El dolor en la cara puede ser causado por un simple golpe o por infecciones provocadas por una sinusitis o un absceso dental, por ejemplo. Asimismo, otras situaciones como dolores de cabeza, una disfunción en la articulación temporomandibular (ATM) o incluso la neuralgia del trigémino, también pueden provocar dolor en el rostro.
Generalmente, la localización donde aparece el dolor en el rostro y la presencia de síntomas asociados, como un clic en la mandíbula, dolor dental, alteración de la visión, dolor de oído o secreción nasal, por ejemplo, son factores que pueden sugerir al médico qué está ocasionando el dolor, facilitando el diagnóstico.
Es importante consultar a su médico de cabecera siempre que aparezca dolor facial, especialmente cuando es intenso, constante, aparece y desaparece con frecuencia, o se acompaña de otros síntomas, para poder diagnosticar la causa e indicar el tratamiento más adecuado.
8 causas de dolor en la cara
Las principales causas del dolor en la cara son:
1. Neuralgia del trigémino
La neuralgia del trigémino es una disfunción que causa dolores intensos en la cara, los cuales surgen de forma abrupta, a manera de choque eléctrico o puntada, provocado por daños a un nervio llamado trigémino, que posee ramas responsables por ayudar en la masticación y dar sensibilidad al rostro.
Qué hacer: el tratamiento es indicado por el neurólogo, generalmente, con medicamentos antiepilépticos, que actúan controlando los episodios de dolor en el nervio. En los casos en que no hay mejoría con el tratamiento con medicamentos puede indicarse una cirugía. Conozca todos los síntomas que ocasiona la neuralgia del trigémino y cómo tratar.
2. Dolor de cabeza
El dolor de cabeza también puede provocar sensibilidad en la cara, pudiendo aparecer en casos de jaqueca, donde existen disfunciones del sistema nervioso, o de cefalea tensional, donde existe aumento en la sensibilidad de los músculos de la cabeza y cuello, causada por la tensión.
El dolor en la cara también es característico de un tipo específico de dolor de cabeza, llamado cefalea en racimos, la cual se caracteriza por un dolor muy intenso en uno de los lados del cráneo y de la cara, acompañado por enrojecimiento o hinchazón de un ojo, lagrimeo y goteo nasal.
La cefalea en racimos habitualmente surge en crisis que pueden ocurrir en ciertas épocas del año o que van y vuelven periódicamente, sin embargo, pese a que se sepa que hay relación con el sistema nervioso, las causas exactas de su aparición aún no se han aclarado totalmente.
Qué hacer: el tratamiento del dolor de cabeza es indicado por el neurólogo e incluye medicamentos como los analgésicos. En el caso de la cefalea en racimos, también se indica inhalación de oxígeno o de un medicamento llamado Sumatriptán para controlar las crisis.
3. Sinusitis
La sinusitis o rinosinusitis es la infección de los senos de la cara, que son cavidades llenas de aire entre los huesos del cráneo y del rostro, los cuales se comunican con las fosas nasales.
Generalmente, la infección es provocada por virus o bacterias, y puede afectar sólo uno o los dos lados de la cara. El dolor habitualmente es como una sensación de pesadez, el cual empeora al inclinar el rostro hacia adelante y puede estar acompañado de otros síntomas como dolor de cabeza, goteo nasal, tos, mal aliento, pérdida del olfato y fiebre.
Qué hacer: la infección dura algunos días, y algunas de las orientaciones del médico son: lavados nasales, analgésicos, reposo e hidratación. En caso de sospecha de infección bacteriana, el medico debe indicar el uso de antibióticos. Conozca más detalles sobre los síntomas y tratamiento de la sinusitis.
Vea en el video a continuación cómo realizar un lavado nasal para aliviar la congestión nasal:
4. Problemas dentales
Inflamación en algún diente, periodontitis, un diente partido, una caries profunda que compromete el nervio del diente e incluso un absceso dental, pueden provocar dolor que puede irradiarse también para la cara. Conozca cómo se realiza el tratamiento para quitar las caries.
Qué hacer: en estos casos, el tratamiento es indicado por el dentista, mediante tratamientos como limpiezas, tratamientos de conducto y uso de analgésicos e antiinflamatorios, por ejemplo.
5. Disfunción temporomandibular
También conocida por las siglas DTM o dolor en la ATM, este síndrome ocurre por un disturbio en la articulación que une la mandíbula al cráneo, provocando signos y síntomas como dolor al masticar, dolor de cabeza, dolor en la cara, dificultad en abrir la boca y clics en la mandíbula, por ejemplo.
Problemas que impiden el funcionamiento correcto de esta articulación pueden causar la DTM, y unas de las causas más comunes son el bruxismo, haber sufrido algún golpe en la región, alteraciones en los dientes o en la mordida y el hábito de morderse las uñas, por ejemplo.
Qué hacer: el tratamiento es indicado por el cirujano bucomaxilofacial y, además de analgésicos y relajantes musculares, también es indicado el uso de férulas para dormir, aparatos ortodóncicos, fisioterapia, técnicas de relajación o, en última instancia, cirugía. Conozca todas las opciones de tratamiento para esta disfunción.
6. Arteritis temporal
La arteritis temporal es una vasculitis, la cual es una enfermedad que provoca inflamación de los vasos sanguíneos por causas autoinmunes, y que afecta principalmente personas mayores de 50 años de edad.
Los síntomas pueden incluir dolor de cabeza, sensibilidad en la región por donde pasa la arteria temporal, que puede ser del lado derecho o izquierdo del cráneo, dolor y rigidez de los músculos del cuerpo, debilidad y espasmos de los músculos de la masticación, falta de apetito, fiebre y, en los casos más graves, problemas oculares y pérdida de la visión.
Qué hacer: después de la sospecha de la enfermedad, el reumatólogo indicará el tratamiento hecho especialmente con corticoides, como la Prednisona, la cual puede disminuir la inflamación, aliviar los síntomas y controlar bien la enfermedad. La confirmación de la arteritis temporal es realizada mediante la evaluación clínica, análisis de sangre y biopsia de la arteria temporal. Vea cómo se realiza el tratamiento de la arteritis temporal.
7. Alteraciones en los ojos u oídos
Una inflamación en el oído, provocada por una otitis, una herida o un absceso, por ejemplo, puede causar dolor que se irradia para la cara, tornándose más sensibles.
Por otra parte, la inflamación en los ojos, sobretodo cuando es intensa, como la provocada por una celulitis orbitaria, una blefaritis, herpes ocular o incluso por un golpe, también puede provocar dolor en los ojos y en la cara.
Qué hacer: es necesaria la evaluación del oftalmólogo, en caso de que el dolor inicie en uno o ambos ojos, y también del otorrinolaringólogo, en caso de que el dolor inicie en el oído o se acompañe de mareos o zumbidos.
8. Dolor facial idiopático persistente
También llamado dolor facial atípico, es una condición rara que provoca dolor en la cara, pero que aún no tiene una causa clara específica, y se cree que está relacionada con alteraciones en la sensibilidad de los nervios de la cara.
El dolor puede ser de moderado a intenso, y habitualmente surge en uno de los lados del rostros, pudiendo ser continuo o ir y venir. Puede empeorar debido al estrés, cansancio o estar asociado con otras enfermedades, como el síndrome de intestino irritable, dolor lumbar, dolor de cabeza, ansiedad y depresión.
Qué hacer: no existe un tratamiento específico. Puede realizarse con la combinación de antidepresivos y psicoterapia, indicados por el médico después de la evaluación y descarte de otras causas.
