Niebla mental: qué es, síntomas, causas y tratamiento

Evidencia científica

La niebla mental, o brain frog en inglés, es un término utilizado para describir dificultades cognitivas como problemas de memoria, falta de concentración o dificultad para organizar ideas, que pueden afectar la vida diaria y la calidad de vida.

Este no es un diagnóstico médico, sino un síntoma que puede aparecer en diferentes enfermedades o situaciones. Actualmente es muy común en el COVID persistente, pero también puede estar asociada a problemas como falta de sueño, estrés, fatiga, desequilibrios hormonales, enfermedades autoinmunes o deficiencias nutricionales.

Es importante acudir al médico general cuando se presentan estos síntomas, ya que la evaluación puede incluir pruebas cognitivas, estudios de laboratorio y valoración de la salud mental para descartar causas reversibles y orientar el tratamiento más adecuado.

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Principales síntomas

Los síntomas más comunes de la niebla mental incluyen:

  • Falta de concentración y dificultad para pensar con claridad;
  • Problemas de memoria;
  • Pensamiento más lento y dificultad para aprender cosas nuevas;
  • Problemas para encontrar palabras;
  • Dificultad en la planificación, organización, toma de decisiones y multitareas.

Con frecuencia, la niebla mental se acompaña de fatiga extrema y sensación de estar abrumado, pudiendo asociarse también con ansiedad o depresión.

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Cómo se realiza el diagnóstico

El diagnóstico de la niebla mental se basa principalmente en una evaluación clínica que lleva a cabo el médico, con el objetivo es identificar la causa que está provocando estos síntomas.

El médico puede realizar una historia clínica detallada, pruebas cognitivas estandarizadas y exámenes de laboratorio para descartar deficiencias nutricionales, alteraciones hormonales o enfermedades metabólicas.

En algunos casos, también se pueden solicitar estudios de imagen cerebral y una evaluación psicológica o psiquiátrica, especialmente cuando se sospechan trastornos neurológicos o de salud mental.

De esta manera, el diagnóstico de la niebla mental se centra en descartar causas reversibles y orientar un tratamiento individualizado, que puede ir desde cambios en el estilo de vida hasta terapias específicas según la enfermedad de base.

Causas de la niebla mental

La niebla mental puede ser causada por diversos factores, como:

  • COVID-19;
  • Estrés;
  • Falta de sueño;
  • Efectos secundarios de algunos medicamentos;
  • Quimioterapia;
  • Consumo de drogas;
  • Deficiencia de vitamina B12;
  • Cambios hormonales, como en el embarazo o la menopausia;
  • Enfermedades como anemia, diabetes, hipotiroidismo, síndrome de fatiga crónica, fibromialgia o enfermedades autoinmunes como el lupus.

También puede aparecer en personas que han permanecido un tiempo prolongado en la unidad de cuidados intensivos o que han sufrido lesiones cerebrales traumáticas.

¿Por qué el COVID-19 ocasiona niebla mental?

En el COVID-19, la niebla mental parece estar relacionada con un estado inflamatorio en el organismo que afecta al cerebro. Esto puede deberse a neuroinflamación, estrés oxidativo, alteraciones en neurotransmisores como serotonina y dopamina, disfunción de la microcirculación cerebral y desregulación del eje hipotálamo-hipófisis-adrenal.

El virus puede dañar la barrera hematoencefálica, facilitando la entrada de células proinflamatorias al sistema nervioso y contribuyendo a la alteración de los procesos cognitivos.

Cómo se realiza el tratamiento

El tratamiento depende de la causa. Cuando se identifica un problema de base, este debe ser tratado, como el uso de hierro en la anemia o la terapia hormonal en el hipotiroidismo. En casos relacionados con enfermedades autoinmunes, el médico puede indicar el uso de corticosteroides u otros inmunomoduladores.

Aunque a veces se recomiendan suplementos como ginkgo biloba, omega-3 o multivitamínicos, su uso debe ser siempre supervisado por un médico, ya que la evidencia científica sobre su eficacia en la niebla mental es limitada y pueden interactuar con otros medicamentos.

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Estrategias para mejorar la niebla mental

Además del tratamiento de la causa, algunas medidas que pueden ayudar son:

  • Reducir el estrés con técnicas como meditación, yoga o actividades recreativas. Vea otras estrategias para disminuir el estrés;
  • Mantener una alimentación equilibrada y saludable;
  • Practicar actividad física de forma regular;
  • Evitar el consumo de alcohol y drogas;
  • Dividir las tareas grandes en pasos más pequeños;
  • Usar calendarios o recordatorios para organizar las actividades diarias;
  • Entrenar la memoria con juegos como crucigramas, sudokus o sopas de letras. Vea algunos ejercicios para fortalecer la memoria;
  • Crear rutinas para mantener los objetos importantes siempre en el mismo lugar;
  • Reducir las distracciones durante actividades que requieren concentración;
  • Dormir al menos 7 a 8 horas por noche.
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En casos persistentes, la rehabilitación cognitiva con apoyo neuropsicológico o programas multidisciplinarios puede mejorar la memoria, la atención y la calidad de vida, especialmente en personas con COVID persistente, fatiga crónica o enfermedades autoinmunes.