La hipermetropía es la dificultad para ver objetos de cerca y ocurre cuando el globo ocular es más corto de lo normal o cuando la córnea, que es la parte frontal del ojo, no tiene suficiente capacidad, provocando que la imagen se forme detrás de la retina.
Generalmente, la hipermetropía está presente desde el nacimiento, ya que su causa principal es hereditaria; sin embargo, puede manifestarse en distintos grados y pasar inadvertida en la infancia, lo que podría generar problemas de aprendizaje. Por ello, es importante que los niños se sometan a exámenes visuales de forma regular.
Este trastorno visual suele tratarse con gafas o lentes, aunque en algunos casos el oftalmólogo puede recomendar una cirugía láser para corregir la córnea, conocida como cirugía LASIK.
Principales síntomas
Los principales síntomas de hipermetropía son:
- Visión borrosa para objetos cercanos;
- Cansancio y dolor en los ojos;
- Dolores de cabeza;
- Dificultad para concentrarse;
- Sensación de pesadez alrededor de los ojos;
- Ojos llorosos o enrojecidos.
En algunos casos, la hipermetropía puede provocar complicaciones como estrabismo, especialmente en niños, o ojo perezoso (ambliopía). Además, puede dificultar actividades cotidianas y representar riesgos para la seguridad en actividades como conducir.
Lea también: Problemas de la vista: 11 síntomas y cómo tratar tuasaude.com/es/sintomas-de-problemas-de-la-vista¿Cómo ve una persona con hipermetropía?
Una persona con hipermetropía percibe los objetos cercanos de forma borrosa, mientras que la visión lejana suele ser más nítida, especialmente en los casos leves o moderados.
Esto ocurre porque los rayos de luz que entran al ojo se enfocan detrás de la retina en lugar de hacerlo directamente sobre ella.
En los niños y adultos jóvenes, el cristalino puede compensar parcialmente este defecto, lo que les permite enfocar mejor los objetos cercanos.
Sin embargo, con la edad, esta capacidad disminuye y la visión cercana borrosa se vuelve más evidente.
Diferencias entre hipermetropía, miopía y astigmatismo
A pesar de que la hipermetropía, la miopía y el astigmatismo son alteraciones de la vista presentar las siguientes diferencias:
Ante cualquier alteración en la vista, se recomienda acudir a un oculista u oftalmólogo para una evaluación adecuada.
Cómo se realiza el diagnóstico
El diagnóstico de hipermetropía lo realiza el oftalmólogo a partir de la evaluación de los síntomas reportados y mediante un examen oftalmológico.
Este examen puede incluir pruebas de visión con letras o símbolos, uso de equipos que miden el grado de refracción y, en algunos casos, exámenes con dilatación de la pupila para una evaluación más precisa.
Lea también: Exámen oftalmológico: qué es, para qué sirve y tipos de exámen tuasaude.com/es/examen-oftalmologico-que-esPrincipales causas
La hipermetropía suele ser hereditaria, transmitiéndose de padres a hijos. Sin embargo, también puede aparecer debido a alteraciones en la formación del ojo, problemas en la córnea o en el cristalino.
También puede ser consecuencia de algunas enfermedades, como diabetes o tumores, o del uso de ciertos medicamentos, como anticonvulsivos y corticosteroides.
Cómo se realiza el tratamiento
El tratamiento de la hipermetropía es indicado por el oftalmólogo y puede incluir:
- Corrección con gafas, generalmente la opción más común y recomendada para niños y adultos;
- Lentes de contacto, que pueden usarse por motivos estéticos o en casos de hipermetropía en un solo ojo;
- Cirugía refractiva, que puede realizarse después de los 21 años y utiliza láser u otras tecnologías para modificar la curvatura de la córnea y mejorar la visión.
Además, como la visión cambia con el tiempo, la graduación de las gafas o de las lentes puede requerir ajustes periódicos.
¿La hipermetropía tiene cura?
La hipermetropía no tiene una cura definitiva, pero puede corregirse con gafas, lentes de contacto o cirugía.
Aunque la cirugía puede corregir la hipermetropía, incluso de forma duradera, no elimina por completo la posibilidad de cambios visuales con el paso del tiempo.
En algunos niños, la hipermetropía leve puede disminuir a medida que el ojo crece, pero no siempre desaparece por completo.