El barro biliar, también conocido como lodo o arena en la vesícula, es una mezcla de colesterol y sales de calcio que se acumulan en la vesícula y no logran ser eliminados hacia el intestino, lo que hace que la bilis se vuelva más espesa.
Aunque el lodo biliar no suele causar problemas graves de salud, puede dificultar ligeramente la digestión, provocando una sensación frecuente de mala digestión. Además, su presencia aumenta el riesgo de formar piedras en la vesícula.
En la mayoría de los casos, el lodo o arena biliar puede tratarse únicamente con cambios en la alimentación. La cirugía solo está indicada cuando la vesícula se inflama considerablemente o cuando se producen piedras que generan síntomas intensos.
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Principales síntomas
Los síntomas del barro biliar son:
- Dolor fuerte en el lado derecho del abdomen;
- Náuseas y vómitos;
- Heces con aspecto semejante al barro;
- Pérdida de apetito;
- Gases;
- Distensión abdominal.
Estos síntomas son inusuales porque el lodo biliar, aunque dificulte el vaciado de la vesícula, no impide su funcionamiento, siendo diagnosticado de forma aleatoria durante un ultrasonido abdominal. De esta forma, son raros los casos en que la vesícula se inflama y causa síntomas.
Cuando el lodo no es identificado y tampoco causa síntomas, es muy común que la persona no realice algún tipo de cambio en la dieta, aumentando el riesgo de desarrollar piedras en la vesícula, que aparecen cuando el lodo se endurece a lo largo del tiempo. Vea los principales síntomas de piedras en la vesícula.
¿El lodo biliar es peligroso?
El barro biliar, por sí mismo, generalmente no es considerado peligroso. Sin embargo, su presencia puede aumentar el riesgo de desarrollar piedras en la vesícula (colelitiasis), lo cual sí puede ser problemático.
¿Se puede expulsar el lodo biliar?
El lodo biliar se expulsa de forma natural cuando se resuelve la situación que lo causó, como en el embarazo o una pérdida rápida de peso, por ejemplo.
Sin embargo, en aquellos casos en que el lodo biliar aún permanece incluso después de resolver la causa, no está indicado forzar su expulsión, debido a que no se ha demostrado ningún tratamiento efectivo que logre este objetivo, pudiendo causar síntomas como diarrea y vómito sin conseguir el vaciamiento del lodo biliar.
Por lo que se aconseja seguir una dieta equilibrada y saludable, además de estar atento a los síntomas sugestivos de una litiasis vesicular, para recibir el tratamiento adecuado.
Posibles causas
El lodo biliar surge cuando la bilis se mezcla con el colesterol y las sales de calcio, acumulándose mucho tiempo en la vesícula. Esta situación es muy común en mujeres embarazadas, debido a los elevados niveles de estrógeno que aumentan la concentración de colesterol en la bilis.
Además de esto, el ayuno prolongado, la pérdida rápida de peso y las dietas bajas en calorías también aumentan la concentración de colesterol en la bilis y disminuyen la contracción natural de la vesícula biliar, pudiendo ocasionar la formación de barro biliar.
Algunos factores de riesgo que también pueden contribuir al surgimiento del lodo biliar incluyen la diabetes, el exceso de peso, el uso de medicamentos como la ceftriaxona y octreotida y situaciones hospitalarias, como el uso de nutrición parenteral toral y el transplante de órganos.
Diagnóstico del lodo biliar
El gastroenterólogo es el médico indicado para realizar el diagnóstico, el cual es realizado por medio de un examen físico y evaluación de los síntomas presentados por el paciente.
Asimismo, el médico puede solicitar la realización de exámenes de imagen, como ultrasonido, resonancia magnética o tomografía.
Cómo se realiza el tratamiento
En muchos casos, no es necesario realizar tratamiento, especialmente si no se presentan síntomas. Sin embargo, dado que existe un mayor riesgo de desarrollar piedras en la vesícula, el médico puede recomendar consultar a un nutricionista.
El nutricionista podrá sugerir una alimentación saludable, especialmente para aquellas personas que siguen una dieta con muy pocas calorías, experimentan una pérdida rápida de peso o realizan ayunos prolongados de 5 a 10 días.
Estos cambios dietéticos pueden ayudar a mejorar la contracción de la vesícula, favoreciendo la eliminación del lodo biliar. En los casos de ayuno prolongado debido a nutrición intravenosa, el nutricionista evaluará la posibilidad de iniciar la alimentación por vía oral.
Cuando el barro biliar surge por otros factores y causa síntomas similares a los de los cálculos biliares, como dolor abdominal y gases, el nutricionista recomendará aumentar el consumo de frutas, verduras y cereales integrales (como arroz integral y pan integral) y reducir la ingesta de grasas. Estos cambios pueden aliviar los síntomas asociados al lodo biliar. Vea qué comer cuando se tiene cálculos en la vesícula.
Cuándo es necesaria la cirugía
Normalmente, es necesario realizar cirugía cuando el lodo biliar provoca síntomas intensos o cuando durante un ultrasonido se identifican piedras en la vesícula.
En la mayoría de los casos, la cirugía se realiza sólo como forma de prevención de obstrucción los canales biliares, lo cual causa una inflamación grave de la vesícula, la cual podría poner en riesgo la vida del individuo.
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