La angina de Ludwig es una situación que puede presentarse debido a alteraciones que afectan la boca, como abscesos en el segundo o tercer molar, fractura de mandíbula o por la presencia de cuerpos extraños, como piercings.
Este tipo de problema es más común en personas con el sistema inmune debilitado, siendo causada por bacterias que alcanzan el torrente sanguíneo y aumentan el riesgo de complicaciones, como insuficiencia respiratoria y sepsis.
Los síntomas de la angina de Ludwig incluyen aumento de la producción de saliva, fiebre alta, dolor y dificultad para abrir la boca y deglutir. Es importante que el diagnóstico se realice cuando surjan los primeros síntomas, ya que de esta forma es posible iniciar el tratamiento de inmediato, que normalmente incluye el uso de antibióticos.
Principales síntomas
Los signos y los síntomas de la angina de Ludwig generalmente son:
- Aumento de la producción de saliva;
- Dificultad y dolor para tragar;
- Fiebre alta;
- Pérdida de peso;
- Alteración de la voz;
- Elevación de la lengua, lo que puede provocar la sensación de asfixia;
- Presencia de secreción con sangre y olor fuerte;
- Dificultad para abrir la boca correctamente;
- Inflamación del área del procedimiento.
La angina de Ludwig es más común que surja en personas que poseen algunos de los factores de riesgo, como consumo excesivo de bebidas alcohólicas, diabetes, problemas renales, uso de medicamentos inmunosupresores, enfermedades que disminuyan la inmunidad, presencia de piercing en la lengua, anemia aplásica o neoplasias en la cavidad oral.
El diagnóstico de este tipo de angina es muy importante, pues la enfermedad posee una evolución rápida y puede estar asociada a diversas complicaciones. De esta forma, es importante que el diagnóstico sea realizado tan pronto como surjan los primeros signos y síntomas, siendo normalmente indicada la realización de radiografía y tomografía computarizada.
Asimismo, puede recomendarse también la realización de pruebas de laboratorio, como hemograma, exámenes que evalúen la función de los riñones y cultivo microbiológico junto con un antibiograma para que sea identificado el agente infeccioso y el mejor antibiótico para atacarlo.
Causas de la angina de Ludwig
La mayoría de los casos de angina de Ludwig están relacionados con alteraciones en la boca y dientes, como el desarrollo de un absceso en el segundo o tercer molar, caries no tratadas o procedimientos dentales mal realizados, por ejemplo, especialmente en personas con el sistema inmune comprometido.
Estos sucede debido a bacterias como Streptococcus viridans, Staphylococcus aureus o Prevotella melaninogenica, que logran desarrollarse en la zona y diseminarse por el torrente sanguíneo rápidamente, lo que aumenta el riesgo de complicaciones.
Además, la angina de Ludwig también puede surgir debido a fracturas en la mandíbula, absceso en la amígdala, cortes en la mucosa oral, presencia de cuerpos extraños en la boca, quistes o tumores en la zona o sialolitiasis, en que se forman pequeñas piedras de saliva que producen dolor, inflamación y dificultad para deglutir, por ejemplo.
Posibles complicaciones
Las complicaciones de la angina de Ludwig están relacionadas con la capacidad de la bacteria de proliferar y diseminarse rápidamente a través del torrente sanguíneo, afectando otros órganos. De esta forma, puede alcanzar el mediastino, que es una de las cavidades del tórax, y promover la compresión del corazón; o afectar a los pulmones, pudiendo causar insuficiencia respiratoria grave.
Además, debido a la diseminación del microorganismo por el torrente sanguíneo, puede haber también sepsis, que es una situación grave que también puede causar la muerte, pues promueve una alteración en el funcionamiento de los órganos.
Cómo debe ser el tratamiento
El tratamiento para la angina de Ludwig debe iniciarse inmediatamente después del diagnóstico para disminuir el riesgo de complicaciones, siendo normalmente indicado en un inicio el uso de medicamentos o la administración de oxígeno para garantizar que la persona respira correctamente, ya que esta es una complicación grave y común en estos casos. Algunas personas pueden requerir de intubación endotraqueal. Conozca cómo se realiza la intubación endotraqueal.
Además, el tratamiento también requiere de administración de penicilina asociada a otros medicamentos como metronidazol o clindamicina intravenosos para controlar y combatir la infección.
