Presión arterial: qué es, cómo se mide y rango por edad

Actualizado en noviembre 2023

La presión arterial es la fuerza que ejerce la sangre en el interior de las grandes arterias del cuerpo y varía según la elasticidad de los vasos, su tamaño y la cantidad de sangre bombeada por el corazón. En adultos, la presión arterial sistólica normal varía de 120 a 129 mmHg y la diastólica de 80 a 84 mmHg.

Aunque los cambios en la presión arterial no siempre tienen una causa específica, pueden ocurrir debido al uso de algunos medicamentos, como diuréticos o antihipertensivos, el hipertiroidismo y la deshidratación, por ejemplo.

Por lo tanto, es importante medir correctamente la presión arterial para identificar adecuadamente las alteraciones. Además, se recomienda consultar a un cardiólogo o a un médico general para confirmar el diagnóstico e iniciar el tratamiento más adecuado, que puede incluir el uso de medicamentos.

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Cómo se mide la presión arterial

Para medir la presión arterial, generalmente se utilizan dispositivos automáticos o el esfigmomanómetro, y la técnica correcta varía según el dispositivo elegido. Vea cómo medir la presión arterial correctamente.

Independientemente del método elegido, antes de tomar la medida, es importante que la persona esté sentada cómodamente en un entorno silencioso durante al menos 5 minutos. Además, no debe tener la vejiga llena ni haber consumido alcohol, café u otros alimentos antes de la medición.

También se recomienda que, antes de la medición, la persona no haya realizado ejercicios físicos en la última hora ni haya fumado en los últimos 30 minutos.

Tabla de rangos de presión arterial por edad

La tabla a continuación muestra los valores de referencia de presión em mmHg de acuerdo con la edad y sexo:

Edad (años)

PA sistólica  (hombres)

PA diastólica (hombres) PA sistólica (mujeres) PA diastólica (mujeres)
1 98 52 98 54
2 100 55 101 58
3 101 58 102 60
4 102 60 103 62
5 103 63 104 64
6 105 66 105 67
7 106 68 106 68
8 107 69 107 69
9 107 70 108 71
10 108 72 109 72
11 110 74 111 74
12 113 75 114 75
13 años o más 120 80 120 80

Si la medición de la presión arterial está por encima de estos valores, es importante consultar a un cardiólogo, un médico general o un pediatra para una evaluación. En este caso, se pueden recomendar mediciones de la presión arterial en otros momentos debido al riesgo de hipertensión arterial.

Presión arterial normal en adultos

En adultos, la presión arterial se considera normal cuando la presión sistólica se encuentra entre 120 y 129 mmHg y/o la presión diastólica está entre 80 y 84 mmHg. Además, cuando la presión arterial es inferior a 120 x 80 mmHg, se considera óptima. Sin embargo, si es inferior a 90 x 60 mmHg, generalmente se clasifica como hipotensión.

Presión arterial normal en niños

En niños, el valor normal de la presión arterial varía según la edad, el sexo y la estatura, y se considera normal cuando es inferior al percentil 90 para la presión sistólica y diastólica.

Causas de presión arterial alta

En adultos, la presión arterial alta, también conocida como hipertensión, generalmente se presenta cuando la presión arterial supera los 140 x 90 mmHg. La presión arterial alta puede ser causada por desequilibrios hormonales, como el hipertiroidismo o el síndrome de Cushing, y enfermedades renales, como la enfermedad renal crónica o los riñones poliquísticos, por ejemplo.

Además, algunos medicamentos, el tabaquismo y el consumo excesivo de bebidas alcohólicas también pueden provocar presión arterial alta. Vea otras causas de presión arterial alta.

Las causas de la presión arterial baja

La presión arterial baja, o hipotensión, se produce cuando la presión arterial es inferior a 90 x 60 mmHg, y puede deberse al uso de ciertos medicamentos, como diuréticos y antihipertensivos, deshidratación, problemas cardíacos e infecciones graves. Vea otras posibles causas de la presión arterial baja.

Sin embargo, la causa de la presión arterial baja no siempre se identifica y, en algunos casos, puede no ser motivo de preocupación, especialmente si no se presentan síntomas como debilidad o somnolencia.