La urticaria es una enfermedad que puede ser producida por estrés emocional y, en estos casos, es llamada popularmente como "urticaria nerviosa". Sin embargo, la urticaria corresponde a una reacción exagerada del sistema inmune a medicamentos, alimentos, infecciones, picaduras de insecto, temperaturas extremas, exposición solar, estrés, entre otros, por lo que no suele surgir solo por cambios emocionales.
Esta reacción del sistema inmune produce síntomas como lesiones en la piel en forma de placas rojizas que se caracterizan por comezón intensa, irritación e inflamación, las cuales surgen repentinamente y suelen desaparecer en menos de 24 horas.
Cuando la urticaria se agrava por factores emocionales, las causas generalmente incluyen el exceso de trabajo, cambios en la rutina, conflictos familiares, pérdida de empleo, frustraciones o cualquier otro factor que pueda generar estrés. De esta forma, el acompañamiento psicológico es muy importante para controlar las emociones, además de cualquier otro tipo de tratamiento médico para la urticaria. Conozca más sobre el tratamiento de la urticaria.
Principales síntomas
Los síntomas principales de la urticaria nerviosa son:
- Comezón intensa en todo el cuerpo;
- Irritación en la piel por la comezón excesiva;
- Lesión o placas inflamadas;
- Apariencia de enrojecimiento;
- Ardor en la piel.
En el caso de la "urticaria nerviosa" estos síntomas suelen aparecer sobre todo cuando la persona se encuentra más ansiosa o estresada, sin embargo, como ya se encuentran predispuestas a la urticaria, esta solo se agrava en situaciones de estrés.
Cómo confirmar el diagnóstico
El diagnóstico para la urticaria consiste en una exploración física que es realizada por el médico, que también puede realizar algunas preguntas para descubrir la causa de los síntomas, como actividades que hayan sido realizadas, alimentos o medicamentos ingeridos, zonas del cuerpo en donde suelen surgir las manchas o frecuencia del aparecimiento de los episodios.
Normalmente, no es necesario ningún examen específico para confirmar la urticaria nerviosa a menos que haya sospecha de otra causa, como alimentos o medicamentos.
Cómo se realiza el tratamiento
El tratamiento para la urticaria nerviosa se realiza con el objetivo de aliviar los síntomas, siendo prescrito en la mayoría de las veces el uso de antihistamínicos que permite aliviar la comezón y la irritación de la piel. El tratamiento debe ser seguirse de acuerdo a la orientación médica, ya que dosis mayores o menores de las recomendadas pueden interferir con el tratamiento, agravando los síntomas o causando otros problemas.
Además, cuando la urticaria es desencadenada por cambios emocionales que producen estrés o tensión, se recomienda el acompañamiento por un psicólogo para el control de las emociones, disminuyendo así la frecuencia de las crisis de urticaria.
Los síntomas de la urticaria pueden también aliviarse en casa, por medio de un baño con harina de avena y lavanda, que disminuyen la comezón y la irritación de la piel, o con un baño con sales de Epsom y aceite de almendras, ya que tiene propiedades antiinflamatorias, analgésicas y calmantes, promoviendo el bienestar y disminuyendo la irritación de la piel.
Vea las principales opciones de tratamiento para urticaria.
