La dieta para una crisis de vesícula, que puede ocurrir cuando hay piedras en este órgano, debe realizarse evitando el consumo de alimentos ricos en grasa, como embutidos, salsas preparadas, helados y galletas.
Durante la crisis de vesícula, también es importante priorizar alimentos saludables y naturales, como frutas, vegetales, cereales integrales, legumbres, tubérculos y proteínas con bajo contenido de grasa.
Aunque la alimentación es fundamental durante el tratamiento de la crisis de vesícula, no debe reemplazar el tratamiento recomendado por el médico, que puede incluir también el uso de medicamentos.
Alimentos permitidos
Durante una crisis de vesícula se debe comer alimentos ricos en agua y con poco o ningún contenido de grasa, tales como:
- Frutas, como manzana, pera, durazno, piña, sandía, fresa, naranja, kiwi, higo, cereza, mora, melón y frambuesa;
- Vegetales, como lechuga, zanahoria, repollo, tomate, calabaza, chayote y quimbombó;
- Cereales integrales, como arroz integral, avena, pasta integral y pan integral;
- Tubérculos, como papa, ñame, batata y yuca;
- Legumbres, como frijoles, arvejas, lentejas, garbanzos y soja;
- Aceites vegetales en pequeña cantidad, como aceite de oliva y de aguacate;
- Lácteos bajos en grasa, como leche descremada, yogur descremado y queso blanco;
- Bebidas vegetales, como leche de arroz, almendra o avena;
- Proteínas magras, como pollo, pescado y pavo sin piel, clara de huevo y tofu;
- Hierbas y especias naturales, como perejil, albahaca y menta;
- Bebidas, como agua, jugos naturales y tés.
Se recomienda priorizar los alimentos cocidos, al vapor y a la parrilla, evitando el uso excesivo de grasa.
Además, también se recomienda repartir las comidas en porciones pequeñas a lo largo del día y evitar comidas abundantes. Comer despacio y masticar bien los alimentos también ayuda a favorecer la digestión y reducir el riesgo de malestares.
Es importante evitar el ayuno prolongado, ya que puede estimular el movimiento biliar y aumentar los síntomas.
Lea también: 8 remedios caseros para expulsar las piedras de la vesícula tuasaude.com/es/remedio-casero-para-piedras-en-la-vesiculaAlimentos prohibidos
Los alimentos que deben evitarse o limitar su consumo durante una crisis de vesícula son:
- Frutas grasas como coco, aguacate y açaí;
- Lácteos con alto contenido de grasa, como leche entera, mantequilla, yogur entero y quesos amarillos;
- Proteínas grasas, como costillas, yema de huevo, hígado, corazón, molleja, salchicha, patitas de cerdo, carne de cordero;
- Embutidos, como jamón, salchicha, salami y mortadela;
- Frutos secos, como nueces, castaña de Brasil, almendras y maní;
- Bebidas alcohólicas, como cerveza, vino y vodka;
- Alimentos industrializados, como chocolate, galletas, hojaldre, helado, caldo de carne y salsas preparadas.
Los alimentos ricos en grasa deben evitarse, ya que pueden estimular la liberación de bilis, empeorando la crisis de vesícula. Asimismo, las comidas muy condimentadas, picantes o abundantes también pueden agravar los síntomas.
Algunas personas pueden identificar otros alimentos que provocan los síntomas de la crisis de vesícula. En este caso, es importante llevar un diario alimentario, indicando el alimento consumido y los síntomas que surgieron.
Menú ejemplo de la dieta para la vesícula
En la tabla a continuación se indica un menú ejemplo de 3 días que incluye alimentos que evitan la estimulación de la vesícula y alivian el dolor:
Este es un menú ejemplo y sus cantidades varían según la edad, sexo, actividad física y si posee o no alguna otra enfermedad asociada. Por este motivo, lo ideal es acudir a un nutricionista para que realice una evaluación nutricional completa y elabore un plan de alimentación adecuado a sus necesidades. Vea cómo preparar algunos remedios caseros para las piedras en la vesícula.
¿Cómo debe ser la dieta después de la crisis?
La dieta después de la crisis de vesícula debe ser saludable y balanceada, incluyendo frutas y vegetales frescos, legumbres, cereales, tubérculos y proteínas bajas en grasa.
Además, es importante evitar el exceso de grasa, los alimentos ultraprocesados y el consumo de bebidas alcohólicas.
El menú y la dieta deben adaptarse progresivamente según la tolerancia de cada persona, evitando ayunos prolongados y comidas copiosas. Si surgen síntomas o dudas durante el proceso, es fundamental consultar al médico o nutricionista para recibir una orientación personalizada y garantizar una recuperación segura y eficaz.
Lea también: 9 beneficios de una alimentación saludable (y cómo hacerla) tuasaude.com/es/alimentacion-saludableVea en el siguiente video cómo la alimentación puede aliviar los síntomas de crisis en la vesícula: