Las isoflavonas de soja no engordan, ya que son compuestos naturales con propiedades similares a ciertas hormonas y no hacen subir ni bajar de peso ni aumentar la grasa abdominal.
La mayoría de estudios muestran que su efecto sobre el peso es mínimo, aunque algunos ensayos en mujeres posmenopáusicas registran ligeras reducciones de grasa en la zona del abdomen.
En mujeres posmenopáusicas, ciertos derivados de las isoflavonas pueden ayudar a disminuir la grasa visceral, que se acumula alrededor de los órganos, sin afectar el peso total. Conozca para qué sirven y cómo tomar isoflavonas.
El control del peso depende principalmente de la alimentación y la actividad física, por lo que se recomienda consultar con un nutricionista antes de usar suplementos de soja o realizar modificaciones en la dieta.