Fentanilo: qué es, efectos y para qué sirve

El fentanilo es un medicamento opioide sintético similar a la morfina, pero con un efecto analgésico de 50 a 100 veces más potente, y suele indicarse para aliviar dolor crónico o muy intenso. También puede emplearse como complemento de una anestesia general o local.

Este medicamento puede encontrarse en forma de parche transdérmico, disponible en varias concentraciones, que la persona puede aplicar siguiendo la indicación médica. Se adquiere en farmacias, en su versión genérica o bajo distintos nombres comerciales, siempre con receta médica que debe quedar retenida en la farmacia.

El fentanilo también se presenta en forma de inyección, utilizada en hospitales y aplicada por vía intravenosa, intramuscular o en los espacios entre las vértebras de la columna, siempre por un profesional de la salud y de acuerdo con las indicaciones médicas.

Para qué sirve

El fentanilo sirve para:

• Tratar dolor crónico o muy intenso que no pueda aliviarse con combinaciones de paracetamol, analgésicos no esteroideos o con opioides de corta duración.
• Analgesia antes de una cirugía.
• Inducir anestesia general, epidural o complementar anestesia local.
• Controlar el dolor después de una operación.
• Servir como complemento de la anestesia local.
• Mantener anestesia general o local durante procedimientos largos.
• Realizar anestesia epidural o intratecal, por ejemplo en cesáreas u otras cirugías abdominales.

El fentanilo puede usarse en forma de parche transdérmico solo con indicación médica o como inyección aplicada en el hospital por un médico o enfermero.

Nombres comerciales del fentanilo

Algunos nombres comerciales del fentanilo son Duragesic, Actiq, Fentora, Fentanest, Fenodid, Torafen, Abstral, Fentanyl, Sublimaze, Avaric o Fentax.

Presentaciones del fentanilo y dosis

La dosis del fentanilo depende de la presentación farmacéutica a ser utilizada, como se indica a continuación:

1. Fentanilo parches

Los parches transdérmicos están disponibles en varias dosis y liberan fentanilo de forma continua durante 72 horas. Las dosis habituales son:

La dosis debe ser indicada por el médico según la intensidad del dolor y la condición de la persona.

Para aplicar el parche se recomienda elegir un área de piel limpia, seca, sin vello y sin lesiones, en la parte superior del tronco, brazo o espalda. En niños mayores de 2 años se coloca en la parte superior de la espalda para que no puedan retirarlo. El parche puede mojarse sin problema.

Si se desprende antes de los 3 días, debe desecharse correctamente y colocarse uno nuevo en otra zona, siguiendo las indicaciones médicas. Es recomendable anotar la fecha de aplicación y evitar la misma área en la siguiente colocación.

2. Fentanilo inyección

El fentanilo inyectable se administra solo en hospitales por un profesional de la salud, por vía intravenosa, intramuscular o epidural, según la indicación del médico.

La dosis varía según la edad, peso, estado físico, otros medicamentos, tipo de anestesia y procedimiento.

Posibles efectos secundarios

Los efectos secundarios más comunes que pueden ocurrir con el uso del parche transdérmico en adultos son insomnio, somnolencia, mareos, náuseas, vómitos y dolor de cabeza. En niños, los efectos secundarios más comunes que pueden ocurrir son dolor de cabeza, vómitos, náuseas, estreñimiento, diarrea y comezón generalizada.

En el caso del fentanilo inyectable, los efectos secundarios más comunes que pueden ocurrir durante el tratamiento son náuseas, vómitos y rigidez muscular.

Además, el uso de dosis mayores a las recomendadas pueden causar sobredosis, siendo observada a través de síntomas como dificultad para respirar, respiración lenta o superficial, piel fría, húmeda, pálida, azulada o grises, labios y uñas moradas, pupilas muy pequeñas, pérdida de la consciencia, falta de respuesta, vómitos, paro respiratorio.

En estos casos, se debe llevar a la persona al hospital de inmediato o llamar a una ambulancia para que se reciba atención lo antes posible, ya que una sobredosis puede poner la vida en riesgo. Vea cómo se realiza el tratamiento de una sobredosis.

¿El fentanilo puede causar adicción?

El uso regular de fentanilo y en dosis superiores a las recomendadas puede causar adicción, ya que esta sustancia es más potente que la morfina, por lo que una pequeña cantidad es capaz de garantizar su efecto.

Por esta razón, en caso de que se use con regularidad, los receptores de dopamina, que es el neurotransmisor liberado después del uso de opioides, pueden dejar de funcionar correctamente, de forma que terminar siendo necesario aumentar la dosis de sustancias para que tenga el mismo efecto, produciendo adicción.

Contraindicaciones

Este medicamento está contraindicado en niños menores de 2 años de edad y en personas alérgicas al fentanilo o a cualquiera de los componentes presentes en la fórmula. Este fármaco tampoco debe ser empleado en individuos alérgicos a otros medicamentos opioides. 

Asimismo, no se debe utilizar en mujeres embarazadas, que estén amamantando o durante el parto, a menos que esté indicado por el médico.

Consecuencias del abuso de fentanilo

El uso regular de fentanilo puede generar varios efectos perjudiciales tanto en la salud mental como en la salud física, tales como:

• Inestabilidad emocional;
• Depresión y pensamientos suicidas;
• Impulsividad;
• Disminución del deseo sexual;
• Estreñimiento;
• Pérdida de peso;
• Problemas menstruales;
• Problemas respiratorios.

Asimismo, el uso de fentanilo puede generar tolerancia, que es que cada vez se requieren cantidades más grandes para obtener el efecto deseado, y dependencia, que es un fuerte deseo por consumir la sustancia aunque tenga efectos secundarios negativos o esté perjudicando la vida de la persona.

Fentanilo ilegal, sobredosis y tráfico

El fentanilo ilegal es una de las principales causas de sobredosis en varios países, ya que se fabrica y vende sin control de calidad ni dosis seguras. Según la DEA, más del 70 % de las muertes recientes por sobredosis están relacionadas con fentanilo ilegal, que suele mezclarse con heroína, cocaína o pastillas falsificadas sin que la persona lo sepa.

Los cárteles de droga, especialmente en México, producen y distribuyen grandes cantidades de fentanilo ilegal usando precursores químicos importados. También se ha detectado su mezcla con sustancias como carfentanil o xylazina, lo que aumenta el riesgo de una sobredosis mortal. El tráfico de fentanilo ilegal sigue siendo una amenaza para la salud pública.

Según datos recientes de los CDC y la DEA, más de 72 000 muertes por sobredosis en Estados Unidos en 2023 estuvieron relacionadas con fentanilo ilegal. En México se calcula que más de 54000 personas mueren al año por sobredosis, con un aumento claro de casos asociados a fentanilo en zonas fronterizas.