El sabor a fierro en la boca corresponde, en la mayoría de los casos, a un tipo de alteración del gusto llamada disgeusia. La persona percibe un sabor metálico o extraño de forma persistente, incluso sin comer ni beber nada. Vea qué es la disgeusia.
Este síntoma puede relacionarse con uso de ciertos medicamentos, infecciones respiratorias como la COVID-19, problemas dentales, enfermedad renal crónica o tratamientos de cáncer en cabeza y cuello. En muchas personas también afecta el apetito y puede favorecer la pérdida de peso.
En algunos casos, el sabor a fierro en la boca desaparece cuando se trata la causa, como ajustar un fármaco o controlar mejor una enfermedad de base. Sin embargo, la duración y la intensidad pueden variar mucho entre personas.
Ante sabor metálico persistente, especialmente si se acompaña de otros síntomas, es importante consultar al médico y evitar la automedicación.