En dieta para la pancreatitis es recomendado estar en ayuno los primeros días, para ayudar a controlar los síntomas de esta enfermedad. Luego de que disminuyan los síntomas de náuseas y vómitos, se debe realizar una dieta líquida, que incluya sopas, saldos de verduras y carnes, jugos de frutas y agua de coco.

En el caso de pancreatitis crónica, es recomendado una alimentación baja en grasas, evitar el consumo de bebidas alcohólicas y de alimentos industrializados, previniendo así, nuevas crisis de pancreatitis.

Una dieta adecuada es fundamental para tratar la pancreatitis, porque ayuda a aliviar los síntomas, además de evitar la deficiencia de nutrientes y la pérdida de peso. Sin embargo, como la dieta puede variar conforme al tipo de pancreatitis y tolerancia de la persona, es recomendado siempre consultar a un nutricionista antes de iniciar la dieta.

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Dieta para pancreatitis aguda

La dieta para la pancreatitis aguda debe ser realizada en el hospital y consiste en estar en ayunas hasta 2 días y hasta que los síntomas se encuentren controlados. En los casos más graves, la alimentación puede ser realizada por sonda.

Después de la crisis de pancreatitis aguda, el nutricionista indica una dieta líquida, incluido sopas, caldos de verduras y carnes licuados y con pocas grasas, jugos de frutas colados y agua de coco. Vea en qué consiste una dieta líquida.

Una vez tolerados los líquidos claros, se irá progresando la dieta a una consistencia blanda y luego sólida con alimentos de fácil digestión y bajos en grasas, como carnes magras, pescados y pollo sin piel. Las verduras y las frutas deben ser cocidas para facilitar la digestión.

Alimentos permitidos

Después de la crisis de pancreatitis, se deben preferir los siguientes alimentos:

  • Lácteos bajos en grasas, como leche y yogur descremados y quesos blancos, como la ricotta;

  • Cereales de fácil digestión, como arroz, fideos blancos y pan blanco;

  • Proteínas bajas en grasas, como huevos, pavo, pescado y pollo sin piel;

  • Legumbres cocidas, como calabaza, chayote, zanahoria, betabel y calabacín;

  • Frutas cocidas, sin cáscara y semillas.

Esta dieta dura cerca de 1 a 2 semanas después de la crisis de pancreatitis, de acuerdo con la tolerancia y evolución de cada persona.

Alimentos prohibidos

Para evitar nuevas crisis de pancreatitis, se deben evitar los siguientes alimentos:

  • Alimentos que estimulan el intestino, como café, mate, menta y pimienta;

  • Alimentos ricos en grasas, como carnes rojas, manteca, quesos amarillos, galletas, helados y bollerías;

  • Carnes procesadas, como salchicha, chorizo, tocino, jamón o mortadela;

  • Alimentos listos congelados, como hamburguesas, lasaña, pizza y fast food en general;

  • Alimentos ricos en azúcar, como tortas, helados, budines, dulces y golosinas.

Asimismo, también se encuentra prohibido el consumo de bebidas alcohólicas, como vinos y cervezas.

Dieta para pancreatitis crónica

En la pancreatitis crónica, el tratamiento nutricional tiene como objetivo prevenir la pérdida de peso, estimular el apetito; disminuir los síntomas como dolor, náuseas, vómitos y diarreas.

Alimentos permitidos

Durante la pancreatitis crónica se deben priorizar los siguientes alimentos:

  • Lácteos bajos en grasas, como leche descremada, yogur descremado y quesos magros, como cottage y ricota;

  • Cereales, como arroz, fideos y pan;

  • Proteínas bajas en grasas, como huevo, pescado y pollo sin piel;

  • Vegetales, como tomate, brócoli, calabaza, chayote, zanahoria o calabacín;

  • Frutas, como manzana, pera, piña, guayaba, mango, plátano y sandía;

  • Hierbas y especias, como pimienta, canela, cilantro, perejil o cebollino;

  • Bebidas, como agua, tés y agua de coco.

Como la pancreatitis puede provocar mala absorción de nutrientes, el médico o nutricionista también puede indicar el uso de suplementos de vitaminas y minerales.

Alimentos que se deben evitar

Los alimentos que se deben evitar durante la pancreatitis crónica son:

  • Alimentos ricos en grasas, como carnes rojas, leche entera, quesos duros o semiduros, manteca, yogur entero, galletas, helados y bollerías;

  • Embutidos, como salchichas, chorizo, tocino, jamón o mortadela;

  • Alimentos industrializados, como hamburguesas, pizza, lasaña y otras comidas fast food;

  • Alimentos ricos en azúcar, como chocolate, helados, tortas y dulces;

  • Salsas y aderezos, como mostaza, ketchup, mayonesa y saborizantes o sopas concentradas en cubitos;

  • Bebidas alcohólicas, como cerveza, whisky o vino.

Es fundamental también evitar comidas abundantes, y copiosas, realizar comidas en pequeña cantidad y varias veces al día, preferentemente 5 a 6 comidas a lo largo del día.

Es importante que el individuo con pancreatitis crónica acuda a un nutricionista, para que sea elaborado un plan nutricional de acuerdo a sus necesidades y evitar la pérdida de peso y mejorar la absorción de los nutrientes, evitando que el individuo alcance un estado de desnutrición.

La tabla a continuación muestra un menú ejemplo de 3 días de una dieta para pancreatitis:

Comida Día 1 Día 2 Día 3
Desayuno 240 ml de Jugo de manzana (licuado y colado) + 2 tostadas blancas + 1 huevo cocido 1 vaso de atol de avena: 200 ml de leche descremada + 2 cucharadas de avena 1 vaso de leche descremada + 2 rebanadas de pan blanco con queso ricotta o cottage
Merienda de la mañana 1/2 manzana cocida con un poco de canela 1 pera cocida 1 banana triturada
Almuerzo/Cena Caldo de calabaza, calabacín, ñame y zanahoria, con pechuga de pollo en cubitos Una pechuga de pavo desmenuzada + 1/2 taza de arroz + 1 taza de calabacín, berenjenas y zanahoria cocidas Un filete de merluza desmenuzado + 1/2 taza de puré de papas + 1 taza de zanahoria y judías verdes cocidas
Merienda de la tarde Una taza de té de manzanilla + gachas de avena con leche vegetal y manzana rallada 1 yogur natural descremado + quinoa y guayaba cortada en cubitos 1 yogur descremado con fresas + 1 cucharada de avena

Es importante la orientación por un nutricionista para la evaluación del individuo y la elaboración de un plan nutricional acorde a sus necesidades, de manera que se eviten deficiencias nutricionales que puedan causar malnutrición y otras complicaciones. Vea más sobre el tratamiento de la pancreatitis.