9 recetas de té helado (y cómo prepararlos)

Algunas recetas de té helado casero, saludable, práctico y sabroso incluyen el té mate con limón, té de durazno, té verde con naranja o té de frutos rojos, por ejemplo.

Además de refrescar en los días calurosos de verano, el té frío también puede ofrecer otros beneficios, ya que contiene compuestos bioactivos y nutrientes que ayudan a mejorar la digestión, reducir el riesgo de enfermedades cardiovasculares o combatir la retención de líquidos.

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Estos tés pueden prepararse con hierbas secas o en saquitos, y se pueden consumir a lo largo del día o acompañar las comidas, como el desayuno, las colaciones o el almuerzo, por ejemplo.

Recetas de té helado para hacer en casa

Algunas recetas de té helado casero son:

1. Té mate helado con limón

El té helado de mate con limón es una bebida casera que, además de refrescar, ayuda a combatir el cansancio y a regular el sistema inmunológico.

Ingredientes:

• 4 cucharadas de hojas de yerba mate tostada o 4 saquitos;
• Gotas de limón al gusto;
• 1 litro de agua.

Modo de preparación:

Llevar el agua a ebullición. Apagar el fuego, añadir la yerba mate, tapar y dejar reposar de 5 a 10 minutos.

Colar la bebida, dejar que se entibie, añadir el limón, colocar en una botella y refrigerar. Se puede tomar hasta 1 litro al día.

Precauciones: este té no debe ser consumido por mujeres embarazadas o en período de lactancia, niños, ni personas con laberintitis, reflujo, úlceras, gastritis, insomnio o ansiedad.

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2. Té helado de durazno

El té helado de durazno es una receta sencilla, sabrosa y refrescante, ideal para los días más calurosos.

Ingredientes:

• 2 duraznos maduros;
• 2 ramas de canela;
• 1 litro de agua.

Modo de preparación:

Lavar bien los duraznos, retirar los carozos y cortarlos en rodajas. Llevar el agua con la canela al fuego hasta que comiencen a salir burbujas del fondo.

Apagar el fuego, añadir los duraznos, tapar y dejar reposar por 5 minutos.

Retirar la canela, llevar a la heladera durante 1 hora o hasta que esté bien frío. Beber a lo largo del día, preferentemente sin endulzar.

3. Té verde helado con naranja

Además de ser una bebida refrescante y sabrosa, el té verde helado con naranja también tiene acción antioxidante y antiinflamatoria, ya que contiene catequinas, flavonoides, cafeína, vitamina C y carotenoides.

Ingredientes:

• 4 tazas de agua;
• 4 cucharaditas o 4 saquitos de té verde;
• Jugo de 1 naranja;
• Hielo al gusto.

Modo de preparación:

En una olla o tetera, llevar el agua a ebullición. Apagar el fuego, añadir el té verde, tapar y dejar reposar durante 5 minutos.

Colar, dejar entibiar, agregar el hielo y el jugo de naranja, y beber enseguida.

Se pueden tomar de 2 a 4 tazas de este té al día, preferentemente entre las comidas.

En caso de hipertensión, no se recomienda superar las 3 tazas al día.

Precauciones: este té no debe ser consumido durante el embarazo ni la lactancia, y está contraindicado para niños, personas con insomnio, alteraciones de la tiroides, problemas renales o hepáticos, gastritis o úlceras.

4. Té helado de frutos rojos

Este té casero, además de refrescar, es rico en antioxidantes que ayudan a prevenir el envejecimiento prematuro.

Ingredientes:

• 10 frutillas (fresas);
• 2 ramas de canela;
• 8 frambuesas;
• 8 moras;
• 1 litro de agua.

Modo de preparación:

Lavar bien las frutas y cortarlas en cubos pequeños. Hervir el agua con la canela por 10 minutos.

Apagar el fuego, añadir las frutas, tapar y dejar reposar 5 minutos más.

Retirar la canela, llevar a la heladera por 1 hora o hasta que esté bien frío, y consumir durante el día.

5. Té de hibisco helado

Refrescante y saludable, este té es rico en flavonoides, vitamina C y ácidos orgánicos que favorecen la salud cardiovascular y ayudan a bajar de peso.

Ingredientes:

• 1 cucharada de flores secas de hibisco;
• 400 ml de agua.

