Apatia: qué es, síntomas, causas y tratamiento

Actualizado en agosto 2023

La apatía es una condición caracterizada por la disminución de la motivación y el interés general, que incluye síntomas como la falta de energía, pérdida de expresión emocional, tristeza, aislamiento social, falta de interés en las actividades cotidianas o irritación.

La apatía puede ser causada por problemas físicos, neurológicos o psiquiátricos, como desnutrición, depresión, enfermedad de Alzheimer, enfermedad de Parkinson, demencia frontotemporal o esquizofrenia, y puede manifestarse tanto en niños como en adultos.

En presencia de síntomas que puedan indicar apatía, se recomienda consultar a un médico general, pediatra o psiquiatra para identificar la causa de la apatía y determinar el tratamiento más adecuado. Esto podría incluir sesiones de psicoterapia o la prescripción de medicamentos antidepresivos o estimulantes, por ejemplo.

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Principales síntomas 

Los síntomas principales de la apatía son:

  • Falta de motivación;
  • Pérdida o disminución de expresiones emocionales;
  • Desinterés en las relaciones sociales;
  • Falta de energía;
  • Dificultad para iniciar y concluir las actividades cotidianas.

Asimismo, otros síntomas que también pueden estar presentes en la apatía incluyen la falta de interés en actividades que antes eran placenteras y la pérdida de motivación para alcanzar objetivos o realizar cambios en el estilo de vida.

Síntomas de apatia en niños

Los síntomas más comunes de la apatía en niños de hasta cinco años son irritación, tristeza, dificultad para expresar sentimientos o emociones y llanto sin motivo aparente.

En niños de cinco a 12 años, los síntomas de la apatía pueden incluir tristeza, falta de interés en hacer amigos o comunicarse con la familia, aislamiento social y desánimo.

Cómo se realiza el diagnóstico

El diagnóstico de la apatía debe ser realizado por un médico general, pediatra o psiquiatra, a través de la evaluación de los signos y síntomas presentados, así como del estado general de salud de la persona.

Además de eso, el médico también evaluará si la persona cumple con los criterios de diagnóstico según el  Consenso Europeo de Psiquiatría, lo cual implica la presencia de al menos 2 síntomas frecuentes en un período de 1 mes, y si estos síntomas afectan la vida personal, social u ocupacional de la persona, por ejemplo.

Posibles causas 

La apatía puede surgir en alteraciones físicas, neurológicas o psiquiátricas, tales como:

  • Enfermedad de Alzheimer;
  • Enfermedad de Parkinson.
  • Demencia frontotemporal.
  • TDAH (Trastorno por Déficit de Atención con Hiperactividad);
  • Depresión;
  • Esquizofrenia;
  • Traumas;
  • Desnutrición;
  • Meningitis.

Además de eso, la apatía también puede ser un síntoma de enfermedades originadas en el cerebro, como la enfermedad de pequeños vasos cerebrales, degeneración corticobasal, enfermedad de Huntington, accidente cerebrovascular (ACV), traumatismo craneal, tumores o demencia vascular.

Cómo se realiza el tratamiento

El tratamiento de la apatía varía según la causa de esta condición y puede incluir:

  • Psicoterapia, como la terapia cognitivo-conductual o la psicoanálisis, que se recomiendan en casos de depresión, esquizofrenia o traumas;
  • Inhibidores de la colinesterasa, como donepezil, rivastigmina y galantamina, recetados por el médico para mejorar la apatía en personas con Alzheimer;
  • Medicamentos antidepresivos, como sertralina, paroxetina, citalopram, que son recetados por el médico para personas con depresión;
  • Psicoestimulantes, como metilfenidato, pemolina o anfetaminas, que pueden ser recomendados para tratar la apatía en personas con Alzheimer, demencia vascular, enfermedad de Parkinson o demencia frontotemporal;

La musicoterapia, es un método terapéutico que utiliza la música para mejorar el estado de ánimo y aumentar la disposición, también puede ser indicada para tratar la apatía en casos de depresión, Alzheimer, esquizofrenia o enfermedad de Parkinson, por ejemplo. Conozca más sobre la musicoterapia y cómo se realiza.

Además, redescubrir o adoptar hábitos como hacer caminatas en la naturaleza, dormir bien, mantener una alimentación saludable, practicar actividad física regularmente, visitar nuevos restaurantes o pasar tiempo con familiares y amigos, son actividades que también pueden ayudar a combatir la apatía.