El índice de masa corporal (IMC) en niños es una herramienta utilizada por profesionales de la salud para saber si el peso está dentro de lo saludable para su edad y sexo. A diferencia de los adultos, se interpreta con tablas de percentiles que comparan el valor con el de otros niños de la misma edad y género, ayudando a detectar bajo peso, sobrepeso u obesidad.
Calcular y evaluar el IMC es importante para seguir el crecimiento infantil y detectar cambios en el estado nutricional. La OMS y los CDC recomiendan su uso en los chequeos de salud para actuar de forma temprana en caso de alteraciones.
Si el IMC está fuera del rango saludable, el médico debe identificar la causa y orientar el tratamiento. No se deben hacer cambios en la alimentación o actividad física sin supervisión profesional, para evitar riesgos a la salud.
Calculadora de IMC en niños
Introduzca los datos a continuación para conocer cuál es el IMC infantil:
El rango de peso es calculado a través de los Patrones de Crecimiento Infantil de la Organización Mundial para la Salud (OMS) basados en el IMC para la edad. El rango está dividido en percentiles (P), siendo el peso mínimo el percentil 10 (P10), el peso ideal el percentil 50 (P50) y el peso máximo el percentil 85 (P85).
ATENCIÓN: esta calculadora no es adecuada para calcular el peso antes de los 5 años, siendo más adecuado seguir las tablas presentadas anteriormente o seguir las indicaciones del pediatra. Conozca cuál es el peso ideal para las niñas y para los niños con menos de 5 años.
Ante cualquier duda o para una evaluación personalizada, se recomienda acudir al pediatra o nutricionista, y no interpretar estos valores por cuenta propia.
¿Cómo sacar el IMC en niños?
El IMC en niños se calcula con la misma fórmula matemática que en adultos, dividiendo el peso en kilogramos por la estatura en metros al cuadrado. Sin embargo, para interpretar el resultado, es necesario comparar este valor con las tablas de percentiles que consideran la edad y el sexo del niño.
Los pasos para calcular el IMC en niños son:
- Medir el peso en kilogramos.
- Medir la altura en metros.
- Aplicar la fórmula del IMC: peso (kg) ÷ altura (m²).
- Consultar el valor obtenido en una tabla de IMC por edad y sexo, determinando en qué percentil se encuentra el niño.
Un IMC entre los percentiles 10 y 85 se considera saludable. Valores por debajo del percentil 10 pueden indicar bajo peso, mientras que por encima del percentil 85 pueden señalar sobrepeso u obesidad.
El IMC es una herramienta de fácil aplicación pero no reemplaza la valoración global del estado nutricional, ya que no diferencia entre masa muscular y grasa ni refleja la distribución de la grasa corporal.
Tabla de IMC en niños y niñas
La tabla a continuación muestra el rango de IMC saludable (entre el P10 y el P85) en niñas y niños a partir de los 5 años hasta los 18 años:
Esta tabla está basada en las tablas de crecimiento OMS para edad de 5 a 18 años. Los valores pueden variar levemente por meses y deben interpretarse siempre con tablas oficiales completas.
Ante un resultado fuera del rango saludable, se debe acudir a un pediatra o nutricionista para una evaluación completa.
El rango saludable es representado desde el percentil 10 (IMC mínimo) al percentil 85 (IMC máximo) según sexo y edad.
¿Qué hacer si el IMC está alto o bajo?
Los principales riesgos de tener un IMC alterado en la infancia son:
- Mayor probabilidad de desarrollar enfermedades metabólicas (como diabetes tipo 2).
- Alteraciones en el crecimiento y desarrollo.
- Problemas emocionales o de autoestima relacionados con la imagen corporal.
Las principales acciones cuando el IMC está fuera del rango saludable incluyen:
- Evaluación profesional: un médico o nutricionista debe realizar una evaluación integral y determinar si realmente existe riesgo para la salud.
- Investigación de causas: pueden haber factores genéticos, alimentarios, de actividad física, o incluso trastornos hormonales.
- Intervención personalizada: la estrategia depende de las causas y puede incluir modificación en la alimentación, promoción de actividad física, seguimiento médico y, si es necesario, apoyo psicológico.
Modificar el peso sin acompañamiento profesional puede ocasionar deficiencias nutricionales o consecuencias en el desarrollo. Por ello, es fundamental el acompañamiento de un equipo de salud especializado.
Lea también: 10 consejos para ayudar al niño o al adolescente a bajar de peso tuasaude.com/es/consejos-para-bajar-de-peso-al-nino-o-al-adolescente¿Cuándo acudir al médico?
Se recomienda acudir al médico o nutricionista cuando:
- El IMC se encuentra persistentemente fuera de los rangos saludables.
- Hay cambios rápidos en el peso o talla sin causa aparente.
- Existen antecedentes familiares de obesidad, diabetes o trastornos alimentarios.
- Se presentan síntomas asociados, como fatiga, dificultad para realizar actividad física o alteraciones en el comportamiento alimentario.
Un diagnóstico temprano y manejo adecuado ayudan a prevenir complicaciones a corto y largo plazo.