El estado vegetativo ocurre cuando una persona está despierta, pero no se encuentra consciente ni ejerce ningún tipo de movimiento voluntario, lo cual hace que el individuo no pueda entender lo que sucede a su alrededor ni interactuar con el medio que lo rodea. De esta forma, aunque sea común que la persona en estado vegetativo abra los ojos, normalmente esto es solo una reacción involuntaria del cuerpo, es decir, no es controlada por su propia voluntad.
Por lo general, este estado surge cuando existe una disminución muy acentuada de la función cerebral, la cual solo es suficiente para mantener movimientos voluntarios como la respiración y los latidos cardíacos. Por lo tanto, aunque los estímulos externos, como los sonidos, continúen llegando hasta el cerebro, la persona no logra interpretarlos y, por ende, no tiene ninguna reacción.
El estado vegetativo es más común en personas que sufrieron lesiones extensas en el cerebro, como ocurre en casos más graves de golpes en la cabeza, tumor cerebral o ACV, por ejemplo.
Principales síntomas
Además de la falta de consciencia y de la incapacidad para interactuar con lo que se encuentra a su alrededor, la persona en estado vegetativo también puede presentar otros signos, tales como:
- Apertura y cierre de los ojos durante el día;
- Movimientos lentos de los ojos;
- Acciones como masticar o tragar cuando no está comiendo;
- Producción de pequeños sonidos o gemidos;
- Contracción de los músculos cuando escucha un sonido muy alto o siente dolor en la piel;
- Producción de lágrimas.
Este tipo de movimientos ocurre debido a reacciones primitivas del cuerpo humano; sin embargo, muchas veces son confundidos con movimientos voluntarios, en especial por parte de familiares de la persona afectada, lo que puede generar la creencia de que el paciente ganó consciencia y ya no se encuentra en estado vegetativo.
¿Cuál es la diferencia del coma?
La principal diferencia entre el coma y el estado vegetativo es que en el primero la persona no parece estar despierta, razón por la que no hay apertura de los ojos o movimientos involuntarios como bostezar, sonreir o producir pequeños sonidos.
¿El estado vegetativo es curable?
En ciertos casos, el estado vegetativo es curable, especialmente cuando ha durado menos de un mes y tiene una causa reversible, como una intoxicación, por ejemplo. No obstante, cuando el estado vegetativo es provocado por lesiones en el cerebro o por falta de oxígeno, la curación puede ser más complicada o, en gran parte de los casos, imposible.
Normalmente, los médicos consideran que la curación es posible cuando el estado vegetativo ha durado menos de un mes, en el caso de no que no haya existido un traumatismo en la cabeza; o ha durado menos de 12 meses, cuando ha habido un golpe.
Si el estado vegetativo continúa por más de 6 meses, generalmente es considerado un estado vegetativo persistente; y, mientras más tiempo pase, menores son las posibilidades de curación. Asimismo, después de 6 meses, aunque la persona se recupere, es muy probable que quede con secuelas graves, como dificultades para hablar, caminar o comprender.
Principales causas del estado vegetativo
Usualmente, las causas del estado vegetativo están relacionadas con lesiones o alteraciones del funcionamiento cerebral, razón por la cual pueden incluir:
- Golpes fuertes en la cabeza;
- Accidentes o caídas graves;
- Hemorragia cerebral;
- Aneurisma o ACV;
- Tumor cerebral.
Además, las enfermedades neurodegenerativas, como el Alzheimer, también alteran el funcionamiento correcto del cerebro y, por ende, aunque sea menos usual, también pueden ser la base del estado vegetativo.
Cómo es realizado el tratamiento
No existe un tratamiento específico para el estado vegetativo, razón por la que es necesario que este siempre se adapte a los síntomas que cada persona presenta, así como a las causas que originaron el estado vegetativo. De esta manera, si existen hemorragias cerebrales, es necesario pararlas; y si existe una intoxicación, es necesario combatirla.
Asimismo, es importante ayudar a la persona a realizar las tareas vitales que no logra hacer, como alimentarse, hidratarse y bañarse, por ejemplo. Así, casi todos los pacientes en estado vegetativo deben permanecer en el hospital para que sean alimentados por vía intravenosa y reciban diariamente sus cuidados de higiene.
En ciertos casos, y en especial cuando existe una alta probabilidad de que la persona se recupere, el médico también puede recomendar la realización de fisioterapia pasiva, en la que un fisioterapeuta mueve de forma regular los brazos y las piernas del paciente para impedir que los músculos se degeneren y para mantener funcionales las articulaciones.