Modo de preparación:

Hervir el agua, apagar el fuego y añadir el hibisco. Tapar y dejar reposar de 3 a 5 minutos.

Colar y guardar en la heladera por 1 hora. Se puede consumir hasta 3 tazas al día.

Precauciones: no debe ser consumido por embarazadas, mujeres en lactancia, niños menores de 12 años o personas con enfermedades renales o hepáticas.

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6. Té negro helado

El té negro helado es una bebida casera práctica y refrescante, con antioxidantes que combaten los radicales libres, mejoran la digestión y reducen el riesgo de enfermedades crónicas.

Ingredientes:

• 3 saquitos o 3 cucharaditas de hojas secas de té negro;
• 3 tazas de agua.

Modo de preparación:

Hervir el agua, apagar el fuego y añadir el té negro. Tapar y dejar reposar 5 minutos.

Colar, colocar en una botella y refrigerar. Se puede beber hasta 5 tazas por día.

Precauciones: no indicado para niños menores de 12 años. Embarazadas o mujeres lactando solo deben consumirlo bajo supervisión médica.

Personas con hipertensión deben evitarlo por su contenido de cafeína, especialmente si no consumen café u otras bebidas con cafeína habitualmente.

7. Té helado de manzanilla con limón

El té helado de manzanilla con limón es una bebida muy refrescante, ideal para los días calurosos y puede tener propiedades medicinales.

Ingredientes:

• 1 cucharada (4 g) de flores secas de manzanilla;
• Gotas de limón al gusto;
• 1 taza de agua.

Modo de preparación:

Hervir el agua, apagar el fuego y añadir la manzanilla. Tapar y dejar reposar por 5 minutos.

Colar, dejar enfriar, añadir el limón y refrigerar. Se recomienda un máximo de 4 tazas por día.

Precauciones: no debe darse a bebés menores de 6 meses ni a personas alérgicas a la manzanilla o a plantas de la misma familia (como crisantemos, margaritas o ambrosías).

La manzanilla común (Matricaria recutita) puede utilizarse durante el embarazo y la lactancia, pero no la manzanilla romana, cuya seguridad no está comprobada.

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8. Té helado de anís

Una buena receta de té helado casero es la de hinojo. Además de ser refrescante, este té contiene compuestos bioactivos que ayudan a aliviar gases, cólicos y la mala digestión.

Ingredientes:

• 1 cucharadita (de café) de semillas secas de hinojo;
• 1 taza (de té) de agua.

Modo de preparación:

Triturar o machacar las semillas de hinojo. Colocar el agua en una olla o tetera y llevar a ebullición. Apagar el fuego, añadir el hinojo, tapar y dejar reposar durante 5 minutos.

Colar el té y llevarlo al refrigerador para enfriar. Se pueden consumir hasta 3 tazas al día de este té helado, por un máximo de 2 semanas consecutivas.

Precauciones: el té de hinojo no debe ser consumido por niños menores de 12 años ni por personas alérgicas al anís o al compuesto anetol. También está contraindicado durante el embarazo o la lactancia.

Además, este té no se recomienda para personas que usan medicamentos anticoagulantes, que presentan hiperestrogenismo o mujeres con cáncer de mama que estén en tratamiento con terapia de reemplazo hormonal.

9. Té helado de menta con limón

El té helado de menta con limón es una receta casera refrescante que también puede utilizarse con fines medicinales.

Esto se debe a que la menta tiene acción analgésica, digestiva y antiinflamatoria, ayudando a mejorar la digestión y a aliviar los cólicos, por ejemplo.

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Ingredientes:

• 4 tazas de agua;
• 4 cucharadas de hojas de menta;
• Gotas de limón al gusto.

Modo de preparación:

Llevar el agua a ebullición y, cuando empiece a hervir, apagar el fuego. Luego, añadir las hojas de menta, tapar y dejar reposar durante 5 minutos.

Colar la bebida, colocarla en una jarra, añadir las gotas de limón y llevarla al refrigerador durante 1 a 2 horas. Se pueden tomar hasta 4 tazas de este té al día.

Precauciones: este té no está recomendado para mujeres embarazadas ni en período de lactancia.

Tampoco se aconseja para niños menores de 5 años ni para personas con reflujo, hernia de hiato, cálculos renales o biliares, o inflamación de la vesícula biliar.