Bebé de 8 meses: peso, alimentación y desarrollo

Actualizado en septiembre 2022
Evidencia científica

El bebé de 8 meses ya tiene más fuerza y energía, además de estar más atento y curioso, pues está volviéndose más consciente del ambiente que lo rodea y comienza a entender lo que ocurre a su alrededor, a sentir falta de la madre y a extrañar personas que no son familiares.

En esta fase, el bebé disfruta de jugar, por lo que debe ser estimulado con actividades que ayuden a su desarrollo, como jugar a las escondidas o juguetes de encaje, por ejemplo. Asimismo, como el bebé ya logra percibir sonidos, se le debe estimular la audición y el habla leyendo, cantando y conversando con él, pues ya logra entender su nombre y la palabra "no".

A los 8 meses, aparte de la lactancia materna y/o el uso de fórmulas, la alimentación del bebé debe ser lo más natural posible, pues hasta los 2 años es la fase de desarrollo del sentido del gusto, que va a reflejarse en sus preferencias en la vida adulta, por lo que se deben introducir los alimentos de forma separada para probar sabores y texturas distintas.

Es importante recordar que cada bebé es único y tiene su propio ritmo de crecimiento y características. Por ello, si se tiene alguna duda sobre el desarrollo del bebé, se recomienda consultar al pediatra.

Imagem ilustrativa número 2

Peso del bebé a los 8 meses

La siguiente tabla indica el intervalo de peso ideal del bebé de esta edad, así como otros parámetros importantes como altura, tamaño de la cabeza y ganancia de peso mensual esperado, de acuerdo con la Organización Mundial de la Salud:

  Niño Niña
Peso

6,9 a 10,7 kg

6,2 a 10,1 kg

Altura

66 a 75 cm

64 a 73,4 cm

Tamaño de la cabeza

43,3 a 45,8 cm

42 a 44,7 cm

Aumento de peso mensual

450 g

450 g

En caso de que el bebé presente valores por encima o por debajo de estos intervalos, es importante consultar al pediatra para evaluar su desarrollo. 

Alimentación del bebé de 8 meses

A partir de los 6 meses, aparte de la leche materna y/o las fórmulas que podrían mantenerse hasta los 2 años de edad, se recomienda que se introduzcan otros alimentos en las comidas del bebé. De acuerdo con las recomendaciones de la OMS, se le debe dar 3 comidas al día a aquellos bebés que aún estén siendo amamantados y 5 comidas al día a bebés que no reciban leche materna. 

La alimentación del bebé de 8 meses debe ser lo más natural posible, incluyendo papillas saladas o de frutas, sopas y proteínas como carne o pollo, siempre que no sean pedazos grandes que puedan causar atragantamiento en el bebé, además de alimentos de fácil digestión, como arroz, papa o pasta. Vea más sobre la alimentación del bebé de 0 a 12 meses

Para estimular el desarrollo del sentido del gusto del bebé, se le puede dar cada alimento por separado, preparados de distinta forma y con texturas diferentes. Asimismo, en caso de que el bebé posea alguna alergia, de esta manera es posible identificar el tipo de alimento que la causó. 

En esta etapa, ya se le puede dar al bebé alimentos como cacahuate, huevo, pescado o mariscos, siendo incluso recomendados como forma de evitar el desarrollo de alergias en el futuro. 

Sin embargo, ciertos alimentos deben evitarse, como gelatina sin sabor, dulces o galletas rellenas, pues no poseen valor nutricional, pueden perjudicar la salud y aumentar el riesgo de obesidad y diabetes, además de dañar los dientes del bebé. 

Vea qué hace un bebé de 9 meses y algunas recetas de papillas para bebés de 8 meses.

Desarrollo del bebé de 8 meses

El bebé de 8 meses ya tiene más fuerza y energía que le permiten sentarse por sí mismo y sostenerse de una silla o sofá para intentar levantarse solo. En esta etapa, es importante mantener alejados objetos que puedan lesionar o causar daños al bebé, como cables de energía, lámparas, vasos de vidrio, remedios o insecticidas, por ejemplo. De esta manera, esto permite que la casa esté preparada y segura para que el bebé se mueva cuando comience a gatear, lo que puede ocurrir a partir de los 8 meses. Sin embargo, algunos bebés toman más tiempo para hacerlo o para intentar levantarse por sí mismos, y algunos pasan directamente de voltearse a caminar, esto varía mucho de un bebé a otro. 

En esta fase, las habilidades de lenguaje y comunicación continúan desarrollándose, y el bebé puede comenzar a emitir sonidos como "da-da" y "pa-pa". Además, el bebé también comienza a comprender mejor las palabras que los papás dicen, razón por la cual es importante conversar con él y leerle cuentos, colocarle música o cantar para estimular su audición y así introducir nuevos sonidos, sílabas y palabras simples, incentivando a que repita lo que oye. En este período, el bebé también comienza a entender la palabra no y a responder a su nombre. 

A los 8 meses, al bebé no le gusta quedarse quieto y ya es capaz de manipular juguetes con relativa facilidad, transfiriendo objetos de una mano a la otra, golpeando bloques unos con los otros, arrojando pelotas o encajando una serie de vasos de distintos tamaños unos en los otros. Asimismo, en esta etapa es importante mirar al bebé a los ojos mientras se juega con él y se le habla, pues esto estimula su desarrollo mental y social. 

Al bebé de 8 meses no le gusta quedarse solo y puede ponerse ansioso o triste cuando se da cuenta que la madre va a salir o que él no irá con ella. Para ayudar a reducir la ansiedad de la separación, se le puede dar al bebé un objeto para que se sienta más seguro, tranquilo y cómodo, como una manta o un juguete que le guste. 

Asimismo, en esta fase el bebé ya reconoce rostros que son familiares y puede sentirse asustado, inquieto, ansioso, inseguro o lloroso ante la presencia de personas extrañas. 

Vea en el video a continuación cómo estimular al bebé:

Sueño del bebé de 8 meses

El sueño del bebé de 8 meses es más tranquilo y él ya logra dormir de 12 a 14 horas por día, directamente o divididas en dos períodos, y también puede tomar siestas de 20 a 30 minutos durante el día. 

Juegos y actividades para el bebé de 8 meses

El bebé de 8 meses necesita juegos y actividades que estimulen su desarrollo intelectual, sensorial y la coordinación motora, como darle juguetes y objetos de colores, formas, tamaños y texturas diferentes, estimularlo a encajar objetos como cubos o bolas, o incluso una tapa en una olla, jugar a las escondidas, colocar el juguete lejos para estimularlo a que lo alcance o colocar juguetes que floten en la tina a la hora de bañarlo, por ejemplo. 

Es importante que las actividades sean realizadas en una zona segura para el bebé, preferiblemente en el piso y lejos de objetos que puedan lastimarlo. 

Vídeos relacionados