El agua de melisa es un extracto elaborado a partir de la planta medicinal Melissa officinalis, conocida también como, limoncillo, menta melisa, hoja de limón o toronjil. Este extracto contiene algunas propiedades medicinales atribuidas a esta planta, como ser relajante, ansiolítica, antiespasmódica y carminativo.
Es una opción práctica y confiable, ya que al consumir el té se encuentra garantizada la concentración de las sustancias activas de la planta. Asimismo, el consumo diario de este extracto puede ser una óptima opción natural, para personas que sufren constantemente de ansiedad leve, así, como para las personas que tienen problemas gastrointestinales como exceso de gases y cólicos.
Aunque la Melissa officinalis, no está contraindicada en bebés, este producto solo debe ser utilizado en niños menores de 12 años bajo la orientación del pediatra e, idealmente, no se debe exceder de 1 mes de uso, ya que contiene alcohol en su composición.
Para qué sirve
El agua de melisa se justifica en el tratamiento de problemas como:
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Síntomas de ansiedad leve;
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Exceso de gases intestinales;
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Cólicos abdominales.
Sin embargo, según varios estudios realizados con la planta, la melisa también parece aliviar los dolores de cabeza, disminuir la tos y prevenir la aparición de trastornos renales. Vea cómo utilizar el té de esta planta para obtener beneficios similares.
El consumo de extractos de Melissa officinalis, generalmente no causa la aparición de ningún tipo de efecto secundario, siendo bien tolerado por el organismo. No obstante, algunas personas pueden presentar aumento del apetito, náuseas, mareos y hasta somnolencia.
Cómo tomar el agua de Melisa
El agua de Melisa debe ser consumida por vía oral, de acuerdo a la siguiente dosis:
- Niños mayores de 12 años: 40 gotas diluidas en agua, dos veces por día;
- Adultos: 60 gotas diluidas en agua, dos veces por día.
En algunas personas, el consumo de este extracto puede causar somnolencia y por esto, en estas situaciones se aconseja evitar conducir vehículos. Además, no se encontraron interacciones con otros medicamentos o alimentos, pudiendo ser utilizado de manera segura.
Contraindicaciones
El agua de Melisa no debe ser consumida por personas con problemas en la tiroides, ya que puede causar inhibición de algunas hormonas. Además, debe ser usado con precaución en personas con presión alta o con glaucoma.
Niños menores de 12 años y mujeres embarazadas, deben evitar el uso de agua de Melisa sin indicación médica o del naturópata.
