La Entamoeba histolytica es un protozoario intestinal que causa amebiasis, una enfermedad gastrointestinal que provoca diarrea intensa, dolor y cólicos intestinales, fiebre, escalofríos y heces con sangre, en las infecciones más graves.
La infección por este parásito puede afectar a cualquier persona; sin embargo, es más común en regiones de clima tropical con condiciones sanitarias deficientes, afectando especialmente a bebés y niños que juegan en el suelo y tienen el hábito de llevarse todo a la boca, ya que la principal forma de contagio es a través de la ingestión de agua o alimentos contaminados.
Lea también: Amebiasis intestinal: qué es, síntomas, transmisión y tratamiento tuasaude.com/es/amebiasisAunque es relativamente fácil de tratar, cuando no se diagnostica a tiempo la infección por Entamoeba histolytica puede poner en riesgo la vida, ya que puede causar deshidratación. Por ello, en cuanto aparezcan síntomas sugestivos de la infección, especialmente en niños, es importante acudir a urgencias para confirmar el diagnóstico y comenzar el tratamiento más adecuado.
Principales síntomas
Los principales síntomas de infección por Entamoeba histolytica son:
- Dolor de estómago y cólicos intestinales;
- Diarrea intensa, que puede ocasionar deshidratación si no es tratada adecuadamente;
- Presencia de sangre, moco o secreciones en las heces;
- Fiebre y escalofríos;
- Náuseas;
- Pérdida de peso;
- Cansancio.
Es importante que la infección se identifique de forma temprana, pues la Entamoeba histolytica puede atravesar la pared del intestino y liberar quistes en el torrente sanguíneo, los cuales pueden afectar otros órganos, ocasionando abscesos hepáticos e incluso la necrosis de este órgano.
Síntomas de Entamoeba coli
La Entamoeba histolytica es un parásito que puede encontrarse de forma natural en el intestino; sin embargo, no provoca signos ni síntomas, ni causa enfermedades.
Este parásito puede identificarse mediante un examen de heces, en el que se detecta la presencia de quistes de E. coli.
Cómo confirmar el diagnóstico
El diagnóstico de la infección por Entamoeba histolytica puede realizarse a partir de la observación y el análisis de los síntomas que presenta la persona. Para confirmar la sospecha, el médico puede solicitar un estudio parasitológico de heces, en el que se recolectan tres muestras en días diferentes, ya que el parásito no siempre está presente en todas las evacuaciones.
Además, el médico puede indicar otras pruebas, como la detección de sangre oculta en heces, así como análisis de laboratorio complementarios que ayuden a confirmar si la infección está activa.Vea cómo se realiza la prueba de sangre oculta en las heces.
En los casos en que se sospecha que la infección se ha diseminado a otras partes del cuerpo, pueden realizarse estudios de imagen, como una ecografía o una tomografía computarizada, para evaluar si existen lesiones en otros órganos.
Ciclo de vida de la Entamoeba histolytica
El ciclo de vida de Entamoeba histolytica explicado de manera más sencilla:
- Infección: las personas se infectan cuando ingieren quistes maduros de Entamoeba histolytica, que pueden estar en alimentos, agua o en manos contaminadas con heces. También es posible infectarse a través del contacto sexual con materia fecal contaminada.
- Dentro del cuerpo: una vez que los quistes llegan al intestino delgado, se "abren" (excistación) y liberan trofozoítos, que son las formas activas del parásito. Los trofozoítos luego migran al intestino grueso.
- Infección leve: en algunos casos, los trofozoítos se quedan en el intestino sin causar daños graves. Las personas infectadas pueden no tener síntomas pero seguir eliminando quistes en sus heces, lo que permite que el ciclo continúe.
- Infección grave: en otros casos, los trofozoítos invaden la pared del intestino, causando diarrea y otros problemas intestinales (enfermedad intestinal). En situaciones más graves, los trofozoítos pueden entrar en la sangre y viajar a otros órganos, como el hígado, el cerebro o los pulmones (enfermedad extraintestinal).
- Reproducción y eliminación: los trofozoítos se multiplican dentro del cuerpo y algunos de ellos se convierten en quistes, que son eliminados en las heces junto con los trofozoítos.
