El hipo es un reflejo involuntario del cuerpo que ocurre cuando el diafragma se contrae de forma repentina, provocando un cierre brusco de las cuerdas vocales. Esto bloquea momentáneamente el paso del aire y genera el sonido característico del hipo.
Este reflejo puede clasificarse según su duración, ya que puede presentarse durante algunos minutos, prolongarse por horas o incluso durar varios días. Las causas incluyen comer en grandes cantidades o muy rápido, tragar aire, ansiedad, estrés, irritación o daño en el sistema nervioso periférico, problemas metabólicos e incluso el uso de ciertos medicamentos.
Aunque el hipo suele desaparecer espontáneamente después de algunos minutos, existen métodos caseros que pueden ayudar, como aguantar la respiración, recibir un susto o hacer gárgaras con agua. Estas acciones estimulan el nervio vago o modifican los niveles de dióxido de carbono en el cuerpo, lo que podría ser efectivo para detenerlo.
Por qué da hipo
El hipo ocurre cuando ciertos estímulos, como comer en exceso, hacerlo muy rápido o experimentar cambios bruscos de temperatura, activan el sistema nervioso.
Esta activación desencadena una contracción repentina del diafragma y otros músculos respiratorios. Durante la inspiración, esta contracción provoca el cierre abrupto de la glotis, lo que interrumpe el paso del aire y produce el sonido característico del hipo.
Clasificación
El hipo se puede clasificar según la duración del mismo, pudiendo clasificarse en:
- Fisiológico: episodios breves que se resuelven espontáneamente y no suelen durar más de 48 horas;
- Persistente: tiene una duración de entre 48 horas y 2 meses;
- Intratable: dura más de 2 meses.
Conocer la duración del hipo es fundamental, ya que puede servir de referencia para que el médico realice una evaluación adecuada y oriente el diagnóstico.
Principales causas
Existen diferentes causas de hipo y las mismas dependen de la duración:
1. Causas del hipo fisiológico
Las posibles causas del hipo fisiológico son:
- Comer rápido, mucha cantidad y en pedazos grandes;
- Ingerir alimentos picantes o muy calientes;
- Beber bebidas con gas o alcohol;
- Ansiedad o estrés;
- Tragar aire, al masticar chicle, beber con sorbete o popote, etc.
Además, el hipo fisiológico puede ser causado por cambios repentinos de temperatura, principalmente por la exposición al frío.
2. Causas del hipo persistente e intratable
Las posibles causas del hipo persistente e intratable incluyen:
- Daño o irritación de los nervios periféricos provocados por afecciones en el nervio frénico o vago, tumores o ganglios en la glándula tiroides, reflujo gastroesofágico, infección por Helicobacter pylori, isquemia miocárdica, entre otros;
- Trastornos del sistema nervioso central, como tumores cerebrales, esclerosis múltiple, infecciones como meningitis, esclerosis múltiple, hidrocefalia y convulsiones infantiles;
- Problemas metabólicos, como desequilibrio electrolítico, enfermedad renal o uremia, o diabetes;
- Uso de medicamentos sedantes, como el propofol, anestésicos, como la bupivacaína, esteroides, como dexametasona, quimioterapia, entre otros;
- Trastorno por consumo de alcohol;
- Cirugías.
El hipo persistente o intratable suele mejorar una vez que se identifica y trata la causa que lo origina.
Cómo quitar
Para quitar el hipo repentino, existen diversas técnicas que pueden ser efectivas al estimular el nervio vago o modificar los niveles de dióxido de carbono en el organismo. Algunas de ellas incluyen beber agua fría, hacer gárgaras, contener la respiración o provocar un pequeño susto.
Además, existen algunos medicamento que el médico puede indicar en casos de hipo persistente, como clorpromazina, metoclopramida y el baclofeno.
Para tratar el hipo persistente o intratable, es fundamental que el médico identifique su causa específica, a fin de resolver tanto el síntoma como su origen.
Cómo quitar el hipo en bebés
Para quitar el hipo en bebés, se puede intentar estimular el nervio vago con un pequeño sobresalto; sin embargo, lo más recomendable es esperar a que desaparezca de forma espontánea.