Luxación de hombro: qué es, principales síntomas y tratamiento

Actualizado en diciembre 2020

La luxación de hombro, conocido también como hombro dislocado, es una situación dolorosa en que la articulación del hombro se sale de su posición natural, generalmente debido a accidentes o por golpes en deportes como baloncesto o voleibol, o al levantar un objeto pesado de manera incorrecta como en el gimnasio o en el trabajo, por ejemplo.

Este desplazamiento de la articulación puede ocurrir en varias direcciones, hacia enfrente, atrás o abajo, y de forma completa o parcial, causando dolor intenso o dificultad para mover el brazo.

La luxación del hombro debe ser tratada por un ortopedista que indica el tratamiento de acuerdo a la gravedad de la luxación, pudiendo colocar el hombro en su lugar e indicar el uso de medicamentos, sesiones de fisioterapia o la realización de cirugía, en los casos más graves.

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Principales síntomas

Los síntomas de una luxación ocurren al momento de la lesión en hombro e incluyen:

  • Dolor fuerte en el hombro, que puede irradiarse al brazo y afectar el cuello;
  • Un hombro puede estar más alto o más bajo en relación al otro;
  • Incapacidad para realizar movimientos con el brazo afectado;
  • Hinchazón en el hombro;
  • Hematoma o enrojecimiento en el lugar de la lesión.

Además, la luxación del hombro puede causar adormecimiento, debilidad u hormigueo cerca de la lesión, como en el cuello o en el brazo.

En caso de que la persona identifique uno o más síntomas de luxación, es importante consultar a un ortopedista para que se realicen exámenes que ayuden a confirmarla. Durante la consulta, el médico normalmente realiza un examen físico para evaluar la deformidad de la articulación, además de evaluar los signos y síntomas presentes y solicitar una radiografía para evaluar si hay signos y algún daño más grave.

El médico también puede solicitar una electromiografía o resonancia magnética para evaluar tejidos como la propia cápsula articular, tendones y ligamentos.

Causas de la luxación en el hombro

La luxación en el hombro es más común que suceda en personas que practican deportes o que realizan algún tipo de actividad donde hacen más uso de esa articulación.

Así, las principales causas de luxación del hombro son:

  • Deportes de contacto como fútbol americano o baloncesto;
  • Deportes que pueden causar caídas como en gimnasia olímpica o alpinismo;
  • Levantar peso de forma inadecuada en el gimnasio;
  • Trabajar en profesiones que exijan cargar peso o hacer esfuerzo repetido, como los trabajadores de construcción civil, mecánicos o enfermeros, por ejemplo;
  • Accidentes como los automovilísticos;
  • Caídas, como de una escalera o al tropezarse.

Además, la luxación del hombro puede suceder con más facilidad en personas que son altamente flexibles o que tienen articulaciones sueltas.

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Cómo se realiza el tratamiento

El tratamiento de la luxación del hombro debe ser indicado por el ortopedista y puede variar de acuerdo con la gravedad y con los síntomas de dislocación.

Estos tratamientos tienen como objetivo colocar el hueso en su lugar, reducir el dolor, mejorar la fuerza muscular o prevenir nuevas luxaciones. Los métodos utilizados en el tratamiento incluyen:

1. Maniobras para recolocar el hombro en su lugar

El ortopedista puede intentar algunas maniobras específicas y suaves para ayudar a colocar los huesos del hombro en la posición normal. Dependiendo de la intensidad del dolor e hinchazón, puede ser necesario el uso de un relajante muscular, sedante o anestesia general antes de la manipulación de los huesos del hombro. Cuando estos huesos regresan a su lugar, el dolor intenso mejora casi inmediatamente.

Después de las maniobras, el ortopedista debe solicitar radiografías para confirmar que el hombro está en la posición correcta.

2. Inmovilización

La inmovilización del brazo es realizado por el ortopedista después de la maniobra para recolocar el hombro a su lugar, usando una férula o cabestrillo especial en la zona afectada colocando el brazo recargado al pecho para evitar que el hombro se mueva y se recuperen los tejidos involucrados. La inmovilización puede mantenerse por algunos días o hasta 3 semanas dependiendo de la gravedad de la luxación.

Después de retirar la inmovilización puede ser necesario recuperar lo movimientos a través de fisioterapia para fortalecer los músculos y evitar que se repita un episodio similar.

3. Medicamentos

El ortopedista puede indicar el uso de antiinflamatorios como ibuprofeno o diclofenaco, o analgésicos como dipirona o paracetamol, para tratar el dolor y la inflamación causadas por la luxación del hombro.

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4. Cirugía

La cirugía puede ser realizada por el ortopedista en los casos más graves o en aquellos en que la articulación o los ligamentos del hombro son débiles, ya que de esta forma se previenen futuras luxaciones. Además, en jóvenes o atletas que tienen mayor riesgo de lesión en el hombro, puede ser necesaria la cirugía para la reparación de las estructuras del hombro, vasos sanguíneos o nervios.

Este tipo de cirugía se realiza a través de una artroscopia que permite al ortopedista verificar ligamentos, cartílagos y huesos del hombro a través de pequeños cortes en la piel y del uso de una pequeña cámara, llamada artroscopio, teniendo ventajas como menor dolor en el posoperatorio y menor tiempo de recuperación, lo que permite regresar a las actividades diarias más rápido. Conozca cómo se realiza la artroscopia.

Después de la cirugía, es necesario realizar fisioterapia durante algunos meses hasta recuperar totalmente la integridad y dinámica del hombro. Para los atletas que practican actividad física regular, se recomienda no entrenar el brazo y hombro lesionados el primer mes, realizando solo ejercicios de fisioterapia. Los atletas generalmente regresan a competencias después de 5 o 6 meses de la luxación.

5. Fisioterapia

La fisioterapia está indicada después de la inmovilización o cirugía y tiene como objetivo aliviar el dolor, recuperar o mejorar la amplitud de movimientos, la fuerza muscular, cicatrizar las lesiones y estabilizar la articulación del hombro, previniendo nuevas luxaciones. El fisioterapeuta debe evaluar a la persona e indicar el tratamiento fisioterapéutico más adecuado que puede variar de una persona a otra. Las sesiones generalmente comienzan después de 3 semanas de la lesión y pueden durar meses, principalmente si se realiza la cirugía.

Cuidados durante el tratamiento

Durante el tratamiento es importante tener algunos cuidados para evitar nuevas luxaciones y complicaciones, como:

  • No repetir el movimiento específico que causó el desplazamiento del hombro e intentar evitar movimientos dolorosos;
  • No levantar peso hasta que el hombro esté mejor;
  • No practicar deportes que requieran mover el hombro, durante 6 semanas a 3 meses;
  • Aplicar compresas de hielo en el hombro durante 15 a 20 minutos cada 2 horas los primeros dos días para reducir la inflamación y el dolor;
  • Aplicar compresas de agua caliente durante 20 minutos, después de 3 días de la lesión en el hombro, para ayudar a relajar los músculos;
  • Tomar los medicamentos de acuerdo a la orientación médica;
  • Hacer ejercicios suaves de acuerdo a la orientación del médico o del fisioterapeuta para ayudar a mantener la amplitud del movimiento del hombro y no causar rigidez en la articulaciones.

Es importante seguir todas las recomendaciones del ortopedista y del fisioterapeuta para garantizar una recuperación más tranquila, evitar nuevas lesiones y prevenir complicaciones como rotura de ligamentos y tendones del hombro, lesión en los nervios o vasos sanguíneos de la región e inestabilidad del hombro, lo cual puede favorecer nuevas luxaciones.