- Sobrevivencia fuera del cuerpo: los quistes pueden sobrevivir fuera del cuerpo durante días o semanas, siendo infecciosos si otras personas entran en contacto con ellos. En cambio, los trofozoítos mueren rápidamente cuando están fuera del cuerpo y no sobreviven si son ingeridos.
Este ciclo se repite si los quistes son ingeridos por otra persona.
Cómo ocurre la infección
La infección por Entamoeba histolytica ocurre por medio de la ingesta de quistes presentes en el agua o comidas contaminadas con heces.
Cuando los quistes de la Entamoeba histolytica entran en el cuerpo, se alojan en las paredes del tracto digestivo y liberan formas activas del parásito, los cuales acaban reproduciéndose y migrando al intestino grueso, donde más tarde pueden atravesar la pared del intestino y diseminarse por todo el cuerpo.
La persona infectada por Entamoeba histolytica puede contagiar a otras personas en caso de que sus heces contaminen el suelo o el agua utilizada para beber, lavar los platos o bañarse. De esta forma, es muy importante evitar algún tipo de agua que pueda estar contaminada con aguas residuales.
Cómo es el tratamiento
El tratamiento para la amebiasis intestinal no complicada debe ser indicado por el gastroenterólogo, este incluye:
1. Medicamentos
Para tratar la infección por la Entamoeba histolytica, suele ser indicado metronidazol, en una dosis entre 500 a 750 mg por vía oral, 3 veces al día durante 7 a 10 días en adultos. En el caso de los niños, la dosis debe ser indicada por el pediatra, siendo generalmente de 35 mg/kg a 50 mg/kg de peso, dividido en 3 dosis al día.
Como alternativa al metronidazol, el médico puede indicar otros antiparasitários como tinidazol, ornidazol o nitazoxanida para erradicar los quistes. Asimismo, pueden ser indicados otros medicamentos, como la paromomicina, diyodohidroxiquina o furoato de diloxanida.
En algunas ocasiones, también puede recomendarse el uso de algunos medicamentos que ayuden a aliviar los síntomas presentados, como domperidona o metoclopramida.
2. Hidratación
Además de la medicación, es importante mantener una adecuada hidratación oral para prevenir la deshidratación. Para esto se recomienda la ingestión de sales de rehidratación oral, que pueden ser compradas en las farmacias; suero casero, que es preparado en casa con sal y azúcar, y bebidas como agua, agua de coco, sopas y jugos, por ejemplo.
3. Alimentación
La alimentación durante el tratamiento de la infección por Entamoeba histolytica debe ser de fácil digestión, con el objetivo de no empeorar la diarrea ni irritar el intestino.
Se recomienda seguir una dieta baja en fibra y grasa, que incluya alimentos como frutas cocidas, sin cáscara ni semillas; vegetales cocidos o al vapor, también sin cáscara; carnes magras y otras fuentes de proteína bajas en grasa; lácteos como yogur natural y quesos blancos bajos en grasa; así como sopas de vegetales licuadas.
Lea también: Qué comer cuando tienes diarrea tuasaude.com/es/que-comer-con-diarrea4. Otros tratamientos
En los casos más graves, en los que la amebiasis se disemina a otras partes del cuerpo, además del tratamiento con metronidazol, también se debe intentar resolver las lesiones causadas a los órganos.
En los casos donde hay perforación intestinal o megacolon tóxico, puede ser necesaria una intervención quirúrgica.
Cuando se produce infecciones pleuropulmonares deben tratarse mediante aspiración del derrame pleural amebiano.
Cómo prevenir la infección por Entamoeba histolytica
Para protegerse de la infección por Entamoeba histolytica, se debe evitar el contacto con aguas residuales, aguas contaminadas o no tratadas, como el agua de las inundaciones, lodo o ríos, y tampoco se aconseja el uso de piscinas no tratadas con cloro.
Asimismo, si las condiciones de saneamiento en la ciudad donde se vive no son las mejores, se debe hervir el agua antes de utilizarla para lavar alimentos o para beber.
Otra opción es desinfectar y purificar el agua en casa, lo que puede llevarse a cabo recurriendo a la utilización de hipoclorito de sodio. Conozca cómo usar el hipoclorito de sodio para purificar el agua.