Bromhidrosis: qué es, síntomas, causas y tratamiento

La bromhidrosis es el mal olor corporal, que suele aparecer en las axilas, pies, cuero cabelludo, ingles o alrededor de los pezones, zonas donde se concentran las glándulas apocrinas. Estas glándulas producen sudor, que puede ser descompuesto por bacterias, generando un olor desagradable.

Estas glándulas no se activan hasta la pubertad, por lo que la bromhidrosis suele manifestarse al inicio de la adolescencia. Sin embargo, también puede afectar a personas adultas debido a una higiene inadecuada, al uso de ciertos medicamentos o a problemas de salud, como la diabetes o enfermedades hepáticas.

El tratamiento de la bromhidrosis debe ser indicado por un dermatólogo o un médico general, e incluye el uso de desodorantes antitranspirantes, pomadas con antibióticos o, en algunos casos, procedimientos como la cirugía o el láser para reducir las glándulas apocrinas.

Síntomas de bromhidrosis

Los principales síntomas de la bromhidrosis incluyen:

• Mal olor, incluso siendo realizada la limpieza adecuada en la zona;
• Sudoración excesiva en la región;
• Mal olor que puede empeorar luego de las actividades físicas;
• Descamación de la piel.

Asimismo, el mal olor de la bromhidrosis puede causar vergüenza, ansiedad y baja autoestima, y afectar la calidad de vida.

La bromhidrosis puede surgir en distintas regiones del cuerpo donde las glándulas apocrinas están más concentradas, y el diagnóstico debe ser realizado por el dermatólogo o médico general, que pueden indicar el mejor tratamiento de acuerdo con el tipo de bromhidrosis.

¿Los síntomas pueden aparecer incluso sin sudor?

Sí, los síntomas de la bromhidrosis pueden manifestarse incluso sin una sudoración excesiva.

Esto ocurre porque las bacterias presentes de forma natural en la piel pueden multiplicarse, aunque haya poco o ningún sudor, y degradar la queratina u otras secreciones cutáneas, lo que provoca el mal olor característico.

Cómo confirmar el diagnóstico

El diagnóstico de la bromhidrosis es realizado por el dermatólogo a través de la evaluación de los síntomas, antecedentes de salud y examen físico de la piel.

Generalmente, no es necesaria la realización de exámenes; sin embargo, el médico puede solicitar análisis de sangre o de orina, con el objetivo de diagnosticar enfermedades como diabetes o problemas renales o hepáticos, que puedan estar causando la bromhidrosis.

Tipos de bromhidrosis

De acuerdo con la zona donde ocurre, la bromhidrosis puede ser clasificada en algunos tipos, siendo los principales:

• Bromhidrosis axilar, que se caracteriza por mal olor y olor intenso en las axilas. Vea unos remedios caseros para quitar el mal olor de las axilas;
• Bromhidrosis inguinal, que afecta las ingles debido a la proliferación de microorganismos en la región;
• Bromhidrosis plantar, que ocurre en la planta de los pies, produciendo mal olor. Conozca más sobre el mal olor en los pies. 

Además, también existe la bromhidrosis hormonal, en la que el mal olor es generalizado y ocurre debido a cambios hormonales, siendo más frecuente en adolescentes.

Posibles causas

La bromhidrosis ocurre principalmente como consecuencia de un desequilibrio en la microbiota de la piel.

Cuando esto sucede, las bacterias y hongos presentes en la zona comienzan a proliferar de manera desordenada, lo que promueve la descomposición de las secreciones liberadas por las glándulas y de la queratina presente en la piel, resultando en el mal olor.

Quién tiene mayor riesgo

Algunas condiciones pueden favorecer el desarrollo de la bromhidrosis, estas son:

• Higiene inadecuada de la piel y/o de la ropa;
• Obesidad o sobrepeso;
• Diabetes;
• Consumo excesivo o frecuente de bebidas alcohólicas;
• Consumo de ciertos alimentos, como ajo, cebolla o espárragos;
• Alteraciones hormonales;
• Insuficiencia hepática o renal.

Además, otras causas incluyen fenilcetonuria, trimetilaminuria, infecciones cutáneas como eritrasma o tricomicosis, y el uso de algunos medicamentos, como dupilumab o penicilinas, por ejemplo.

Cómo es realizado el tratamiento

Los principales tratamientos de la bromhidrosis son:

1. Jabones antisépticos o antibacterianos

El uso de jabones antisépticos o antibacterianos puede ser recomendado por el dermatólogo para aplicar en las zonas de la piel donde el olor es más fuerte.

2. Antitranspirantes

El uso de desodorantes antitranspirantes, como los que contienen sales de aluminio, puede ayudar a reducir la producción de sudor por las glándulas y a prevenir el mal olor.

3. Pomadas antibióticas

Pomadas con antibióticos, como clindamicina o eritromicina, pueden utilizarse para disminuir la cantidad de bacterias en la zona afectada. Sin embargo, su uso debe reservarse para los casos más resistentes, ya que el uso prolongado de antibióticos puede favorecer la resistencia bacteriana, dificultando su eliminación.

4. Procedimientos médicos

En personas con sudoración excesiva, pueden indicarse procedimientos que reducen la actividad o la cantidad de glándulas sudoríparas.

Algunas opciones incluyen la aplicación de botox, la cirugía para remover glándulas o el tratamiento con láser. Estas alternativas deben ser valoradas por el dermatólogo cuando los tratamientos anteriores no resultan eficaces.

5. Mantener una buena higiene

Una higiene adecuada es fundamental para controlar la bromhidrosis, ya que ayuda a reducir la proliferación de bacterias en las zonas donde se produce más sudor. Se recomienda:

• Lavar la piel diariamente, prestando especial atención a los pies, axilas e ingles;
• Secar bien la piel después del baño, especialmente entre los dedos y debajo de los pliegues cutáneos;
• Lavar bien la ropa y evitar usarla más de una vez sin lavar;
• Preferir ropa de algodón, fresca y poco ajustada;
• Cambiar a diario los calcetines y la ropa interior;
• Usar sprays o talcos antitranspirantes o antibacterianos para los pies;
• Usar calzado abierto siempre que sea posible.

Además, se recomienda mantener depiladas las zonas donde el olor es más fuerte, como axilas e ingles, ya que el vello facilita la acumulación de suciedad y bacterias, intensificando el mal olor.

¿La bromhidrosis tiene cura?

Sí, la bromhidrosis tiene cura y su tratamiento debe ser orientado por un dermatólogo, con el objetivo de reducir la cantidad de bacterias presentes en la piel.