Clorpromazina: para qué sirve, dosis y efectos secundarios

Actualizado en mayo 2023

La clorpromazina es un antipsicótico indicado en el tratamiento de la esquizofrenia, algunos tipos de trastorno bipolar, agitación intensa, ansiedad, hipo persistente, náuseas y vómitos. 

Este medicamento puede causar efectos secundarios como ganancia de peso, somnolencia, inquietud, dificultad para controlar los movimientos del cuerpo y reacciones alérgicas graves, por lo que debe ser empleado solo bajo la orientación médica. 

La clorpromazina puede ser adquirida en farmacias convencionales en su forma genérica o bajo el nombre comercial de Largactil, y es vendida mediante presentación de la prescripción médica y retención de la misma por parte de la farmacia. 

Imagem ilustrativa número 1

Para qué sirve

La clorpromazina está indicada para tratar las siguientes condiciones:

  • Cuadros psiquiátricos agudos, como brote psicótico o episodios de manía, en caso de trastorno bipolar;
  • Psicosis de larga evolución debido a esquizofrenia, por ejemplo;
  • Agitación intensa;
  • Ansiedad;
  • Hipo persistente;
  • Náuseas y vómitos;
  • Dolor durante el trabajo de parto;
  • Eclampsia;
  • Tétanos, como medicamento complementario. 

En ciertas ocasiones, el médico también puede indicar la clorpromazina para complementar el tratamiento en caso de síndrome serotoninérgico y para aliviar los síntomas de migraña como náuseas y vómitos. Conozca los principales medicamentos para la migraña

¿La clorpromazina sirve para dormir?

La clorpromazina no es un medicamento para dormir; sin embargo, el sueño es considerado un efecto secundario común durante el tratamiento, en especial en las primeras horas luego de tomado el medicamento. Vea algunas opciones de medicamentos para dormir

En qué dosis tomar

Se recomienda tomar los comprimidos de clorpromazina junto con líquidos, por vía oral. Asimismo, no se deben partir ni masticar los comprimidos. 

Por esta razón, en niños pequeños o con dificultad para tomar comprimidos, la clorpromazina en gotas puede ser de ayuda, debiendo ser empleada bajo las indicaciones del médico.

1. Clorhidrato de clorpromazina de 25 mg

El clorhidrato de clorpromazina de 25 mg en comprimidos puede ser utilizado de la siguiente forma:

  • Niños mayores de 2 años de edad: la dosis inicial de clorpromazina es de 1 mg/kg de peso corporal al día, dividida en 2 o 3 tomas, siendo la dosis máxima de 40 mg al día (lo que equivale a aproximadamente 1,5 comprimidos de 25 mg), en niños menores de 5 años, y 75 mg (o 3 comprimidos de 25 mg), en niños mayores. 
  • Adultos: la dosis inicial varía de 1 a 4 comprimidos de 25 mg, pudiendo ser repetida hasta 3 o 4 veces al día, si se considera necesario. El aumento de la dosis es realizado por el médico según el control de los síntomas, siendo la dosis máxima de 2 g al día (equivalente a 80 comprimidos diarios de clorpromazina de 25 mg);
  • Adultos con edad igual o superior a 65 años: la dosis inicial de clorpromazina debe ser aproximadamente la mitad de la dosis para adultos, y los aumentos deben ser realizados gradualmente, de acuerdo con las indicaciones del médico. 

La clorpromazina puede ser indicada en niños a partir de los 2 años de edad, adolescentes o adultos, y las dosis recomendadas varían de acuerdo con la edad y la gravedad de los síntomas, siendo importante seguir correctamente las indicaciones del médico. 

2. Clorhidrato de clorpromazina de 100 mg

El clorhidrato de clorpromazina de 100 mg en comprimidos puede ser empleado de la siguiente forma:

  • Adultos: la dosis inicial recomendada de clorpromazina de 100 mg es de hasta 1 comprimido entero, pudiendo ser repetida hasta 3 o 4 veces al día, de ser necesario. El aumento de la dosis debe ser gradual, realizado por el médico de acuerdo con el control de los síntomas, y la dosis máxima es de 2 g al día (lo que equivale a 20 comprimidos diarios de clorpromazina de 100 mg). 
  • Adultos con edad igual o superior a 65 años: la dosis inicial de clorpromazina debe ser aproximadamente la mitad de la dosis para adultos, y los aumentos deben ser llevados a cabo lentamente, de acuerdo con la orientación del médico.

Con respecto a los niños, la clorpromazina de 100 mg está menos indicada, pues las dosis normalmente son menores y no es recomendado partir los comprimidos. En este caso, es común que el médico indique la clorpromazina de 25 mg o en gotas.

Posibles efectos secundarios

Los efectos secundarios más comunes de la clorpromazina incluyen:

  • Ganancia de peso;
  • Somnolencia;
  • Inquietud;
  • Boca seca;
  • Mareos;
  • Estreñimiento;
  • Retención de orina. 

Aunque sea raro, también puede surgir dificultad para controlar los movimientos del cuerpo y otros efectos secundarios más graves, como muerte súbita, arritmias y reacciones alérgicas durante el tratamiento. 

Asimismo, este medicamento también puede ocasionar elevación de los niveles de prolactina en la sangre, lo que provoca el surgimiento de síntomas como disminución de la libido y expulsión de leche por las mamas. Conozca más síntomas de la prolactina alta

Contraindicaciones

La clorpromazina no está indicada en casos de antecedentes de reacciones alérgicas graves, glaucoma de ángulo cerrado ni en personas con riesgo de retención urinaria debido al aumento de tamaño de la próstata, por ejemplo, o que hagan uso de medicamentos como levodopa o escitalopram. 

Además, no debe ser empleada por personas con problemas cardíacos o depresión grave ni por aquellas con antecedentes de reacciones alérgicas a medicamentos con fenotiazinas, como la prometazina, por ejemplo. 

Este medicamento tampoco se recomienda en niños menores de 1 año de edad, y solo debe ser empleado bajo las indicaciones médica en mujeres embarazadas o en período de lactancia y en adultos mayores.