costras y las lagañas. Además, también es posible colocarse una compresa tibia durante 2 a 3 minutos, alrededor de 3 a 4 veces al día.
8. Fotoqueratitis
La fotoqueratitis es una enfermedad que ocurre debido a la exposición de los ojos a los rayos ultravioleta del sol o de alguna fuente artificial, produciéndose una especie de quemadura en el ojo que ocasiona síntomas como ardor o dolor en el ojo, visión borrosa, lagrimeo, sensación de arenilla en el ojo, sensibilidad a la luz, entre otros.
Este problema puede ocurrir por el reflejo del sol en la arena, el agua, el hielo y la nieve, así como por mirar directamente al sol o a un eclipse solar sin protección adecuada.
Qué hacer: la fotoqueratitis suele desaparecer por si sola, para aliviar el dolor se pueden utilizar compresas frías sobre los ojos y el uso de lagrimas artificiales. Si la molestia persiste es importante acudir al oftalmólogo, pues podrá ser necesario el uso de medicamentos para tratar el problema.
Cuándo acudir al médico
Se debe acudir a un oftalmólogo o médico general siempre que surjan signos y síntomas, como:
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Comezón intensa en los ojos;
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Ardor en los ojos, siendo difícil mantenerlos abiertos;
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Dificultad para divisar objetos o personas a lo lejos;
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Visión borrosa;
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Lagrimeo constante;
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Muchas lagañas en los ojos.
Estos síntomas pueden indicar situaciones más graves como infecciones, las cuales pueden necesitar medicamentos más específicos recetados por un médico.
