Rifocina spray: para qué sirve y cómo utilizar

La Rifocina en spray es un medicamento que tiene en su composición el antibiótico rifamicina y está indicado para el tratamiento de infecciones en la piel causadas por microorganismos sensibles a esta sustancia activa.

Por ello, el uso de rifamicina puede ser indicado en el tratamiento de heridas, quemaduras, forúnculos y úlceras, siempre que sea prescrito por el médico, estando contraindicada su aplicación en la cavidad oral o cerca del oído.

El uso de Rifocina se considera seguro, sin embargo, debe evitarse en personas con alergia a la rifamicina o a cualquier otro componente de la fórmula.

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¿Para qué sirve?

La Rifocina sirve para el tratamiento de:

  • Heridas infectadas;
  • Quemaduras;
  • Forúnculos;
  • Infecciones de la piel;
  • Enfermedades de la piel infectadas;
  • Úlceras varicosas;
  • Dermatitis eczematoides.

Además, este medicamento puede utilizarse para el tratamiento de heridas posquirúrgicas infectadas, siempre que sea indicado por el médico.

Debido a que contiene un antibiótico en su composición, no se recomienda su uso prolongado.

¿Cómo utilizar la Rifocina?

Antes de aplicar Rifocina en alguna cavidad, es importante limpiar adecuadamente el área con solución salina, removiendo cualquier pus que pudiera haber. Luego, se puede aplicar el medicamento en la zona afectada cada 6 a 8 horas (3 o 4 veces al día) o según la indicación médica.

También es posible preparar compresas con Rifocina para uso externo sobre la región a tratar. Para ello, basta con dejar caer unas gotas de la solución sobre una gasa hasta humedecerla por completo, y luego colocarla sobre la herida.

Después de usar Rifocina, es fundamental limpiar cuidadosamente el orificio del frasco con un pañuelo de papel o un paño limpio y volver a colocar la tapa, para evitar que se obstruya.

Rifocina está indicada para su aplicación en la piel, por lo que no se recomienda su uso en zonas cercanas al oído ni en la cavidad oral. Además, no debe ser ingerida por vía oral.

¿Cuáles son los efectos secundarios?

Los efectos secundarios más comunes durante el tratamiento con Rifocina incluyen la aparición de una coloración rojiza-anaranjada en la piel o en fluidos como lágrimas, sudor, saliva y orina, así como reacciones alérgicas en el sitio de aplicación.

Rifocina también puede causar reacciones alérgicas graves que requieren atención médica inmediata. Por ello, se debe suspender el tratamiento y acudir al servicio de urgencias más cercano si se presentan síntomas como dificultad para respirar, sensación de opresión en la garganta, hinchazón en la boca, lengua o rostro, o urticaria. Vea cómo identificar los síntomas de una reacción alérgica grave.

¿Cuáles son las contraindicaciones?

La Rifocina está contraindicada en personas alérgicas a la rifamicina o a cualquier componente de su fórmula.

Además, las personas asmáticas deben usar Rifocina únicamente bajo indicación médica, ya que contiene metabisulfito, un compuesto que puede aumentar el riesgo de crisis asmáticas graves.

Las mujeres embarazadas o en periodo de lactancia deben consultar al médico antes de utilizar Rifocina.